En su 'Diario de un paseante', Carlos del Amor, enviado especial a París 2024, nos descubre el árbol más viejo de la ciudad. Se encuentra en la plaza René-Viviani en uno de los jardines más insólitos de París, muy cerca del Sena y con vistas a Notre-Dame. Se trata de una Robinia pseudoacacia colosal, plantada en 1601 por el botánico Jean Robin. Mide 15 metros de altura y tiene 3,50 metros de circunferencia.
Desde este parque podemos seguir paseando hasta una de las librerías más antiguas de la ciudad, Shakespeare and Company, una partida de ajedrez callejera y una banda de música local de con Notre-Dame como testigo, que recrea la banda sonora de los Juegos Olímpicos.