Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

Israel guarda silencio y no responde a las acusaciones del gobierno de Damasco sobre un supuesto bombardeo de su aviación contra objetivos sirios. Hay distintas versiones sobre si el ataque fue contra un convoy de armamento que se dirigía al Líbano, o contra un centro de investigación.

El gobierno sirio informó el jueves de que aviones israelíes habían bombardeado un centro de investigación militar en el distrito de Jamraiya, en la provincia de Rif Damasco, causando la muerte de dos empleados. Israel no ha comentado ni desmentido el ataque ni el objetivo.

Anteriormente, fuentes diplomáticas occidentales en Israel habían asegurado que el objetivo del ataque había sido un convoy militar cerca de la frontera entre Siria y Líbano. Las autoridades libanesas fueron las primeras en advertir de la violación de su espacio aéreo por parte de cazas israelíes.

MIGUEL MOLLEDA (Corresponsal de RNE en Jerusalén).- Damasco ha confirmado el primer ataque directo de Israel sobre su territorio desde que hace dos años comenzó la guerra civil siria y lo ha calificado de agresión contra la soberanía nacional. Israel no ha querido confirmar ni desmentir la información.

La ONU ha conseguido este miércoles los fondos que necesitaba para atender a los 700.000 refugiados y más de dos millones de desplazados internos hasta ahora por la guerra. En total, serán 1.500 millones de dólares. La situación es límite para los habitantes de las zonas en conflicto y para los refugiados.

Israel ha atacado un convoy en la frontera entre Siria y Líbano, según han informado fuentes diplomáticas occidentales, en un momento de máxima preocupación por presuntos movimientos de arsenales de armas químicas y convencionales. Tanto el Gobierno israelí como el Ejército mantienen silencio al respecto. Según esas fuentes, 12 cazas israelíes habrían invadido el espacio aéreo libanés, algo que confirma el Ejército libanés que ha denunciado violaciones sistemáticas de su espacio aéreo en las últimas 24 horas. El objetivo parece ser un convoy cargado con misiles anti-aéreos. Durante toda la semana, oficiales israelíes habían advertido de la amenaza de que armas de Siria pasarán a manos de Hizbuláh, uno de los principales enemigos de Israel y aliado del régimen de Bachar al Asad. Y, aseguraron, no dudarían en lanzar un ataque preventivo.

El secretario general de la ONU ha alertado este miércoles de que la situación de Siria es catastrófica y el mediador internacional Lagdar Brahimi dice que el país vive un nivel de horror sin precedentes. Dos millones y medio de personas necesitan ayuda inmediata. Varios países árabes ya han puesto sobre la mesa más de 700 millones de euros para una actuación de urgencia.

Al menos 65 cadáveres con disparos en la cabeza y las manos atadas a la espalda han sido encontrados flotando en el río Queiq a su paso por la ciudad siria de Alepo. La información del hallazgo, que no ha podido ser verificada, proviene de los grupos opositores Comisión General de la Revolución Siria y los Comités de Coordinación Local y del Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH), una organización con sede en Londres. Fotógrafos extranjeros han podido tomar imágenes de los cadáveres en la orilla del río. Los cuerpos, que aún no han sido identificado, corresponde a varones de distintas edades, entre ellos menores.

Dos explosiones en una universidad de Alepo han dejado decenas de muertos. Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos hablan de al menos 52 muertos. La causa de las detonaciones no está clara todavía, aunque la televisión estatal dice que se trata de "un ataque terrorista".