Para hablar del nuevo mundo que nos dibuja la Inteligencia Artificial nos acompañan cuatro humanos que, de momento, nos pueden dar respuestas sin necesidad de preguntar a GPT de qué va toda esta movida. Nuestros invitados son: Pablo Lluch (creador musical e ingeniero en Inteligencia Artificial), Ujué Agudo (Investigadora), Pau Martí Felip (Prompt Engineer) y Karlos G. Liberal (divulgador).
Gemma Galdon-Clavell, doctora en Políticas Tecnológicas y directora de Eticas Tech ha estado en 24 horas de RNE para abordar la revolución actual de la inteligencia artificial aplicada a tareas cotidianas cuyo pistoletazo de salida dio la aplicación de Open AI chat GPT. Recientemente, un grupo de académicos y expertos en tecnología han pedido que el desarrollo de experiementos "gigantes" de IA sea parado o pausado durante medio año, en teoría hasta que exista algo similar a un protocolo de seguridad.
Galdon-Clavell ha explicado que el manifiesto no está bien planteado: "Que ahora se haga en seis meses lo que no hemos hecho en veinte años es poco realista. Lo que hay que hacer es regular y sacar leyes que pongan los límites de esta tecnología, como se ha hecho históricamente con las innovaciones", ha explicado y ha añadido que una de las claves está en que haya una exigencia clave para los desarrolladores de inteligencia artificial: "Los algoritmos tienen que ser auditables por entidades independientes", ha dicho.
No solo es su capacidad para generar noticias falsas la que alarma, sino la rapidez de su expansión por medio de las redes sociales. Nos referimos a la inteligencia artificial capaz de crear textos o diseñar imágenes gracias a un algoritmo, y a su asombroso poder para confundir la ficción con la realidad. Tanto es así que hasta mil expertos del sector se han mostrado partidarios de decretar una moratoria de seis meses en el desarrollo de la inteligencia artificial para estudiar el rumbo que ha tomado y evitar que su uso se nos vaya de las manos. Chema García Langa entrevista a Miquel Pellicer, periodista, antropólogo y director de Comunicación Digital de la Universidad Oberta de Cataluña, para conocer más sobre todo esto.
Hoy charlamos con una de las expertas convocadas por la Comisión Mixta de Seguridad Nacional para hablar de desinformación y del futuro de la Inteligencia Artificial, la profesora de Derecho Mercantil de la UCM y experta en IA Teresa Rodríguez de las Heras. Forma parte de dos grupos de expertos de la Comisión Europea, de IA y Responsabilidad y el de Economía de Plataformas. Nos explica cómo debe avanzar la legislación para adaptarse a los avances en IA, que pueden ser muy útiles en la toma de decisiones políticas.
Aunque hace unos años nos pareciese algo impensable, a día de hoy hay inteligencias artificiales capaces de dibujar cualquier diseño que le propongas. Tan solo necesitas darle unas indicaciones utilizando las palabras que describan exactamente lo que quieres que diseñen y… ¡magia! Lo tendrás. Es lo que hicieron Carmelo y Willy, los responsables del estudio C&W y del cómic digital ‘Gatas’, ilustrado completamente por una inteligencia artificial. Pilar se adentra en el mundo del diseño con inteligencia artificial para sorprenderse con los increíbles resultados que ofrece.
Expertos en tecnología y personas influyentes escribieron ayer una carta para pedir a los laboratorios de Inteligencia Artificial que frenaran sus investigaciones al menos 6 meses para evitar perder el control sobre esta tecnología. Uno de los firmantes fue Carles Sierra, director del Instituto de Investigación de Inteligencia Artificial del CSIC, quien ha explicado en Las Mañanas de RNE que el escrito pide que se ponga la seguridad por delante de los criterios económicos. Indica que “tienen que ser los poderes públicos, en colaboración con los científicos y las empresas” quienes determinen que se debe hacer y qué no, y avisa de que a día de hoy “el 50% de los trabajos podría ser automatizados por la IA”, por lo que corresponde a los poderes públicos “garantizar la protección de los trabajadores”.
Cientos de expertos a nivel mundial han firmado una carta en la que instan a hacer una pausa en el desarrollo de la inteligencia artificial (IA) hasta que se acuerde una regulación. José Ángel Olivas, profesor de Inteligencia Artificial en la Universidad de Castilla-La Mancha y colaborador de la OBS Business School, considera que es acertado, tanto desde el punto de vista de la seguridad como del rigor: "Los datos de los que aprende nos pueden llevar a conclusiones que la mayoría de gente puede interpretar como verdaderas y están sesgadas por los datos de entrenamiento". Cree que de momento no se ha traspasado ninguna línea, pero asegura que "estamos en un punto crítico" que requiere de regulación para evitar que se use con malos fines. "Solo debemos desarrollarlos cuando estemos seguros de que los riesgos van a ser manejables", afirma.
En los últimos días se han viralizado en redes sociales imágenes que se parecen mucho a fotografías, pero no lo son, como las del papa Francisco vistiendo un moderno abrigo blanco. Son imágenes creadas digitalmente. Cada vez está siendo más difícil distinguir lo real de lo creado por un algoritmo, y los bulos proliferan más fácilmente que nunca.
La inteligencia artificial está ya detrás de muchos ámbitos de nuestra vida, que tal vez ni siquiera imaginamos. Lo que nos cuesta un seguro de salud, por ejemplo, puede venir determinado por un algoritmo con sesgos, que perjudique a determinados colectivos vulnerables.
Cada vez que tocamos algo, dejamos un rastro único, la huella dactilar, un patrón de líneas curvas que no compartimos con nadie más. Por eso, esta huella sirve desde hace más de 200 años para identificarnos. Es fundamental, por ejemplo, para descubrir la identidad de un criminal o ponerle nombre a un cadáver. ¿Pero cómo se forma ese modelo exclusivo que no tiene un componente genético? Pues la ciencia parece haber encontrado la respuesta.
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