- El alto el fuego debe entrar en vigor el próximo domingo
Albares se ha reunido en Beirut con el presidente del Parlamento, Nabih Berri, con quien ha analizado el cumplimiento del acuerdo de alto el fuego de dos meses alcanzado con Israel al pasado 27 de noviembre para poner fin a los combates entre el Ejército israelí y Hezbolá. El ministro de Exteriores ha anunciado una aportación de 10 millones de euros para ayudar a la reconstrucción del sur de Líbano y otros 10 millones para formar al Ejército para dotarle de mejores medios y salarios. Asimismo, ha pedido la vuelta a casa de todos los rehenes y la entrada masiva de ayuda humanitaria a la franja.
- Albares reitera en Beirut el apoyo de España a Líbano y promete 10 millones de euros para sus Fuerzas Armadas
- En Damasco, presidirá el izado de la bandera española en la embajada, arriada desde 2012
- El Gobierno israelí votará el jueves el acuerdo de alto el fuego en Gaza
- El recién elegido presidente, Joseph Aoun, ha anunciado el nombramiento tras reunirse con los grupos parlamentarios
- El apoyo a Salam subraya el gran cambio en el equilibrio de poder en Líbano y la pérdida de influencia de Hizbulá
- Un tratamiento pionero con colirios y lentes ralentiza la miopía en niños
- Los expertos calculan un interés hipotecario entre el 2% y el 2,5%
El Líbano ya tiene presidente tras más de dos años de parálisis política. Joseph Aoun, considerado el candidato favorito de EE.UU. y de Arabia Saudí, ha sido elegido en segunda vuelta con el apoyo de 99 diputados de los 128 del Parlamento libanés.
En su mandato de seis años, Aoun tiene por delante grandes desafíos. Entre ellos, garantizar la tregua firmada con Israel para que el Ejército hebreo se retire del sur del país. También deberá formar un Gobierno capaz de implementar las medidas económicas que le exige la comunidad internacional y poder salir del colapso financiero.
- Aoun se compromete a que el Estado tendrá "el monopolio de las armas"
- El puesto, que debe corresponder a un cristiano, estaba vacante desde hacía dos años
En 2024, israelíes y libaneses fueron adentrándose una escalada bélica que ha quedado congelada con una frágil tregua que puede romperse en cualquier momento. Tras décadas de hostilidades y ocupaciones israelíes, la posibilidad de un acuerdo que lleve la paz a la región parece muy lejana. El Líbano parece víctima de una maldición bélica y ha acabado el año aún peor: está sumergido en una crisis económica, política, bélica y humanitaria. Informa Fran Sevilla.
Se cumple un mes del alto el fuego en Líbano. El Ejército libanés denuncia más de 300 bombardeos israelíes en el último mes. El Ejército hebreo dice que son la respuesta de ataques previos de Hizbulá. Pese a pender de un hilo, el nuevo escenario abierto en Siria hace pensar a los expertos que mantendrán vigente el alto el fuego. Según Israel, ha intervenido el 80% de armamento de Hizbulá. La caída de Asad en Siria complica a Irán el abastecimiento a la milicia libanesa por su frontera.
Medio millón de libaneses han vuelto a sus hogares y la población israelí sigue desplazada; sus tropas no han cumplido aún la retirada pactada. Mientras, los hutíes, con base en Yemen, retan a Israel con cuatro ataques en una semana.
- Ha sido el año, además, en el que la juventud española salió a las calles para defender el derecho a una vivienda digna
- Y 2024 será recordado igualmente por los Juegos Olímpicos de París, con la victoria de la selección masculina de fútbol
2024, el año de la dana. Pero también el año en el que la juventud salió a las calles para defender el derecho a una vivienda digna. El primer año de una legislatura endiablada, en el que la vergüenza cambió de bando, gracias a Gisèle Pelicot. Año olímpico y de despedidas como la de Rafa, del regreso de Donald Trump y de la extensión de los conflictos, en el que Israel ha reducido Gaza a escombros y ha vuelto a invadir el Líbano. Todo con un elemento común: Radio Nacional de España estuvo allí. Un trabajo de Adrián Ferro y de Víctor Fuciños junto al equipo del Archivo Sonoro y a las y los especialistas de RNE.
