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El Gobierno ha puesto en marcha un proyecto para saber cuánto nos movemos a través de los móviles. En su primer análisis concluye que más de 30 millones de ciudadanos apenas se están moviendo de sus casas.

Estos datos no corresponden al proyecto del Gobierno para controlar el coronavirus, sino de uno anterior, que puso en marcha el Ministerio de Transportes. El estudio se ha llevado a cabo con 13 millones de clientes de Orange, con datos anónimos y agregados, que cumplen con la privacidad.

Tras la declaración del estado de alarma la caída de movimientos fue mayor en Madrid y País Vasco. Donde menos, en Galicia.

En paralelo España se ha unido a un proyecto europeo para controlar focos de infección del coronavirus, aunque por el momento no se va a implantar en nuestro país.

Con los datos que tenemos hasta ahora, el coronavirus mata más a los mayores y a los hombres que a las mujeres. El riesgo es el doble para ellos. No es algo excepcional, porque viven menos de media y suelen padecer más enfermedades previas como hipertensión o diabetes, que pueden complicarse.

En un principio estas patologías no tendrían que ver ni con la genética ni con el sistema inmune, sino con sus factores de riesgo como el perfil laboral.

Además, las personas obesas tienen más riesgo de que la enfermedad se complique. Las investigaciones están avanzando pero este perfil de víctimas se repite en todos los países.

El Lab de Radio Televisión Española ha puesto en marcha una iniciativa para hacer un homenaje a las víctimas del coronavirus, que son ya más de 18.000. En la web del LAB se puede escribir una despedida a un ser querido. Cualquier persona puede participar con su recuerdo.

Ya han recibido 130 y empezarán a publicarlas esta semana. Iniciativas como esta tienen el objetivo de ayudar en el duelo, compartiendo el dolor con otras personas que están pasando por lo mismo.

Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, que regresaba a la rueda de prensa diaria de Moncloa después de superar la enfermedad COVID-19, ha justificado el control de los laboratorios privados de pruebas PCR por parte del Ministerio de Sanidad porque "no podemos permitir que los test PCR se utilicen en grupos que no sean eficientes para realizar los diagnósticos".

El Ministerio ha desarrollado una orden para controlar el uso de pruebas diagnósticas PCR en las comunidades autónomas,debido a que la detección precoz "es una de las piezas clave y es muy importante". "No podemos permitir que en un periodo de escasez se utilicen PCR en grupos poblacionales en los que no van a ser suficientemente útiles y sus resultados no queden bajo la tutela de las autoridades sanitarias", ha dicho al respecto.

Simón ha recalcado que el objetivo de las autoridades sanitarias es "garantizar que los resultados se conocen, que no haya abusos y evitar que se hagan PCRcuando la probabilidad de que el resultado de positivos sea muy baja y tenga menos eficiencia".

Juan Carlos Villena ya está en casa. Se encuentra mejor y ha recuperado la voz, después de haber pasado el coronavirus. Como periodista, asegura que ha sido su gran alegría. Ha pasado 41 días luchando contra la enfermedad.

El 7 de abril le comunicaron, por fin, el test negativo. Ha sido un caso especialmente largo. Sus padres también se contagiaron y estuvieron ingresados. Todos se han recuperado.

Asegura que siguen tomando muchas precauciones porque después de lo que han pasado, no se fían de haberse inmunizado. Cree que el virus ha cambiado algunas pautas de su vida en lo laboral y en lo personal.

Enrique Feás, investigador principal del Real Instituto Elcano, ha valorado en La tarde en 24 horas los efectos de la crisis provocada por el coronavirus y ha asegurado que "lo que hace falta fundamentalmente es que el gasto que se necesite para salir de la crisis no se traduzca en un endeudamiento insostenible por parte de algunos estados miembros".

"Que el gasto sea suficiente y que ese gasto sea realizado a nivel conjunto por toda la Unión Europea y no en función de la capacidad de cada uno para endeudarse, porque si no será necesariamente insuficiente", ha proseguido.

Feás ha calificado esta crisis como "un problema global", por lo que "tiene que ser solucionado de forma global". "No es posible considerar que solo la Unión Europea o solo Estados Unidos van a salir de esta crisis", ha dicho, "es necesario que haya acuerdos, a nivel de bancos centrales y a nivel de gobiernos; es necesario que el G20 tome medidas de forma coordinada, para que no haya tentaciones nacionalistas ni de protección del comercio, y que todas las decisiones sean tomadas de una forma coordinada y conjunta para maximizar las posibilidades de que esta crisis sea solo pasajera".

Sobre los "coronabonos", el economista ha asegurado que "lo que hace falta se buscar a medio y largo plazo que haya un activo lo suficientemente seguro a nivel de toda la Unión Europea, y sobre todo de la Eurozona". "Para eso es necesario que se emita conjuntamente de alguna manera, pero eso podría realizarse de muchas maneras y lo más sensato sería que hubiera una serie de ingresos y que no solo por el lado de los ingresos sino también de los gastos existiera una mutualización, un embrión de política fiscal que se realizara conjuntamente", ha añadido.

El papa Francisco ha celebrado la misa del Domingo de Resurrección en el interior de la basílica de San Pedro, y no asomado al balcón de la logia central, ya que la plaza está cerrada por la pandemia del coronavirus. El líder de la Iglesia Católica ha dedicado su mensaje sobre todo a los afectados por el coronavirus y los sanitarios, pero también ha dicho que este periodo no puede ser "tiempo de divisiones" políticas. Y se ha dirigido en particular a la UE, que "se encuentra frente a un desafío histórico, del que dependerá no sólo su futuro, sino el del mundo entero". "Que no pierda la ocasión para demostrar, una vez más, la solidaridad, incluso recurriendo a soluciones innovadoras", ha dicho, antes de advertir: "Es la única alternativa al egoísmo de los intereses particulares y a la tentación de volver al pasado, con el riesgo de poner a dura prueba la convivencia pacífica y el desarrollo de las próximas generaciones".