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Más de la mitad (53%) del personal sanitario dedicado a la atención hospitalaria durante la crisis de la COVID-19 presenta signos de estrés postraumático y el 79,5% sufre ansiedad, según los resultados preliminares de una investigación del Laboratorio de Psicología del Trabajo y Estudios de Seguridad de la Universidad Complutense de Madrid (UCM). En algunos casos han necesitado una baja psicológica para recuperarse del estrés postraumático.

En Pekín las mascarillas ya no son obligatorias en la calle, pero mucha gente sigue llevándolas. El Gobierno ha aislado Shulan, una ciudad del norte del país, en la frontera con Rusia y Corea del Norte, por un nuevo foco. 34 de los 85 casos que tiene ahora el país se han dado allí.

Sus 700.000 habitantes necesitan pedir un pase especial para salir de casa. Localizar los nuevos focos y actuar rápidamente es la estrategia de China.

En Wuhan, el origen del coronavirus, están haciendo el test a toda la población, tras detectarse un foco de seis casos en un barrio. Tratan así de detectar a posibles asintomáticos y evitar que se propague el virus.

El viernes arranca en Pekín la Asamblea Nacional Popular, que acoge a 3.000 delegados de las otras provincias. Será noticia por las medidas de prevención.

A pesar de las críticas que está recibiendo la organización Mundial de la Salud (OMS) por su gestión de pandemia del coronavirus COVID-19, su director ha asegurado este lunes en la primera asamblea anual tras declararse la crisis, que respondieron de forma rápida. Por su parte, la Unión Europea apoyada por otros 70 países pide una investigación independiente.

En Italia ha reabierto la emblemática basílica de San Pedro, tras haber sido sometida a una desinfección complicada, como nunca antes, y con especial cuidado a sus obras de arte y mármoles. Hoy se ha retomado la misa, oficiada por el Papa ante un reducido número de fieles en recuerdo a Juan Pablo II.

Luego se ha abierto a todos, ofreciendo una oportunidad para verla sin aglomeraciones. Para acceder es obligatorio pasar por un control de temperatura, ponerse mascarilla y mantener una distancia de metro y medio entre personas.

Se imparten veinte horas de clase a la semana a través del Campus Virtual de la Defensa. Se están cumpliendo los objetivos marcados, aunque hay disciplinas en las que la parte presencial es insustituible. Por eso, ya tienen preparado el plan de desescalada para que los cadetes puedan volver a la academia en cuanto reciban la autorización de Sanidad.

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