La caída de la dinastía Al Asad en Siria reconfigura el mapa geopolítico en Oriente Próximo
- Los acontecimientos en Siria influyen en una región sacudida por las guerras en Gaza y Líbano
- DIRECTO: sigue la última hora del fin del régimen en Siria
- El especialista en Líbano y Siria acaba de publicar el libro Hezbolá. El laberinto de Oriente Medio
- Analiza la actualidad en Damasco y sobre el origen, desarrollo y el papel de la milicia chií en la región
En Siria, milicias contrarias al presidente Al Asad avanzan rápidamente desde varios puntos del país hacia la capital, Damasco. Un grupo de insurgentes está a solo 20 km de la capital. Quieren cercarla y derrocar al régimen. Un equipo de RTVE está en la frontera entre Líbano y Siria.
En las afueras de Tiro, la segunda ciudad de Líbano, abren una fosa común con decenas de cadáveres. Son algunos de los fallecidos en los bombardeos israelíes de las últimas semanas. Ahora, con la tregua, las familias llegan a la zona, tratando de superar el nauseabundo olor. Algunos portan el retrato de sus seres queridos, y los buscan, y lloran delante de donde está su cuerpo.
- En Nabatiye, al sur del Líbano, el rastro de las bombas sigue demasiado presente
- Un equipo de TVE acompaña a unos estudiantes a su escuela en un barrio cristiano bombardeado por Israel
- Una delegación israelí visitará El Cairo para abordar un posible acuerdo de tregua en Gaza
- Las tropas han matado a al menos 50 personas en Jan Yunis y Al Mawasi, zonas designadas como humanitarias
- Culpan a la comunidad internacional por su silencio y le piden que actúe
- Han condenado la espiral "de odio, muerte y destrucción" que se ha desencadenado en la región
- En las últimas horas, tanto Israel como Hizbulá se han acusado mutuamente de violar el alto el fuego
- Pese a la incertidumbre, muchos se aferran a la esperanza y están tratando de comenzar de cero
El suburbio de Dahye, ubicado en Beirut, ha sido el epicentro de los ataques israelíes. La tregua, que sigue vigente, ha devuelto cierta normalidad a los ciudadanos a pesar de la enorme devastación de barrios enteros. Por el momento, las máquinas aún no han entrado para remover los escombros y los vecinos, con sus propias manos, reparan sus casas y sus tiendas.
Pese al alto el fuego, en las últimas horas, Israel e Hizbulá se han acusado de violarlo, aunque muchos se aferran a la esperanza y están tratando, rápidamente, de rehacer sus vidas.
- La ofensiva está dirigida por el grupo yihadista HTS, nacido como filial de Al Qaeda en Siria
- Hizbulá e Irán han perdido presencia en Siria por la guerra con Israel
- La milicia chií ha lanzado dos proyectiles en la frontera, lo que Tel Aviv considera una "grave violación del alto el fuego"
- El Líbano ha anunciado la muerte de nueve personas por ataques israelíes en el sur del país
La pequeña Qadira juega en el estadio de fútbol de Beirut. No es consciente de que se ha transformado en un gran refugio. Durante 20 días, cerca de 80 personas trabajaron sin descanso 24 horas al día para crearlo. Lleva abierto una semana y de momento acogen a 600 personas. Cada familia tiene su habitación propia. Unas 20 personas, entre personal y voluntarios, se encargan de que no les falte de nada. Los bombardeos han destrozado en los últimos meses 100.000 edificios en Líbano. Fátima y sus niñas tendrán que estar aquí alrededor de un año, hasta que reconstruyan su casa, pero lo importante es que, en las pequeñas, ya no hay rastro de miedo.
