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Daniel García, subinspector del Cuerpo Nacional de Policía, logró mantener a flote a una vecina que estaba siendo arrastrada por la corriente de agua en Benetúser por la DANA, justo después de haber salvado a otra mujer. Lo hizo con una cuerda improvisada con unas sábanas.

Él se encontraba ya fuera de servicio y estaba mirando por la ventana junto a sus dos hijos, todo ello mientras veían aumentar la crecida de agua en la calle. Vio a una primera vecina en el agua, Amparo, e intentó salvarla tirándose al agua, pero no pudo. “Mis hijos y yo improvisamos una cuerda con sábanas y cortinas y se con una mancuerna se la lancé a la chica y la rescatamos”, cuenta al Canal 24 horas.

Acto seguido, una señora más mayor, Mari, empezó a pedir auxilio. Saltó junto a su hijo a la casa de la mujer y, con ayuda de otros vecinos, elaboraron varias cuerdas con las que mantener a la mujer en el sitio y que el agua no se la llevara. “Estuvimos tres horas y media sujetándola a pulso”, explica, todo ello mientras la corriente no cesaba. Además del esfuerzo físico, también se empeñó en animar a la mujer, que hubo momentos en los que quiso dejarse llevar: “Me dejé la garganta, la voz y el alma en recordarle que tenía familia, que no se soltara”.

Entre las víctimas hay una mezcla de emociones: incertidumbre, miedo, culpa y remordimientos por sentir que podrían haber hecho algo más. Los servicios de atención psicológica les ayudan a estructurar toda esa información. Muchas personas continúan con amigos y familiares desaparecidos y es esencial que reciban información para conocer que no están solos.

El apoyo emocional a una víctima de una catástrofe de este tipo es esencial.

Imagen: EFE/Kai Försterling

Los periodistas de RNE recorren algunos de los pueblos de la provincia de Valencia que más han sufrido la DANA. Paiporta ha sido la localidad más golpeada. Allí han fallecido, al menos, 62 personas. Los vecinos recorren las calles de su municipio cargados de agua y alimentos básicos. Se han quedado sin nada. “El pueblo está arrasado, ha desaparecido”, afirma una de las vecinas a RNE.

En Alfafar, otro de los municipio más afectados, el barro empieza a secarse y permite aligerar el paso de las personas que intentan dirigirse hacia Valencia para conseguir alimentos. Porque los supermercados están vacíos. 39 personas han sido detenidas por saquear los comercios. “Se han llevado todo. No tenemos comida, ni agua ni leche. Se han llevado hasta dinero mojado de las cajas”, cuenta un vecino a RNE.

En Chiva, los vecinos de la zona siguen sacando el barro de sus casas. “El temporal se ha llevado mi peluquería y el coche. Mi vida se ha ido en una tarde”, lamenta una vecina en RNE.

Mientras tanto, la Ciudad de la Justicia de Valencia centraliza la recepción de las personas fallecidas. El Instituto de medicina legal de Valencia está desbordado y este jueves está previsto que lleguen nuevos refuerzos.

En Castilla-La Mancha la DANA ha dejado por el momento dos personas fallecidas, una en Mira (Cuenca) y otra en Letur (Albacete). En esta localidad, cinco personas siguen desaparecidas. Los equipos de rescate trabajan en las pozas del arroyo y en la rambla, ya con maquinaria pesada. Si no se localizaran la totalidad de los desaparecidos, se plantean ampliar la búsqueda al río Segura y al embalse del Cenajo. En el casco viejo, las casas están siendo apuntaladas Informa Luis Escribano, RTVE Castilla-La Mancha.

En RNE Audio.

Raúl Esteban, jefe de bomberos de Alcorcón, explica en Mañaneros qué hacer en el caso de que nos quedemos encerrados en el interior de un vehículo durante el paso de la DANA.

