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Bolivia y Chile son los ejemplos más recientes de que las democracias se debilitan, reconocen los expertos del Instituto Internacional para la Democracia. "No están siendo capaces de responder a las expectativas crecientes de la población en términos de la provisión de bienes y servicios públicos", explica un analista. En 1975, solo el 36% de la población vivía en democracia, hoy es el 57%. Pero el estudio de IDEA alerta de que en la última década se han debilitado la mitad de las democracias del mundo. La corrupción, la desigualdad y la desinformación son algunas de las razones.

América Latina copa titulares estos días, con la inestabilidad saltando de un país a otro, de Chile a Argentina pasando, sobre todo estos días, por Bolivia. Allí, el vacío de poder amenaza con prolongar la crisis política e institucional. Las mañanas de RNE con Íñigo Alfonso analiza las perspectivas del continente con Anna Ayuso, investigadora principal para América Latina en el CIDOB, en una mañana en la que también nos ocupa Cuba porque Felipe VI se ha convertido en el primer rey de España que viaja a la isla en visita de Estado.

Un edificio patrimonial del centro de la capital chilena ha sido incendiado por encapuchados este viernes durantes las protestas contra el gobierno del presidente Sebastián Piñera, que cumplen tres semanas de disturbios y que han dejado al menos 20 muertos. Entre otros incidentes, también se ha producido el allanamiento de la embajada de Argentina en Chile cuando un grupo de personas ha ingresado al jardín del edificio.

En la capital de Chile, las protestas contra el gobierno de Sebastián Piñera se extienden hacia los barrios más ricos de la ciudad, como el de la Providencia. Santiago se ha convertido en el epicentro de las movilizaciones que cumplen ya tres semanas.

Los enfrentamientos se han producido a las puertas, incluso, del Costanera Center, el centro comercial más grande de Latinoamérica y un ícono del crecimiento económico del país. Algunos encapuchados han reventado escaparates y saqueado negocios.

Las manifestaciones, las más graves desde la caída de la dictadura, se iniciaron hace 20 días como respuesta al aumento del billete del metro pero pronto se transformaron en una protesta contra la desigualdad. Gasta el momento ha habido al menos 20 muertos. Varias organizaciones de derechos humanos han denunciado la dureza utilizada por la fuerzas de seguridad. La Fiscalía investiga la participación de varios agentes en la muerte de cinco personas.

Se recrudecen las protestas en Chile que dejan ya 23 muertos según la Fiscalía del país. Algunos organismos acusan a las fuerzas de seguridad de cometer graves violaciones de derechos humanos. El presidente, Sebastián Piñera, niega que haya habido abusos y asegura que no dimitirá porque -dice- fue elegido democráticamente por la mayoría de los chilenos.

Lo han llamado superlunes. 70 organizaciones sindicales y sociales convocaron este lunes marchas pacíficas en la capital chilena, que acabaron siendo violentas en Plaza Italia, el epicentro de las protestas que comenzaron ya hace 18 días.

"Estamos en la calle por dignidad, por trabajo, por salud, por vivienda, porque tenemos derechos que no están siendo respetados en este país", decía uno de los manifestantes.

El Instituto Nacional de Derechos Humanos denuncia la violencia de los agentes en las manifestaciones. Desde que comenzaron hay cuatro mil detenidos y han muerto 20 personas según el Gobierno, 23 según la Fiscalía. Cruz Roja ha contabilizado tres mil heridos. El lunes durante las manifestaciones dos mujeres policía salieron ardiendo cuando les lanzaron varios cócteles molotov.
 

Los chilenos han vuelto a manifestarse este sábado en Santiago y en otras ciudades del país para pedir el cambio de gobierno y la lucha contra la desigualdad social. Las protestas ya han producido que la COP tenga que trasladarse a Madrid y numerosas pérdidas en el turismo. 

Naciones Unidas decide la semana que viene si traslada a Madrid la vigesimo quinta cumbre del Clima, que debía celebrarse en Chile en diciembre, y que se ha cancelado por los disturbios en el país. El gobierno español en funciones se ha ofrecido a acoger la cita en las mismas fechas, del 2 al 13, en Madrid. No es la única capital que se ha postulado como sede de la cita multilateral, pero España ha recibido el respaldo del presidente chileno, Sebastian Piñera, que así se lo ha trasladado a Naciones Unidas.
 

Las movilizaciones, que nacen en contra de las políticas del gobierno chileno, han congregado a más de un millón de personas y se saldan con 19 muertos. El presidente de Chile, Sebastián Piñera modela un tercio de su ejecutivo donde destaca la destitución del que hasta ahora estaba al frente de Interior.