Nuevo ciberataque, esta vez contra una empresa estadounidense de software, Kaseya. De gran importancia porque la firma da servicios a 40.000 organizaciones en todo el mundo y el alcance del ataque se ha multiplicado. Deja cifras récord: un millón de sistemas afectados y un rescate de 70 millones de dólares en bitcoin que los criminales exigen para desbloquear las redes.
La aplicación de pago a través de móvil, Bizum, duplicó su actividad en 2020, y ahora cuentan con más de 16 millones de usuarios. Precisamente, en este aumento de sus transacciones económicas se han fijado los ciberdelincuentes. Las víctimas más habituales son los usuarios con poco experiencia en pagos online.
Con Paco Camas hablamos de ciberataques, algo común y ya normalizado en la sociedad digital en la que vivimos. El secuestro digital de los datos, como el que sufrió el SEPE, con un precio para el rescate, es habitual.
Para una pequeña empresa, se suelen pedir entre unos 2.000 y 50.000 euros. Según los últimos datos del Instituto Nacional de Ciberseguridad se han producido en España 133.555 ataques en el último año. Los usuarios particulares también se ven afectados, pero sobre todo las pymes.
El 60% de las pymes europeas que son vítimas de un ciberataque, cesa su actividad seis meses después. Es decir, no son capaces de reponerse. El coste medio es de 35.000 euros.
El equivalente a 11 millones de dólares en bitcoins... Otra empresa estadounidense cede pagando ese rescate a los conocidos como ciberataques ransomware... La mayor cárnica del mundo lo reconoce una semana y media después de cerrar sus plantas por un hackeo, al parecer de un grupo con base en Rusia... Bastante menos, el equivalente a unos 4 millones de dólares en bitcoins, pagó Colonial Pipeline para recuperar el control del mayor oleoducto del país...Su director ejecutivo se defendió esta semana en el Congreso...El FBI ha recuperado recientemente gran parte del rescate en una operación pionera... Los congresistas piden a la compañía que use esos millones para ciberprotegerse...Un nuevo grupo federal especializado investiga más de 100 ciberataques como éste...¿El mensaje? Ojo, porque el bitcoin también se puede rastrear...
Los ciberataques se han triplicado durante este año. La última víctima ha sido la mayor empresa cárnica de EEUU. En España, las PYMES son las más afectadas. Entre ellas, los minoristas y los centros de llamadas se llevan la peor parte. Desde Europa contemplan invertir parte de los fondos en ciberseguridad. Informa María Lladró.
En Estados Unidos, el FBI ha atribuido el ciberataque al mayor procesador de carne del mundo a REvil, un cártel de ciberdelincuentes relacionados con Rusia. Es el último de un tipo de ciberataques empezaron hace en torno a una década, pero cada vez tienen mayor impacto: comprometen infraestructuras clave para obtener suculentos rescates. Los ciberataques 'ransomware' son como un secuestro... pero de datos.
2020, año de confinamientos, fue especialmente fructífero para los ciberdelincuentes. Las mafias son cada vez más profesionales y eso hace que las empresas tengan que estar cada vez más preparadas. Según el último informe de la aseguradora Hiscox, que incluye empresas de varios países europeos, a una microempresa de hasta 9 trabajadores le cuesta de media reponerse de un ciberataque 8.300 euros, pero existen máximos de 280.000 euros, lo que supone la muerte de esa compañía. En las grandes, los costes se contienen en los 22.000 euros. Un informe de Google señala que el 60% de las pymes europeas desaparece meses después de un ciberataque; el coste es 35.000 euros de media.
Con Francisco Valencia, director general de SecureIt, Marco Antonio Lozano, responsable de Ciberseguridad para Empresas de Incibe, el Instituto Nacional de Ciberseguridad, ejemplos concretos de pequeñas y medianas empresas, que sufren menos ataques, pero son más vulnerables, el ciberataque del Servicio Público de Empleo (SEPE), con su director, Gerardo Gutiérrez, y testimonios de un afectado y del representante de los trabajadores.
Mar España, Directora de la Agencia Española de Protección de Datos, ha dicho en Las mañanas de RNE que la campaña "Lo paras o lo pasas" tiene como objetivo concienciar y proteger a las personas de los delitos en Internet. "A veces se difunden datos sensibles como una relación sexual o un ciberacoso, que pueden acabar destruyendo para siempre la vida de una persona y toda su familia".
Cree que mucha gente no es consciente de las consecuencias que puede tener difundir algo en las redes. "Seguramente no somos conscientes, estamos en la cultura de la inmediatez. Se tarda un segundo en compartir, puede ser irreflexivo. Aunque tu no hayas grabado y reenviado, si colaboras y no lo paras estás siendo cómplice", ha dicho.
Reciben principalmente denuncias de casos de gente joven, pero también de adultos. Han puesto en marcha un canal prioritario en su página web para denunciar publicaciones en redes sociales. Analizan cada caso en menos de 24 horas. "Lanzamos esta iniciativa tras el suicidio de una mujer. Con todas las empresas que se han adherido estamos consiguiendo una efectividad alta", ha explicado. Cree que la Ley actual es suficiente, pero que hacen falta más medios. "No hay que reforzar la Ley, hay que reforzar los medios de la agencia. Porque 358 reclamaciones es la punta del iceberg de lo que está pasando en las redes. Tenemos que trasladar entre todos que en Internet también hay consecuencias. Igual que en un accidente en la carretera la policía judicial va a ver la marca del neumático, en Internet vamos dejando huella digital", explica.