La empresa Maxar Technologies, que ha venido ofreciendo imágenes satelitales de las posiciones de las tropas rusas de la Guerra en Ucrania, ha elaborado un vídeo en el que puede verse las dimensiones del convoy ruso que se dirige a Kiev.
El convoy parece detenido desde hace días. EE.UU. lo atribuye a la resistencia del Ejército ucraniano y Reino Unido a problemas logísticos, aunque también hay temor de que Rusia haya podido frenarlo con alguna estrategia ofensiva para concentrar sus fuerzas. Según las últimas informaciones del departamento de Defensa de EE.UU. el convoy podría estar a unos 30 kilómetros del centro de la capital.
Ucrania es el tercer país de la Unión Europea, tras Francia y Eslovaquia, que más depende de la energía nuclear. Actualmente tiene cuatro centrales nucleares en funcionamiento, con un total de quince reactores. La mayor de ellas, Zaporiyia, con seis reactores, ha sido objeto de un ataque ruso en las últimas horas.
Jorge Dezcallar, exdirector del Centro Nacional de Inteligencia y exembajador de España en Marruecos, ha asegurado en Las Mañanas de RNE que el ataque de las fuerzas rusas a la central nuclear de Energodar, en la región de Zaporiyia, Ucrania, supone un punto de inflexión en la invasión rusa. “Putin está haciendo cosas alocadas”, expresa Dezcallar, aunque no cree que la nuevaestrategia de Rusia sea el poder nuclear: “Eso significaría ir hacia un “Holocausto nuclear”.
El exdirector del Centro Nacional de Inteligencia cree que “Putin tiene razones pero no tiene razón”, ya que la OTAN le dio garantías a Rusia de no acercarse a sus fronteras, por lo que entiende que los rusos se sienten acosados. “Pero no tiene razón en lo que ha hecho, lo que haría falta sería una conferencia que revisara la estructura de seguridad en Europa, basada en otras reglas compartidas pero ahora es imposible, cuando uno es tan bruto como para invadir al país vecino”, asegura.
Dezcallar cree que Putin ha cometido un “gravísimo error”, con el que ha resucitado a la OTAN, ha restaurado la relación transatlántica y ha colocado a China a una posición incómoda. “Se ha equivocado y, aunque a corto plazo pueda tener una victoria, a medio y largo plazo va a pagar muy caro lo que está haciendo”. Además, subraya que Putin se esperaba “una victoria más rápida” y que no hay duda de que se está sorprendiendo por la respuesta coordinada que está recibiendo desde Occidente, con envíos de armas y ayuda humanitaria a Ucrania. “Estamos en nueva guerra fría, mejor dicho, con Rusia yo diría que es una guerra caliente”, expresa, algo que cree que dejará al mundo en un nuevo paradigma político “más incierto, inseguro y más incómodo para todos”.
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha asegurado este jueves a su homólogo francés, Emmanuel Macron, que su ofensiva sobre Ucrania va "según lo previsto" y se va a recrudecer a menos que ese país acepte sus condiciones, entre ellas su desmilitarización, indicaron fuentes del Elíseo. El líder ruso ha avanzado que su objetivo es lograr el control de toda Ucrania.
FOTO: Vladímir Putin, en una imagen de hace unos días. EFE/EPA/ALEKSEY NIKOLSKYI/SPUTNIK/KREMLIN / POOL
En el noveno día de ofensiva, los ataques de las fuerzas rusas han provocado un incendio en el centro de formación de la central nuclear de Energodar, en la región de Zaporiyia, Ucrania. Los bombardeos a la planta más grande de Europa, y la tercera del mundo, han disparado las alarmas sobre una posible catástrofe al declararse una amenaza para la primera unidad. El fuego ha sido apagado, el inmueble siniestrado se encuentra fuera de la central y los niveles de radiación no se han visto alterados. Informa desde allí Óscar Mijallo en el Telediario Matinal de TVE.
Foto: Un momento del incendio que los ataques de las fuerzas rusas han provocado en la central nuclear de Zaporiyia. Reuters/ Zaporizhzhya NPP
El presidente francés, Emmanuel Macron, ha hablado durante una hora y media por teléfono con su homólogo ruso, Vladimir Putin. Según fuentes del Elíseo, Putin le ha dicho a Macron que los planes rusos avanzan según lo previsto y que va a llevar sus operaciones hasta al final, que va a "desnazificar" Ucrania. Según el Elíseo, Putin dice que Rusia no está atacando a civiles, que son los ucranianos los que les usan como escudos humanos. Por su parte, Macron le habría contestado a Putin que no hay ningún régimen nazi en Ucrania y que está cometiendo un grave error que Rusia va a pagar muy caro. La conversación, a instancias de Putin, habría dejado al presidente francés más persimista, convencido de que nos dirigimos al peor escenairo posible: que Rusia pretende tomar el control total de Ucrania. Fuentes del Eliseo dicen que, tras esa conversación el temor es que "lo peor está por llegar".
