Los 107 migrantes del 'Open Arms' esperan ser trasladados
Los 107 migrantes a bordo del Open Arms aún esperan que se les traslade a tierra firme, ya sea desembarcando en la isla italiana de Lampedusa, de la que están a tan solo 800 metros, o en un puerto español.
Hacer la cama o el rincón de la cubierta en el que duermes cada noche; pescar o intentar que algún pez pique para poder llevarse una alegría. Improvisar una hamaca con cuerdas. O simplemente pasar las horas muertas mirando al mar e intentando que no se agote la poca esperanza que queda. Mientras, los ferries de Lampedusa siguen su camino.
"Imagina, 18 días en el Mar Mediterráneo no es nada fácil. Estamos todos exhaustos. Se lo rogamos a las autoridades. Si nuestra vida no hubiera estado en peligro, no estaríamos en esta situación ahora", nos dice Christopher. Quiere pedir asilo en Europa, porque en Ghana lo amenazaron de muerte.Sobre esta cubierta siguen 107 vidas estancadas. Nunca imaginaron que su rescate se convertiría en una condena, que su destino estaría a merced de decisiones políticas. Que la política estaría por encima de legislación internacional y marítima y de los derechos humanos.
"Estoy viendo el mar, Lampedusa ahí mismo, viendo a la gente bañarse disfrutando de sus vacaciones y estoy aquí en este barco como si estuviera en prisión. ¿Cómo crees que me puedo sentir en esta situación?", nos dice Ali.
Y su pregunta resuena en nuestra conciencia, después de 18 días sin respuesta.