Los líderes europeos se fijan un calendario estricto para completar la unión bancaria

• El mecanismo de resolución de entidades debe estar listo en primavera
• El supervisor bancario común  comenzará a funcionar dentro de un año
• Los líderes de la UE piden crear un mercado único digital para 2015

El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, en la rueda de prensa posterior a la primera jornada de la cumbre europea

Los líderes europeos han reafirmado su compromiso con la unión bancaria al fijarse un calendario estricto para aprobar cada una de las piezas que quedan pendientes para concluirla. Así, el supervisor bancario común  comenzará a funcionar en noviembre de 2014 -cuando asumirá la supervisión directa de  los 130 mayores bancos de la zona euro- y, antes, en primavera, se pretende tener listo el mecanismo de resolución que defina el proceso de saneamiento -o en su caso, liquidación- de los bancos.

Durante el primer día de la cumbre europea -centrada en el supuesto espionaje de la Agencia Nacional de Seguridad de EE.UU. a varios líderes europeos-, los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea (UE) se han comprometido a aprobar en diciembre las  características principales de los contratos que los países de la  eurozona deberán firmar en el futuro con las reformas a las que se  comprometen, así como de los "mecanismos de solidaridad asociados"  para financiar estas reformas.

También en diciembre, se procederá a un diagnóstico común de la situación económica en los Estados miembros y en la zona del euro y, para ello, se celebrará un debate sobre ese panorama, una vez se hayan publicado el Estudio Prospectivo Anual sobre el Crecimiento y el Informe anual sobre el mecanismo de alerta.

Además, los líderes han recordado "la urgencia" de que los países que participarán en el supervisor adopten un planteamiento europeo coordinado de cara a la evaluación global de los bancos por parte del Banco Central Europeo (BCE), que consistirá en unas pruebas de resistencia y de la  calidad de activos que comenzarán el próximo mes y durarán un año.

Los líderes han subrayado la necesidad de cooperar plenamente con el BCE para "garantizar una transparencia absoluta y un planteamiento riguroso" de las pruebas, esencial para su credibilidad.

Los Estados miembros deben tener todo preparado, incluidos los mecanismos nacionales de protección, para responder ante eventuales necesidades de capital o rescates, según han señalado.

Aclarar la recapitalización directa en noviembre

En todo momento se aplicarán las normas sobre ayudas estatales, que prevén que los bancos reúnan el capital que necesiten por sus propios medios, acudiendo al mercado o imponiendo quitas sobre sus accionistas y bonistas júnior, antes de recurrir a fondos públicos nacionales.

Solo en última instancia podrán hacer uso de los instrumentos europeos, aunque cómo se articulará ese recurso aún debe acordarse: los ministros de Economía deberán cerrar el planteamiento europeo "antes de finales de noviembre" para que el BCE pueda comenzar sus análisis a la banca con ese frente resuelto.

Además, el Eurogrupo debe ultimar las directrices para la llamada recapitalización directa de los bancos, es decir, de qué forma y en qué situaciones, el fondo europeo de rescate podrá inyectar directamente capital en las entidades con problemas.

En esta cuestión, no se ha conseguido avanzar y persiste el enfrentamiento entre Alemania y los  países con t-riple A -que sostienen que los mecanismos de asistencia  deben ser nacionales- y otros países como Irlanda, que reclaman la  intervención del fondo de rescate con la recapitalización directa. Sobre  este punto, España asegura encontrarse "muy cómoda" con su situación y que no va a dar batalla,  porque ya ha "hecho los deberes" con el rescate bancario.

El mecanismo común de resolución, en primavera

Por otra parte, los líderes consideran urgente completar la unión bancaria con un mecanismo común de resolución que defina el proceso que se seguirá para sanear -o en su caso, liquidar- los bancos. Hasta que ese mecanismo esté creado, se seguirá la directiva sobre rescate y resolución de bancos, que establece en qué orden se aplican las pérdidas a cada uno de los pasivos (acciones, preferentes y deuda subordinada).

Por ello, los jefes de Estado y de Gobierno piden que antes de finales de año se apruebe la directiva que define quién debe asumir pérdidas en caso de rescates  bancarios y la que armoniza los sistemas de garantía de depósitos.

Según el calendario fijado, los ministros de Economía deberán cerrar un acuerdo sobre la  autoridad que guiará esos procesos de resolución y el fondo único de liquidación  antes de final de año, para  que el Parlamento Europeo lo ratifique en primavera, antes de las  elecciones europeas de  mayo de 2014. Pero no han avanzado en quién  será esa autoridad -la  Comisión ha propuesto asumir estos poderes, pero  Berlín lo rechaza- a  la espera de que se forme un nuevo Gobierno en  Alemania.

Mercado único digital para 2015

Además, los líderes europeos han pedido la creación de un mercado único digital para 2015, al considerar que la actual fragmentación del mercado es un obstáculo para liberar el potencial de ese sector y que favorezca el crecimiento económico y la creación de empleos.

"Si queremos ser serios sobre el mercado único, tiene que ser digital", ha destacado el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy.

Van Rompuy ha señalado que el mercado digital "todavía está fragmentado". "Nuestra infraestructura estará pronto desfasada, las empresas están luchando por contratar a los especialistas en tecnologías de la información que necesitan", ha dicho.

Entre otros aspectos, los líderes han subrayado que el suministro de servicios y contenidos digitales en todo el mercado único exige la implantación de un régimen de derechos de autor "propio de la era digital" y, por ello, han recordado que la Comisión Europea finalizará en la primavera de 2014 su actual examen del marco de la UE en materia de derechos de autor.