Centenares de policías antidisturbios turcos han entrado con blindados en la céntrica plaza de Taksim de Estambul, donde desde hace dos semanas se concentraban los manifestantes que piden la dimisión del primer ministro, Recep Tayyip Erdogan.
Los agentes han tomado el control de la plaza tras disparar gas lacrimógeno y usar cañones de agua contra los pequeños grupos de personas que se encontraban en la plaza, según informan Reuters y la emisora de televisión NTV. Algunos de estos grupos de "resistentes" han lanzado cócteles molotov contra la Policía.
La enviada especial de TVE, Anna Bosch, lo ha contado en directo desde las calles adyacentes.