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El hospital pediátrico de cuidados intensivos de Zaporiyia, a alrededor de 30 kilómetros del frente, prepara su sótano para tener todo a mano para, en caso de ataque ruso, proteger a los enfermos y al personal.

La situación más dramática está en la sala de los niños con enfermedades terminales, ya que dependen de los aparatos conectados a la electricidad y no se les podría trasladar al refugio.

FOTO: Jedrzej Nowicki/Agencja Wyborcza.pl via REUTERS

Nuestro equipo de reporteros en Kiev ha salido esta mañana de la ciudad. Se dirigen hacia el oeste del país, siguiendo el mismo camino que siguen recorriendo los ucranianos para buscar refugio. Una travesía más lenta de lo habitual, por los continuos controles y por los puentes e infraestructuras destruidas por los bombardeos. En el centro de Ucrania se divisan enormes campos de cultivo y pueblos pequeños donde la guerra parece algo lejano, aunque no lo es tanto cuando nos acercamos a los puntos de control que han levantado lugareños, voluntarios y miembros del ejército.

Foto: EFE / Manuel Lorenzo

Pocos han sabido ver que Vladímir Putin daría la orden de invadir Ucrania, y son pocos también los que se atreven a aventurar cuál será su siguiente paso. Lleva más de dos décadas presidiendo Rusia y Putin, exagente del KGB, sigue siento una incógnita para el mundo.

Foto: EFE/EPA/YURI KOCHETKOV

Hablan con su padre a diario a través de una pantalla. Le han tenido que dejar atrás. Es bombero en Ucrania. Su mujer Uliana y sus tres hijos de 6,8 y 11 años se han refugiado en casa de un familiar en Guissona, Lleida. Allí también está acogida la abuela. Siguen con angustia las noticias que llegan de la guerra en un país donde habían construido su vida.

La hija de la pareja también proyectaba casarse en Ucrania pero la guerra se lo impidió. Ellos tuvieron que volver rápidamente. Lamentan el giro drástico que ha dado la vida del pueblo ucraniano. Han abandonado sus casas, su trabajo e intentan salvar a sus hijos. Ese era también el objetivo de Gorka: alejar a a su hijo de la guerra. Se lo ha traido a San Sebastián

En la ciudad de Járkov, la segunda más grande de Ucrania, las fuerzas rusas han atacado una comisaría de Policía, un hospital militar, una universidad y un depósito de munición. A la ciudad ya han llegado tropas aerotransportadas del Ejército ruso, pero, por ahora, sigue bajo control ucraniano.

Rusia también ha intensificado sus ataques contra otras ciudades clave en el sur del país. Moscú asegura que sus tropas han tomado Jersón, a orillas del mar Negro, y la batalla continúa por el control de Mariúpol, en el mar de Azob. En la capital, Kiev, continúa el asedio y ayer un ataque ruso a la torre de televisión causó al menos cinco muertos

FOTO: REUTERS/Vyacheslav Madiyevskyy

La guerra en Ucrania ha marcado el primer discurso del estado de la Unión realizado por Joe Biden. El presidente de Estados Unidos ha asegurado que Putin pagará un precio muy alto por iniciar esta guerra, y ha prometido que perseguirá a los oligarcas rusos.

Foto: EFE/EPA/SAUL LOEB / POOL

El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, está interpretando el papel más complicado de su carrera. En el pasado fue cómico y actor, pero su figura nunca había sido tan mediática como en este momento. En medio de un conflicto retransmitido en vivo, ha pasado de ser un presidente cuestionado para convertirse en el líder de un país invadido.

Zelenski llegó al poder en 2019, tras barrer en las elecciones a su rival, Petró Poroshenko. Su rostro era familiar para los ucranianos tras protagonizar “Servidor del Pueblo”, la comedia televisiva que predijo su ascenso a la política. En ella interpretaba a un sencillo maestro que llegaba a convertirse, de forma inesperada, en presidente de Ucrania.

