Una fortísima tromba de agua, que descargó en poco más de dos horas un tercio de las lluvias de todo el año, ha arrasado esta madrugada el centro de Italia, donde al menos 10 personas han muerto y otras 4, incluidos dos niños, están desaparecidas, y donde el barro y el agua han devastado varios pueblos, que no fueron alertados del peligro.
Todas las víctimas se registraron en la provincia de Ancona, en la región de Las Marcas, el área más afectada por la intensa tormenta, que los meteorólogos atribuyeron a los efectos de un calurosísimo verano, al tiempo que alertaron de la posibilidad de intensas trombas de aguas en todo el país durante el próximo mes.
Cerca de 200 bomberos y varios helicópteros trabajan desde anoche en las zonas afectadas, entre las provincias de Ancona y Pesaro-Urbino, donde están buscando a los desaparecidos una vez que las lluvias han parado, desplazándose hacia el sur del país.