El alto el fuego entre Israel y la milicia chií de Hizbulá entró en vigor el pasado miércoles. Desde entonces ha habido algunas escaramuzas y también restricciones de movimientos en el sur por parte de Israel. Ahora, los esfuerzos del Líbano se centran en el millón de desplazados y en hacer balance de daños.
Foto: Un camión de bomberos en Beirut (AFP)
- El Ejército israelí impide acceder a 60 poblaciones del sur
- Unos 60 palestinos han muerto esta jornada en la Franja por ataques israelíes
Josep Borrell se despide como alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores en 'Las Mañanas de RNE' con "una enorme frustración" por la incapacidad para parar la masacre en Gaza. "La tregua en Líbano es muy frágil, pero, por lo menos, no va a llevar un cortejo de muertos y destrucción. En cambio, en Ucrania las cosas van peor, no podemos estar satisfechos de cómo van las cosas", asegura Borrell. Sobre la situación en Gaza, el alto representante considera que el mundo no es consciente de lo que está pasando allí. "No somos capaces de conseguir que se abran las puertas y entre ayuda para que los palestinos sobrevivan".
Respecto a cómo afectará en Ucrania la llegada de Trump a la Casa Blanca, Borrell insiste en que dejar de ayudar a Ucrania "y ponerla de rodillas delante del Kremlin sería una manera rápida, pero profundamente injusta y dramática de acabar una guerra". "Yo no quiero que esa sea la forma de acabar esa guerra. ¿Trump la quiere acabar así? ¿Tiene otra solución? No lo sabemos". Josep Borrell asegura que el mundo "está mucho peor" que hace 5 años y subraya que "hay que espabilar, hay que levantarse y ponerse a trabajar". "La guerra de Ucrania fue un despertar. Los tiempos son difíciles y la posición de Europa es frágil".
En su primera visita a España desde que asumió el cargo hace dos años, el primer ministro iraquí, Mohammed Shiá al Sudani, valora el alto el fuego entre Israel e Hizbulá en Líbano como un paso importante al que debe de seguir otra tregua para Gaza. "Creemos que la comunidad internacional no ha hecho lo suficiente para cumplir con sus compromisos. Las consecuencias de esta guerra no terminan en las fronteras de Oriente Próximo", ha dicho en una entrevista con TVE.
Las milicias proiraníes en Irak han hecho temer una reacción de Israel sobre el país y Shiá al Sudani insiste en que el Gobierno hace todo lo que puede por estabilizar la zona. "Pero también tenemos que ser conscientes de que la raíz de este conflicto es la continuación en los actos criminales de esta guerra. Todos los pueblos de la zona siente rabia e ira ante un escenario sanguinario que diariamente estamos viendo".
Foto: Alberto Ortega / Europa Press
La tregua de 60 días entre Israel y el grupo chií libanés Hizbulá llega tras más de un año de combates entre las partes. Durante este tiempo, más de 3.800 personas han muerto y 1,2 millones han tenido que abandonar el Líbano. En la frontera entre ambos países, la población trata de retomar sus vidas de antes de tener que huir por la guerra y en ciudades como Beirut y Tiro los bombardeos han causado graves destrozos en edificios de viviendas y comercios.
Ossam Hushoush, comerciante en Tiro (Líbano), cuenta cómo afecta a su vida esta situación: "La guerra definitivamente ha afectado a nuestro sustento, nuestros negocios y nuestras vidas, pero no nos detenemos ahí, si Dios quiere seguiremos adelante y tendremos días hermosos y buenos en este país".
En la frontera israelí, intentan volver a su rutina anterior a la guerra. Como cuenta a Reuters Anne Mama, una granjera que vive en Zar'it: "Aquí estamos de nuevo. Tenemos paz entre comillas, que no creo que dure. Quizás dura un par de meses, quizás un año o dos años, pero estaremos en el mismo estado de amenaza otra vez".
- La tregua en Líbano contrasta con la realidad de la Franja, donde han muerto una veintena de personas en las últimas horas
- El Ejército israelí ha impedido en 82 ocasiones el acceso de ayuda humanitaria, según la UNRWA