Con su discurso contra la corrupción y su intención de acabar con la guerra en el Donbás conquistó a una población descontenta con la élite gobernante. Defensor de acercar Ucrania a Europa y la OTAN, ha desarrollado una intensa actividad diplomática para conseguirlo. A pesar de todo, antes del estallido de esta guerra su popularidad estaba en caída libre por una serie de políticas erráticas fruto de su inexperiencia.

Ahora, el conflicto lo ha hecho resurgir como símbolo de la nación. Independientemente de lo que suceda, pasará a la historia como el cómico que se enfrentó a la todopoderosa Rusia de Putin.

Los oligarcas rusos, amigos y miembros del círculo más cercano de Putin, son el nuevo objetivo de las sanciones de los países occidentales contra Rusia en respuesta a la invasión de Ucrania. Millonarios con un gran peso político y económico en el rumbo del país y que podrían jugar un papel importante en el devenir de la guerra en Ucrania.

Varios expertos creen que las sanciones no tendrán un impacto tan directo en la ofensiva rusa y que parece improbable que los oligarcas acaben mordiendo la mano de quien les da de comer. No obstante, algunos grandes millonarios, como Alexei Mordashov, el cuarto hombre más rico de Rusia, ya ha alzado la voz en contra de la guerra.

Pedro Sánchez ha reconocido que la guerra y las sanciones a Rusia van a tener un coste y exigirán sacrificios a España y a Europa. Para hacer frente a este impacto, ha presentado un paquete de medidas económicas, entre ellas un pacto de rentas con los agentes sociales y la prórroga hasta julio de las rebajas fiscales a la luz, el bono social y las ayudas a la industria.

Además, para acelerar la transición energética, se destinarán 100 millones para sustituir alumbrado público y reducir un 70 % su consumo, 500 millones para favorecer el autoconsumo y otros mil millones para impulsar el proyecto estratégico de las renovables.

Foto: El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la vicepresidenta económica, Nadia Calviño, este miércoles en el Congreso. EFE

Son muchas las familias que intentan alejar a sus hijos de la guerra en Ucrania. A España no dejan de llegar, pero en Ucrania hay quienes no se plantean salir del país y están dispuestos a coger las armas para defenderse de la invasión.

A unos pocos kilómetros de Kiev está Valelry. No nos quiere decir el nombre del pueblo ni dar la cara para proteger a su familia. Con solo 22 años salió de la capital y se unió a una de las milicias de civiles que se ha formado por todo el país. Inna, que está en Kiev tampoco piensa marcharse. Los hombres no pueden salir del país y se va a quedar con su familia. Lo mismo piensa Oleksandra, que tiene 28 años y también está en la capital.

El Gobierno rectifica y anuncia quemandará directamente armas a Ucrania. Hasta ahora se había canalizado ese envío de armamento a través del Fondo Europeo. El anuncio lo ha hecho Pedro Sánchez en el Pleno del Congreso. Con esta decisión, España se suma a 19 países de la UE, como Alemania, Francia o Portugal, que ya habían decidido enviar armas por su cuenta a Ucrania, algo que habían pedido los partidos de la oposición y rechazado desde Unidas Podemos.

Foto: EFE/ Emilio Naranjo

850 mil personas han huido de Ucrania, aunque también hay quiénes recorren el camino inverso: regresan para defender a su país. Nuestros enviados especiales han viajado en tren desde Cracovia a Ucrania y aseguran que hay dos escenas que se repiten: por un lado, personas al teléfono que consuelan a los familiares que están al otro lado de la línea, y por otro, la de quienes vuelven buscar a sus seres queridos, como es el caso de Tamila de 16 años: “Ucrania es mi país y quiero estar ahí con mi familia.” Además, otros, como Alex y sus amigos, vuelven dispuestos a luchar si hace falta. Entre los objetos destacan las chaquetas militares y las banderas ucranianas.

Informan Mónica Cartes y David Velasco, enviados especiales de RNE