Ethel Eljarrat, directora del Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua del CSIC, explica el impacto que puede tener el vertido de ‘pellets’ que ya está llegando a las costas gallegas. “El problema de los plásticos no es que sólo estén formados por polímeros, sino que también llevan sustancias químicas que pueden generar daños”. Si bien no son tóxicos para el ser humano de manera directa, “podría estar llegando a nosotros cuando nos comemos un pescado que se haya contaminado”. También es importante saber que los efectos que generan suceden tras estar expuestos durante largos periodos de tiempo. “Si comemos pescado con niveles elevados de estas sustancias durante muchos años al final sí que podría llegar a producir efectos dañinos”.
Para analizar el grado de toxicidad de estos ‘pellets’, Eljarrat explica que habría primero que saber de qué polímero se trata y qué aditivos llevan. También es importante saber que los plásticos son materiales muy estables y “tardan cientos de años en degradarse por completo”, aclara.