Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

En una cueva de las remotas montañas siberianas ha aparecido un pequeño trozo de hueso, de apenas dos centímetros, perteneciente a una adolescente que vivió hace más de 50.000 años. Los análisis genómicos realizados por investigadores del Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva en Alemania han revelado un resultado sorprendente: la madre de la joven era una neandertal y su padre un denisovano, los dos grupos de homínidos extintos que habitaban Eurasia mientras se expandían los humanos modernos.
 

El hallazgo de un maxilar de Homo sapiens con todas sus piezas dentales en una cueva de Israel, que ha sido datado como el fósil humano más antiguo encontrado fuera de África, ha revelado que los humanos modernos, que surgieron hace entre 300.000 y 200.000 años en ese continente, salieron de allí 60.000 años antes de lo que se pensaba hasta ahora. María Martinón-Torres, directora del Centro Nacional de Investigación sobre Evolución Humana (CENIEH), es una de las científicas que ha participado en el estudio.