Si el agua aún no alcanza el coche a mucha altitud, Esteban recomienda salir del vehículo inmediatamente. Sin embargo, si el agua ya ha subido demasiado, entonces hay que intentar romper o las ventanillas o la luna del vehículo.

Lo más importante es conseguir salir y sujetarse al coche hasta que los servicios de emergencia nos localicen y acudan al rescate.

El epicentro de la DANA amanece con barro y montañas de coches que se podrían tardar días en retirar. Los vecinos buscan desesperadamente a familiares y amigos. En algunos casos, llevan un día y medio sin saber nada de ellos. Labores de rastreo que coordinan los bomberos y los equipos de rescate. La búsqueda se desarrolla sobre todo por tierra, porque no hay previsión de medios aéreos. Algo que se prevé difícil, porque siguen cortados varios tramos de la A3, la A7 y carreteras secundarias, así como el servicio de trenes.

En las calles de Paiporta, Utiel, Picaña y Alfafar, el shock inicial da paso a la desesperación. Continúan limpiando, achicando agua y deshaciéndose de lo que ahora son solo residuos y a la espera de una respuesta de las aseguradoras.

De los afectados, los más afortunados han podido dormir bajo su propio techo, aunque en algunos pueblos siguen sin agua y sin luz.

Casi 500 personas en toda la Comunidad Valenciana han pasado la noche en albergues. Otros, los que siguen atrapados en las carreteras, se han conformado con sus coches para no dormir a la intemperie.

Una incertidumbre, mezclada con el recuerdo, aún muy presente, de las históricas inundaciones. La esperanza, como único motor para seguir en una provincia que jamás se vio tan devastada.

FOTO: AP Photo/Manu Fernandez

Ángel Martínez Puy, jefe del tercer batallón de la Unidad Militar de Emergencias, ha estado en Las Mañanas de RNE con Josep Cuní explicando las labores que están desarrollando para rescatar y atender a las personas afectadas por las consecuencias de la DANA. Martínez Puy cuenta que ayer se hizo un vuelo de reconocimiento en la que la Dirección de Emergencia constató que "no había personal aislado en zonas altas o en edificios" en Utiel.

En este momento, la UME se centra en hacer una labor de "búsqueda y rescate casa por casa, edificio por edificio, para encontrar a las personas que se encuentran aisladas o que necesiten algún tipo de asistencia especial, como puede ser abastecimiento o algún tipo de medicina, y que acudan ahí los servicios de emergencias", explica el entrevistado.

Samuel A. Pilar, enviado especial de RTVE.es a Paiporta, 'zona cero' de la DANA en Valencia, relata que los vecinos se quejan de falta de ayuda, en especial de agua. Los equipos de rescate y la UME están allí, pero no dan abasto. "Hay actos de pillaje, tanto de cosas necesarias, básicas (agua, alimentos, material higiénico), pero hay que gente que ha aprovechado para llevarse agua, perfumes, gafas de sol... Hay mucho miedo a abandonar sus casas por esos actos de pillaje".

"Todo está prácticamente cortado, lleno de coches amontonados. El que más o el que menos ha perdido el coche", añade en La Hora de La 1.

Foto: Samuel A. Pilar

Elena Pascual, coordinadora del grupo de Trabajo de Urgencias, Emergencias y Catástrofes del Colegio Oficial de la Psicología de Madrid, ha estado en Las Mañanas de RNE con Josep Cuní para hablar de la situación que viven las personas que sufren los efectos de la DANA. La coordinadora afirma que, ante la incertidumbre propia de estos momentos, lo mejor es "recibir toda la información posible", pero admite que no es fácil de gestionar porque "es muy reciente todo lo que acaba de ocurrir y hay que seguir trabajando en ello".

Pascual indica que los profesionales de la psicología están "preparados para amortiguar esta situación dentro de ser difícil y complicada", pero que en el caso de que las víctimas de la DANA no puedan acceder a estos servicios "el remedio es apoyarse en su red más cercana: familiares, amistades... y esperar a recibir noticias, que es lo más difícil".