Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

Hace un año, el caos durante la retirada de las tropas de la OTAN supuso muchas críticas al presidente estadounidense, Joe Biden, y su popularidad empezó a hundirse. Sin embargo, él siempre ha defendido la decisión de salir de Afganistán y poner fin a una guerra de 20 años, la más larga que ha librado Estados Unidos.

Entretanto, muchos refugiados siguen luchando para llevar a sus familias a Estados Unidos.

Foto: EFE/EPA/STRINGER

Cuando se cumple un año del retorno de los talibanes a Kabul, nos interesamos por los que quedan dentro del país. Un aniversario "de la oscuridad y del dolor del pueblo afgano" sentencia Hamed Wahdat Ahmadzada, exdiplomático afgano y gestor de proyectos internacionales en la Universidad Autónoma de Madrid. En el informativo 24 horasinformativo 24 horas, señala que muchos avisaron de que iba a ocurrir y critica que se intente hacer ver que el régimen talibán ha cambiado. Aun así, afirma que, a nivel interno los talibanes son mucho más frágiles que en 1996, al igual que la sociedad, que sigue manifestándose en contra del régimen, especialmente las mujeres. Aunque afirma que "nadie está protegido" tanto físicamente, como económicamente. "Son rehenes a manos de un grupo extremista y a su merced [...] Ni hay paz, ni hay pan", concluye.

El exdiplomático se muestra confiado con el diálogo de la comunidad internacional pero opina que "la mayoría de las conversaciones no han tenido el fruto que se esperaba". Pide que siga la presión a nivel internacional y que no haya reconocimiento del régimen. Avisa, además, de que recluir a los talibanes en Afganistán y no tomar medidas, puede ser un arma de doble filo para el resto del mundo. "El terrorismo, el fanatismo y el extremismo no se pueden contener a largo plazo y tarde o temprano esto explotará", avisa. Sobre la Unión Europea, agradece el trabajo de gestión de la evacuación de los afganos pero reclama que no se olviden de ellos. "El sentimiento de abandono de hace un año sigue vigente dentro de nuestro pensamiento", lamenta Ahmadzada.

En el terreno de la igualdad y los derechos de la mujer, declara que se las está tratando de "encarcelar" dentro de sus hogares y pone en valor su lucha por sus derechos en el país. "Si hay un ejemplo de voluntad, de fuerza, de coraje, ha sido la mujer afgana [...] ¿Qué más pueden perder? Están poniendo todo a riesgo para poder conseguir la mínima libertad", declara y pide que se siga su estela.

"Siempre he dicho que lo último que pierde un afgano es la esperanza y veo a muchos sin esperanza. Ya no tienen fuerza para luchar", sentencia Ahmadzada y añade que de momento no tienen ninguna alternativa política y que su única opción es salir del país a la espera de un cambio.

Los talibanes y sus simpatizantes celebran su primer año en el poder en Afganistán, pero la retirada de la ayuda internacional y el aislamiento del régimen han deteriorado gravemente la economía y la política del país.

Amnistía Internacional acusa a los talibanes de desmantelar los reducidos avances logrados en los últimos 20 años y asegura que las violaciones de los derechos humanos y el acoso contra la prensa o la oposición, así como la tortura, van en aumento.

Los atentados no han cesado y, además, tras la retirada estadounidense, Pakistán, Rusia y sobre todo China pugnan por llenar el vacío dejado por Washington en un país con un régimen sin reconocimiento internacional que intenta presentarse como moderado y confiable a punto de pasar a engrosar la lista de conflictos olvidados.

FOTO: Wakil KOHSAR / AFP

Un año de la llegada al poder de los talibanes en Afganistán. En Las Mañanas de RNE realizamos un retrato del país y analizamos su situación 365 días después de la caída de Kabul con Andrés Zaragoza, portavoz Sobre Afganistán de Amnistía Internacional, con Chema Gil, profesor colaborador del Centro Universitario ISEN de Cartagena y Co director del Observatorio Internacional de Seguridad y con Mohhammad Hamed, refugiado afgano que vive en España.

