Nicaragua es un país muy joven porque casi la mitad de su población, el 45 por ciento, tiene menos de 15 años. Y además, es un país pobre.
La falta de los recursos más elementales afecta a la mitad de sus seis millones de habitantes, y la infancia es la primera víctima, pero también su mayor esperanza.
Entrevista al Director de la Fundación Comparte, Claudio Lavanchy.