El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, ha abierto este lunes una nueva vía de diálogo para acordar la paz definitiva con las FARC, incluyendo esta vez a los partidarios del 'no' en el plebiscito del pasado domingo. Santos ha ratificado en el cargo al jefe del equipo de paz del Gobierno, Humberto de la Calle, que junto con los ministros de Exteriores y de Defensa, trabajarán con la oposición uribista para reconducir la negociación con las FARC.
El mandatario colombiano ha recibido "con entusiasmo" que el Centro Democrático, cabeza visible del "no" en el plebiscito, designara a tres portavoces "para sentarse a dialogar y llevar a feliz término el proceso de paz". Asimismo, Santos ha designado a De la Calle, así como a la canciller, María Ángela Holguín, y al ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, para que comiencen los diálogos que "permitan abordar todos los temas necesarios para tener un acuerdo y culminar con éxito el sueño de toda Colombia de terminar la guerra con las FARC". El gobernante dio así un espaldarazo al jefe negociador, quien este lunes puso a disposición del mandatario su cargo tras el triunfo del "no" en el plebiscito celebrado la víspera para consultar a los colombianos sobre el acuerdo de paz firmado el pasado 26 de agosto con las FARC.
La mayoría de los colombianos que han participado en el reférendumse ha mostrado contraria a refrendar el acuerdo de paz con las FARC, un acuerdo que buscaba poner fin a más de 52 años de conflicto. Frente a los 6.431.376 votos en contra, el 'sí' ha perdido con un apoyo del 49,78% y 6.377.482 votos. La consulta, además, ha estado marcada por una alta abstención, cerca del 63%.
El resultado ha sido una sorpresa ya que todas las encuestas apostaban por una victoria clara del 'sí', con una intención de voto entre el 54% y el 52% mientras que la opción del 'no' se situaba en torno al 34%-38%. Además, todos los partidos -menos el derechista Centro Democrático, liderado por Álvaro Uribe-, sindicatos, organizaciones sociales y asociaciones de víctimas defendían los acuerdos de paz.
Casi 35 millones de colombianos, aunque finalmente solo han participado alrededor de 13 millones, estaban llamados a responder la pregunta "¿Apoya usted el acuerdo final para la terminación del conflicto y la construcción de una paz estable y duradera?”.
La mayoría de los colombianos que han participado en el reférendumse ha mostrado contraria a refrendar el acuerdo de paz con las FARC, un acuerdo que buscaba poner fin a más de 52 años de conflicto. Frente a los 6.431.376 votos en contra, el 'sí' ha perdido con un apoyo del 49,78% y 6.377.482 votos. La consulta, además, ha estado marcada por una alta abstención, cerca del 63%.
El rechazo a los acuerdos, que fueron negociados durante cuatro años en La Habana, supone un duro varapalo para el presidente Santos, firme defensor del pacto con la guerrilla. Tras conocer los resultados, el mandatario ha convocado a todas las fuerzas políticas, especialmente a aquellas contrarias al actual proceso, para abrir un diálogo nacional y decidir qué camino se debe seguir ahora. Al mismo tiempo, los negociadores del Gobierno viajarán este mismo lunes a La Habana para informar a las FARC sobre la situación.
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, ha reconocido su derrota en el referéndum sobre los acuerdos de paz con las FARC. En una alocución al país tras conocer que el 50,23% de los colombianos habían rechazado los pactos negociados en La Habana con la guerrilla, el presidente ha asegurado que no se rendirá y que seguirá buscando la paz hasta el último minuto de su mandato.
Santos ha explicado que convocará a las fuerzas políticas del país para abrir un diálogo nacional y decidir qué camino se debe seguir ahora. El mandatario ha garantizado que se mantendrá el alto el fuego bilateral y definitivo con las FARC.
Casi 5 millones de colombianos pueden votar si dar su apoyo o no al acuerdo de paz firmado entre el Gobierno y las FARC. La lluvia ha marcado las primeras horas del día y en algunas zonas el paso del huracán Matthew ha dificultado la votación.
Cerca de 35 millones de colombianos están llamados este domingo a las urnas para el plebiscito sobre el acuerdo de paz firmado con las FARC. Uno de los primeros en votar ha sido el presidente colombiano, Juan Manuel Santos.
