Gonzalo Fanjul, director de investigación y activista contra la pobreza e impulsor de la Fundación Por Causa, ha defendido en Las Mañanas de RNE que el pacto migratorio que se está preparando en el Parlamento Europeo no está bien orientado. “Es un pacto obsesionado con la impermeabilización de las fronteras exteriores de la UE que aporta una mala solución al reparto de responsabilidad de la protección internacional de los refugiados o solicitantes de asilo”, argumenta. Añade que es un pacto hecho “con mirada electoral de corto plazo y muy marcado por la ultraderecha”.
Fanjul comenta que lo que quiere la ultraderecha es que se vea a la migración como “una amenaza existencial para nuestras sociedades”, lo cual considera un “problema grave”, y este pacto responde, según él, a las peticiones de los grupos parlamentarios “más duros” contra la inmigración.
Sobre la petición de 600.000 ciudadanos al Congreso para que debata una regularización de casi medio millón de migrantes, el investigador lo ha calificado como “una sorpresa” y expresa que ayer fue un día “muy emocionante”. “Es muy poco común que llegue al Congreso una iniciativa apoyada desde la Conferencia Episcopal […] Creo que esta es una iniciativa que representa muy bien el desafío del que estamos hablando […] Hay que regularizar para evitar la pobreza infantil, para que una mujer violada pueda ir a denunciar a una comisaría”, sentencia Fanjul.
En cuanto a las dificultades que puede tener el acuerdo de regularización en su tramitación, el activista es consciente de que “ahora llega el trabajo de los grupos parlamentarios y hay que discutir en la fase de enmiendas y hay que ver cuáles deben ser las condiciones de la regularización”, aunque no cabe duda de que “es una magnífica oportunidad para abrir una conversación sobre el modelo migratorio que necesitamos”.