Andrés Zaragoza definiría este año para Afganistán como “el incumplimiento de las promesas de los talibanes.” Desde Aministía Internacional explican que el país se encuentra en una crisis de Derechos Humanos sin precedentes y una crisis humanitaria donde se calcula que el 90% de la población está pasando hambre. Zaragoza asegura que las ayudas se han reducido porque el “Gobierno de Afganistán no está reconocido y los donantes no dan dinero.” Además, explica que la gente está huyendo porque las represalias son tremebundas y lo usan como arma para atemorizar a la población. En relación con las mujeres, pone de manifiesto que 9 de cada 10 mujeres han denunciado violencia machista, hay 30 leyes sobre las mujeres y los talibanes utilizan la violencia sexual también como arma.

Chema Gil considera que los talibanes y Al Qaeda son indisolubles y que la situación es de inseguridad total. Sobre los refugiados afganos que han llegado a España, Gil considera que España se comprometió a sacarlos y ha cumplido. Mohhammad Hamed ha explicado que la situación era muy mala y que tuvo que salir del país porque en “Afganistán ya no hay futuro.” Ha contando su historia, era juez en su país, pero que ahora muchos se han ido porque ahí ya no cumplen las leyes que había. Además, ha asegurado que los talibanes no han dejado una buena situación ni a hombres ni a mujeres.

Se cumple un año de la caída de Kabul y del regreso del régimen talibán a Afganistán. Se calcula que unas 3.900 personas han llegado a nuestro país desde Afganistán en los últimos 12 meses y en Las Mañanas de RNE conocemos cómo es la situación actualmente con Áliva Díez, coordinadora de Acogida de CEAR, que explica que es un poco más lenta de lo que se esperaba porque también “el conflicto en Ucrania ha movido un poco el foco de visibilidad y de preocupación con la población afgana”. Y asegura que cuando "colisionan varios eventos internacionales todo ese foco político se mueve y parece que lo demás está solucionado."

Sobre la acogida de los afganos que han llegado a España, Áliva Díez explica que lo que más está costando es que consigan una autonomía real y que para ello necesitan encontrar trabajo y que la principal barrera suele ser el idioma. Díez asegura que llegan a espacios de acogida donde todas sus necesidades básicas están cubiertas y están acompañados por un equipo multidisciplinar. El sentimiento de las personas que llegan desde Afganistán, afirma la coordinadora de Acogida de CEAR, es de culpa por los que se han quedado en el país y al mismo tiempo de privilegio por poder salir.

El día a día de las profesoras afganas se ha vuelto cada vez más complicado. Deben usar hijab negro largo y una mascarilla para impartir las clases. Tampoco pueden beber agua mientras dan clase. Los talibanes han cerrado los colegios para niñas mayores de 13 años y ejercen un fuerte control para que se cumpla. Sin embargo, hay profesoras que se juegan la vida en zonas rurales, menos vigiladas, para dar acceso a la educación a las niñas. 

Foto: niñas afganas leen el Corán en la Mezquita Noor en las afueras de la ciudad de Kabul, Afganistán. Photo/Ebrahim Noroozi.

El escritor y periodista Ahmed Rashid ha pasado por Madrid, por Casa Asia, para presentar la última edición en español de 'Los talibán. Islam, petróleo y fundamentalismo en el Asia Central', traducido a más de 20 idiomas. Con él, hablamos sobre el movimiento de resistencia al poder actual y los motivos de una posible caída de los talibanes. Un reportaje de Isabel Dólera.

2.500 afganos llegaron el verano pasado a España con la toma del poder de los talibanes. Entre ellos, una de sus voces más críticas y con una fuerte presencia internacional: Malalai Joya. Fue con 23 años la parlamentaria más joven de su país y tuvo que huir, amenazada de muerte. Hemos estado con ella este lunes, el Día Mundial del refugiado.

En Por tres razones volvemos a mirar a Afganistán a través de los ojos de Nilofar Bayat, capitana de la selección afgana de baloncesto en silla de ruedas, que hoy está en Madrid porque recoge su Premio Optimista Comprometido que concede la revista Anoche Tuve Un Sueño. Con ella hablamos de la realidad de su país, de cómo han cambiado las cosas y de cómo es pasar toda una vida en un país que no ha conocido la paz en los últimos años: "Las mujeres ahora saben qué derechos pueden tener y han tenido educación". Nilofar nos cuenta que las mujeres han cambiado y que no son las mismas, por eso "los talibanes son más peligrosos".