Hoy en Estados Unidos las banderas ondean a media asta en señal luto.
La fiscalía federal le acusa de seis asesinatos y del intento de matar, entre otras personas, a una congresista demócrata en un acto político.
- Ha declarado que lo mató tras asistir a un encuentro religioso
- El gobernador había sido acusado de blasfemar
"Ha habido un tiroteo en Safeway en Oracle, donde estaba Gabrielle Giffords". Es la llamada al teléfono de emergencias minutos después del tiroteo de Tucson en el que murieron dos personas, entre ellas una niña de 9 años, y resultó herida la congresista Gabrielle Giffords. En la puerta del hospital donde permanece ingresada decenas de ciudadanos intentan darle ánimo con esta vigilia. Velas, globos y cartas para recordarla a ella y a las demas víctimas de la masacre.
Los médicos de momento son optimistas, pero con cautela, después de que la congresista Giffords haya empezado ya a comunicarse con gestos. Y parte de este milagro es gracias al que ya han bautizado como su ángel de la guarda: Daniel Hernandez, un joven de 20 años que empezó a trabajar para Giffords hace unos meses como becario, taponó su herida y permaneció a su lado.
Jared Lee Loughner asesinó en un mitín a seis personas y dejó herida de gravedad a la congresista Gabrielle Giffords. Las fuerzas de seguridad buscan ahora a un hombre moreno de entre 30 y 40 años que dejó al asesino en el lugar de los hechos.
Uno de los vídeos colgados en la cuenta de YouTube de Laughner
- El sospechoso de la masacre de Arizona carga con un recorrido problemático
- Fue expulsado de la universidad y no lo aceptaron en el Ejército
El Gobierno mexicano, a través de su Ministerio del Interior, ha condenado la matanza ocurrida en la ciudad turística de Acapulco (sur del país), donde supuestos sicarios del crimen organizado mataron al menos a 24 hombres en las últimas horas. La fuente no mencionó el número de muertos, pero autoridades de Guerrero, donde se localiza Acapulco, informaron sobre al menos 24 hombres asesinados, 15 de ellos decapitados y abandonados frente a un centro comercial de Acapulco. Además de esos 15 decapitados, el crimen organizado mató a otros nueve hombres en las última horas, dos de ellos policías que fueron atacados a tiros la noche del viernes. Esta es la primera matanza de 2011, después de que 2010, con más de 10.000 muertos, fue el año más violento desde que en diciembre de 2006 el presidente de México, Felipe Calderón, lanzara una guerra frontal contra el crimen organizado.
- Expertos religiosos se han mostrado a favor del asesinato
- En Facebook, 2.000 personas también han mostrado su respaldo
El gobernador de la provincia oriental paquistaní de Punyab, Salman Tasir, asesinado por su oposición abierta al integrismo islámico, ha sido enterrado este miércoles en una ceremonia a la que acudieron la plana mayor de su formación, el gobernante Partido Popular (PPP), y cientos de militantes.
- Ha acudido la plana mayor de su formación, el PPP
- Cientos de anónimos han querido estar presentes
- Una segunda prueba de ADN ha permitido verificar su inocencia
- Disfrutaba de la libertad condicional desde el pasado julio
Salman Tasir era partidario de acabar con la ley antiblasfemia. Es el primer magnicidio que se produce en Pakistán desde el de la ex primera ministra Benazir Bhutto hace tres años.
Ha muerto por los disparos efectuados por uno de sus hombres de seguridad cuando estaba en un mercado de Islamabad. Salman Tasir era el blanco de los islamistas por manifestarse en contra de las leyes antiblasfemia.
El gobernador de la provincia del Punjab, una de las más importantes de Pakistán, ha muerto en un tiroteo en el centro de Islamabad, en un incidente que puede aumentar más la tensión en el país en plena crisis política.
- El asesinado era un concejal
- Ha muerto a manos de un sicario
- El presidente le ha calificado como un "asesino de asesinos"
- Se le atribuyen más de 3.000 asesinatos y tenía 15 órdenes de captura
- Habían recurrido la defensa, la acusación particular y las acciones populares
- El TS confirma la condena a 12 años y medio por el homicidio de la joven
- Además asegura tener constancia de 24 desaparecidos y 90 torturas
- Defiende que los datos probablemente no "ilustran la magnitud del problema"
- El Gobierno eleva a 45 los asesinados, "la mayoría" de esa religión
- Los acusaban de propagar la enfermedad por brujería. Algunos fueron lapidados