El gobierno colombiano y la narcoguerrilla de las FARC han firmado el acuerdo de paz que pone fin a más de medio siglo de conflicto. El acuerdo firmado el pasado lunes en Cartagena de Indias tendrá que ser refrendado por el pueblo colombiano en un plebiscito este domingo 2 de octubre. Informe semanal trata el tema de la paz en Colombia con los testimonios de quienes vivieron en primera persona el conflicto que costó la vida a más de 220.000 personas. Presidentes como Belisario Bethancourt, Andrés Pastrana, Álvaro Uribe y el actual, Juan Manuel Santos valoran un acuerdo que ha abierto un debate en la sociedad. También interviene Alan Jara, presidente de la Asociación de Víctimas, y Simeón Pérez, que estuvo secuestrado por las FARC.
El escenario elegido por las FARC para pedir perdón esta vez ha sido Apartadó, la ciudad en la que el 23 de enero de 1994 asesinó a 35 personas mientras celebraban una fiesta en la calle, en el barrio de la Chinita.
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, y el líder de las FARC, Rodrigo Londoño Echeverri, alias "Timochenko", han firmado este lunes el acuerdo de paz que pone fin a 52 años de conflicto armado. La histórica ciudad de Cartagena de Índias ha acogido una emotiva ceremonia ante más de 2.500 invitados, entre ellos unos 15 presidentes y el rey Juan Carlos en representación de España.
En primer luguar fue "Timochenko" el que firmó el documento con un "balígrafo", una bala reconvertida en bolígrafo que muestra la evolución que tendrá Colombia en su futuro. Al terminar levantó los brazos y recibió una salva de aplausos mientras alzaba las manos cruzadas a modo de abrazo. A continuación fue Santos el que estampó su firma en el acuerdo también con el mismo balígrafo.
El líder de las FARC, Rodrigo Londoño Echeverri, alias "Timochenko", ha pedido perdón a "todas las víctimas del conflicto" por "todo el daño" que hayan "podido causar en esta guerra". "Timochenko" también ha reclamado que nadie dude de que los miembros de esa guerrilla van "hacia la política sin armas". "Nosotros vamos a cumplir y esperamos que el Gobierno cumpla", ha asegurado en un discurso en el que ha hecho un alegato pacifista para el mundo y ha hecho hincapié en la guerra civil que se vive en Siria.
Por su parte, el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, ha resaltado que "hay una guerra menos en el mundo y es la de Colombia" y ha dado la bienvenida a las FARC a la democracia. Santos ha comenzado por dar la bienvenida a la guerrilla de las FARC a la democracia y ha celebrado su paso a partido político. "Señor Rodrigo Londoño y miembros de las FARC: hoy, cuando emprenden su camino de regreso a la sociedad; cuando comienzan su tránsito a convertirse en un movimiento político, sin armas; siguiendo las reglas de justicia, verdad y reparación contenidas en el Acuerdo, como Jefe de Estado, de la patria que todos amamos, les doy la bienvenida a la democracia", ha afirmado el gobernante.
El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, y el líder de las FARC, Rodrigo Londoño Echeverri, alias "Timochenko", han firmado este lunes en Cartagena de Indias el acuerdo de paz que pone fin a más de medio siglo de conflicto. El mandatario y el guerrillero, en un acto al que han asistido más de 2.500 invitados, entre ellos 15 jefes de Estado, han estampado sus nombres en el acuerdo utilizando una pluma fabricada con los casquillos de balas para simbolizar la conversión de las armas en educación y futuro.
Después de 52 años de conflicto, el Gobierno de Colombia y las FARC firman este lunes, 26 de septiembre, el acuerdo conjunto de paz. Será en Cartagena de Indias, a las 17:00 hora local, (00:00 del martes en España) donde jefes de Estado y personalidades, hasta 2.500 invitados, han llegado para asistir al histórico evento. El presidente Juan Manuel Santos y el guerrillero "Timochenko" estamparán sus nombres utilizando una pluma fabricada con los casquillos de sendas balas. "Vamos a firmar con una pluma-bala para simbolizar la conversión de las balas en educación y futuro", ha dicho Santos.
Pero borrar este medio siglo de sangre y resentimientos no será fácil. Queda pendiente un plebiscito, convocado para el 2 de octubre, para que los colombianos den el permiso a la inclusión en la Constitución del acuerdo. Representantes de las víctimas han llegado a Cartagena. Con ocho millones entre muertos y afectados, es el colectivo cuya reparación ha vertebrado la negociación. Muchos de ellos se manifiestan contra la consulta y exigen una revisión de los puntos que se refieren a su situación.