Pablo Echenique, portavoz parlamentario de Unidas Podemos, cuenta en una entrevista para el 24 horas, que su partido ha hablado con asesores privados sobre el conflicto ucraniano y reconocen que es ineficaz el envío de armas a ese país porque pueden acabar en manos de Putin. Echenique asegura que esta decisión puede traer consecuencias muy graves e inesperadas. El portavoz insiste en que su partido defiende que haya una desescalada, un alto al fuego y las vías pacíficas y de negociación. "En un conflicto bélico en suelo europeo con una potencia nuclear, nosotros defendemos que haya una desescalada", así lo ha afirmado el de Unidas Podemos.
También ha hablado de los lazos de Putin con la derecha europea, “Putin tiene lazos con la extrema derecha europea, también con Vox. Oligarcas cercanos a Putin financiaron HazteOir, una asociación determinante en el lanzamiento de Vox". Y sobre la posible vuelta del Rey Juan Carlos I a España, Echenique asegura que el Rey no va a dar ninguna explicación a su comportamiento y le preocupa de qué manera estos hechos “humillan” a la democracia española.
China es un actor importante en la guerra en Ucrania. Se alineó con Rusia antes de la invasión frente a Occidente, pero una semana después del comienzo de los combates, Pekín ha evitado dar un apoyo explícito a Moscú.
Francia propuso desde el primer día de la invasión las sanciones económicas más duras como aislar a Rusia del sistema financiero mundial y el envío de armamento. Pero el presidente de la República, Emmanuel Macron, también ha liderado la "estrategia del teléfono rojo": no quiere cerrar la puerta del diálogo con Putin.
Empezó con una ofensiva relámpago que pocos esperaban: Rusia atacó por tierra, mar y aire en tres frentes distintos, pero una semana después no parece haber logrado lo que buscaba. Ahora, con 200.000 soldados dentro de Ucrania, Putin ya no puede dar marcha atrás fácilmente, pero tampoco son suficientes para ocupar el país, y menos con la fuerte resistencia ucraniana. Por eso, Moscú parece cambiar de estrategia y, según los expertos, tiene dos opciones: combates urbanos, o una ocupación de las ciudades "más exterior". Lo que Moscú quiere evitar es una guerra larga, porque si empiezan a llegar cadáveres y las sanciones hacen efecto, quizá a Putin le cueste mantener su tradicional apoyo social.
El Gobierno del Reino Unido fue pionero a la hora de anunciar sanciones económicas contra el régimen de Vladímir Putin y su primer ministro, Boris Johnson, el primero en atreverse calificar al presidente ruso de dictador. "Un agresor manchado de sangre" fueron sus palabras, cuando apenas había comenzado la invasión de Ucrania. Londres ha enviado también ayuda militar y humanitaria.
Laura Alonso, enviada especial de RNE y Sergio Jiménez, con la asistencia técnica, han vuelto al centro de recepción de Dorohusk (Polonia) donde estuvieron hace cuatro días. Nos cuentan que la imagen es muy diferente, hoy hay menos de la mitad de refugiados y el exterior del centro está prácticamente vacío. Laura ha hablado con Ana, quien ha acogido en su casa a una mujer y sus dos hijas: “Ahora por suerte ya están en Italia”. También a Italia va a viajar Anastasia con su hijo David que nos cuenta que sólo tiene ganas de llorar. Aunque la situación es diferente a la de hace unos días, estos refugiados han dejado atrás a familiares en Ucrania que, según ellos, no saben qué hacer porque le tienen miedo a Putin.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelensky, ha protagonizado una rueda de prensa televisada. En ella, ha insistido en que Ucrania no se rinde y ha pedido hablar con Putin, ya que cree que es la única manera de parar la guerra. De lo contarrio, aventura que el conflicto se extenderá más allá de su país y que podría llegar hasta "el muro de Berlín". Ha agradecido a Occidente la ayuda enviada, aunque ha reconocido que ha llegado tarde.
Pocos minutos después, aparecía en televisión el presidente ruso, Vlaidmir Putin, en este caso, a través de un discurso grabado en vídeo. "Nunca dejaré de creer que rusos y ucranianos son un solo pueblo, a pesar de que algunas personas en ucrania han sido intimidadas por la propaganda nacionalista nazi", ha dicho Putin. Se ha felicitado por la buena marcha de la campaña militar en Ucrania y ha prometido ayudas a los familiares de los soldados muertos en combate.