Medios franceses han especulado que el retraso de Nasser Al-Khelaifi en la rueda de prensa de presentación de Luis Enrique por el PSG se debe a un registro de la policía por un presunto caso de secuestro y tortura.
La intensidad de las protestas ha bajado esta última madrugada, pero el presidente Macron va a mantener el enorme dispositivo de seguridad en el extrarradio de las grandes ciudades.
"El orden público ha sido restaurado", ha declarado el ministro del Interior en Reims, tras echar un vistazo a las consecuencias de seis noches de altercados con más de 3.000 detenidos. Pero Darmanin no tiene tan claro que esta última noche, algo más tranquila, sea un punto final.
En Nanterre, el distrito de París donde empezó todo, la noche también ha sido más tranquila. Más de 300 vehículos han sido incendiados esta noche; un número similar o mayor de edificios, dañados o saqueados. Los 45.000 policías que ha desplegado por el país seguirán, de momento, alerta.
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Para entender las claves de los disturbios en Francia tras el asesinato de Naël, el Canal 24 Horas ha entrevistado al diputado de la Asamblea francesa por la circunscripción de España, Stephane Vojetta, quien cree que la muerte del joven a manos de la Policía "es un mero pretexto para lo que se ha transformado en una oleada de violencia urbana hacia los símbolos del Estado francés", como la bandera o los edificios públicos.
"Ya no tiene nada que ver con el malestar identitario" ni las protestas sociales, ha denunciado Vojetta, que ha señalado que grupos radicales están aprovechando para desestabilizar al Gobierno, como la extrema izquierda, que habla de "violencia legítima" para justificar los disturbios, ha argumentado.
El diputado de la Asamblea francesa ha destacado que "la mayoría de los detenidos tienen menos de 18" y en los actos vandálicos participan niños de hasta 12 años.
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La primera ministra de Francia, Elisabeth Borne, acompañada del ministro de Interior, Gérald Darmanin, ha dicho que está conmocionada por la extrema violencia de los últimos cinco días contra ayuntamientos y edificios públicos. La jefa del ejecutivo galo ha ofrecido su apoyo a los ediles de todas las ciudades francesas.
Ambos miembros del Gobierno han visitado al alcalde de l'Haÿ-les-Roses, Vincent Jeanbrun, que ha sufrido un ataque con un coche incendiado sobre su vivienda. Ha explicado que su mujer tiene una pierna rota y no podrá caminar en tres meses, otra hija está herida y la más pequeña muy asustada.
La abuela del joven muerto por el disparo de un policia, origen de los graves disturbios, ha pedido a los participantes en los actos vandálicos que paren de romper cosas y que no utilicen la muerte de su nieto como pretexto.
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"Es tiempo de crear un verdadero movimiento interbarrial", dicen los manifestantes en Francia, y alientan a seguir con esta revuelta de las 'banlieues', como se llama en el país galo a los barrios periféricos, con gran índice de desempleo y población multiétnica. Así es una parte de Nanterre, de donde era el adolescente de origen magrebí muerto por el disparo de un policía. El perfil de los que están tomando las calles: muy jóvenes, adolescentes, que utilizan las redes sociales para organizarse y alardean en ellas de la destrucción que provocan.
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La casa del alcalde de Haÿ- les-Roses, un municipio cercano a París, ha sido atacada sobre la una y media de la madrugada con un coche incendiado lanzado contra la vivienda, en la que estaban sus dos hijos de 5 y 7 años y su mujer, que sufrió heridas igual que uno de sus hijos. La fiscalía, que considera que los atacantes querían incendiar la casa, ha abierto una investigación por tentativa de asesinato y el alcalde cree que se ha alcanzado un nuevo nivel de horror e ignominia. La primera ministra los ha calificado de actos intolerables.
Es uno de los hechos de más gravedad de la quinta noche de disturbios en Francia. En Marsella hubo enfrentamentios entre manifestantes y policias que lanzaron gases lacrimógenos para tratar de frenar los disturbios.
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Cuarta noche de disturbios en las principales ciudades de Francia, tras la muerte de un joven por el disparo, a bocajarro, de un policía. Hay más de 1.300 detenidos y 79 policías heridos, según el ministerio de Interior. El presidente francés, Emmanuel Macron, ha cancelado su visita prevista a Alemania.
FOTO: Imagen de un vehículo vandalizado tras una nueva noche de incidentes en Francia. Ludovic MARIN / AFP
José lleva más de 30 años de conductor y nunca había vivido algo parecido. Llegó el jueves a París desde Madrid con turistas y cuando dormía le avisaron de queel autobús ardía por las manifestaciones tras la muerte de un joven en Nanterre a manos de la policía. Hasta ahora, se han quemado más de 2.000 vehículos y ha habido casi 4.000 incendios. El Gobierno ha autorizado lapresencia en la calle de vehículos blindados de los gendarmes, suspender actos festivos yya no hay autobuses urbanos y tranvías a partir de las 21:00 de la noche.
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El gobierno francés ha adoptado una serie de medidas para intentar evitar que la violencia se extienda por el territorio tras una nueva noche de disturbios durante la que 870 personas fueron detenidas. Nos situamos en París con nuestro corresponsal Antonio Delgado. Miramos a Ucrania, el enviado de RNE Fran Sevilla ha participado en el encuentro que ha mantenido el presidente ucraniano Volodimir Zelenski con medios españoles en Kiev. Analizamos la Cumbre Europea celebrada en Bruselas en la que Polonia y Hungría han vetado el texto común en materia migratoria y de asilo y conversamos con Fran Ezquiza responsable de Unicef en Afganistán, sobre cómo ha cambiado el país con el gobierno talibán en materia educativa y de salud y de la difícil situación humanitaria, ya que literalmente el 95% del país vive en la pobreza.
En una reunión de emergencia del gobierno para tratar los disturbios que asolan Francia desde hace tres días consecutivos, el presidente Emmanuel Macron ha culpado a las redes sociales y a los videojuegos como parcialmente responsables de estos disturbios. Macron expresó que las redes sociales como Snapchat o TikTok tuvieron un “papel considerable” en fomentar los actos violentos.
También añadió que a veces, da la sensación de que los jóvenes creen estar “viviendo en las calles de los videojuegos que los han intoxicado”.
Ha anunciado que en las próximas horas se tomarán varias medidas, entre ellas, eliminar el contenido sensible de las redes y organizar una colaboración entre el gobierno y las plataformas con el objetivo de crear una “respuesta eficaz”.
Desde la muerte del joven de 17 años a manos de la policía este martes, el país galo vive una oleada de disturbios que este jueves se ha saldado, según el Ministerio del Interior, con 875 personas detenidas y 249 policías y gendarmes heridos. Interior también ha confirmado que los manifestantes atacaron 492 edificios públicos, en gran medida pasto de las llamas al igual que 2.000 vehículos incendiados.
La muerte de un adolescente de 17 años reaviva fracturas profundas en Francia, que sigue sin resolver los problemas de racismo y desigualdad, sobre todo en las barriadas de las grandes ciudades. La situación es tan grave que el presidente Macron ha abandonado el Consejo Europeo de Bruselas para dirigir personalmente un gabinete de crisis.
