Odesa, una resistencia hecha de arena: "Solo queremos sobrevivir"
- La población civil trabaja para proteger su patrimonio cultural ante el avance de las tropas rusas en la ciudad
- Sigue la última hora del conflicto entre Rusia y Ucrania en directo
El periodista estadounidense Brent Renaud ha muerto en Irpin, a las afueras de Kiev, donde las fuerzas ucranianas luchan contra las rusas. Aunque en un primer momento estas mismas fuentes informaron de que el fallecido trabajaba para The New York Times, ya que portaba un carné de prensa expedido por el diario, el propio medio de comunicación ha asegurado que no mantenía ningún tipo de relación profesional con él desde 2015.
FOTO: REUTERS / VALENTYN OGIRENKO
En Odesa las calles ya están completamente militarizadas. La ciudad conocida como la perla del mar Negro se prepara para defenderse ante el avance de la invasión rusa. Se ven sacos de arena, barricadas y grandes cruces de acero. En el centro, sobre todo, están intentando proteger los edificios más emblemáticos. Se respira la tensión de estos días. Se trata de la tercera ciudad más importante de Ucrania y cuenta con el puerto marítimo más relevante del país. Si Moscú toma Odesa, podría aislar a Ucrania del mar, razón por la cual la población es consciente de que vive en uno de los principales objetivos de la ofensiva rusa.
FOTO: REUTERS / ALEXANDER ERMOCHENKO
Un autobús ha recorrido 7.000 kilómetros desde un pueblo de Pontevedra, Lalín, hasta la frontera con Ucrania. Ha atravesado Francia, Alemania y Polonia en 44 horas de viaje para descargar 7.500 kilos de material para ayuda humanitaria e ir al encuentro de 48 personas que necesitaban refugio, la mitad de ellas niños.
FOTO: AFP / GIL COHEN-MAGEN
En la capital de Ucrania, Kiev, entre constantes bombardeos, Alla cuida de su hijo mayor. Es paralítico y cada vez es más difícil cubrir sus necesidades. Empiezan a escasear las medicinas y el material sanitario como los pañales. No pueden moverse de casa porque teme por sus vidas y también por la de su hija pequeña. También está asustada Natalia, enferma renal que se hace la diálisis en un centro sanitario de kiev, pero no sabe hasta cuándo podrá seguir tratándose. Los cortes de luz y agua dificultan un tratamiento que se repite varias veces por semana. En Ucrania hay gente que lleva más de siete días sin dializarse.
Foto: Maternidad en Kiev (EFE/EPA/ROMAN PILIPEY)
En Tiráspol, la capital de la región separatista de Transnistria, reivindicada por Moldavia, la presencia soviética permanece en sus calles. También los vehículos militares rusos y los 1.500 soldados estacionados desde principios de los años 90 en esta región fronteriza con Ucrania. En la otra orilla del mar Negro, las repúblicas separatistas de Osetia del Sur y Abjasia están apoyadas por Rusia y reivindicadas por Georgia. Desde la caída de la Unión Soviética, Moldavia, Georgia y Ucrania han mantenido una relación tumultuosa con la potencia euroasiática. Bruselas ha reiterado su apoyo inquebrantable a la soberanía e integridad territorial de Georgia y Moldavia.
Foto: Vista del busto de Lenin delante de la Casa de los Sóviet en Tiráspol, capital de la autoproclamada República de Transnistria, Moldavia (EFE/ Ignacio Ortega)
Las protestas en Rusia están prohibidas y son reprimidas por la policía. Mientras, en la ciudad ucraniana de Jersón, ocupada por las tropas rusas, decenas de ucranianos han salido a la calle para protestar ante la mirada atenta de los ocupantes. También se han sucedido las manifestaciones contra la guerra en otras ciudades europeas. La más multitudinaria ha sido la de Berlín, en la que han participado más de 100.000 personas.
Foto: Protesta en Berlín contra la invasión rusa de Ucrania (REUTERS/Christian Mang)
El día comenzaba con las alarmas antiaéreas sonando en Leópolis, en el oeste del país. A tan solo 40 km de la ciudad, los misiles rusos caían en la base militar de Yavoriv. Un centro donde se entrenan los combatientes extranjeros y llegan las armas que envían los países occidentales. Una treintena de misiles lanzados desde el Mar negro y el Mar de Azov golpeaban de lleno la base militar. El ataque ha causado 35 muertos y decenas de heridos que han sido llevados al hospital más cercano a la base. Segun Rusia, han muerto 180 extranjeros y han destruido un buen número de armas.
[Guerra en Ucrania: última hora en directo]
FOTO: Una columna de humo y numerosos daños tras el ataque rusa a la base militar de Yavoriv. @BackAndAlive/via REUTERS
El futuro presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, considera imprescindible apoyar al Gobierno dada la situación. Aunque a la entrada de la reunión de presidentes autonómicos había pedido una rebaja total de impuestos. Feijóo ha trasladado que esperaba "más": "Esperaba que hubiese un acuerdo de rebajas fiscales concretas, explícitas, con plazos y destinatarios". También otros líderes, como la madrileña Isabel Díaz Aysuo, ha propuesto desviar 20 mil millones de euros que se destinarán para proyectos de igualdad a otros asuntos "más importantes". Otros líderes, como el andaluz Juan Manuel Moreno, ha insistido en que estas decisiones "no se queden en papel mojado". Sobre la acogida de refugiados, han lamentado que el Ejecutivo no tenga un plan de acogida.
Informa Adriana Jordán
Se cumplen 18 días desde el inicio de la invasión a Ucrania y Rusia ha atacado una base militar en el oeste de Ucrania, a solo 25 kilómetros de la frontera con Polonia. El bombardeo ha causado 35 muertos y 134 heridos, según las autoridades locales. Mientras tanto, en el este del país las tropas rusas intentan rodear a las ucranianas avanzando desde Járkov, en el norte, y Mariúpol, en el sur. Según la inteligencia británica, los rusos avanzan desde Crimea para rodear Mykolaiev y dirigirse a Odesa, más al oeste y el puerto más importante del Mar Negro.
Francisco Veiga, profesor de Historia Contemporánea y del máster de Eurasia de la Universidad Autónoma de Barcelona, ha asegurado en el 24 Horas con Ana Marte Ersoch que es posible un alto el fuego de Rusia: "Se habla de una posible firma de cese del fuego en dos o tres días", expresa. "De alguna forma hay objetivos que los rusos han conseguido y yo creo que posiblemente se considera que podría ser inminente un alto el fuego".
Sobre el ataque a la base militar de Ucrania, a tan solo 25 kilómetros de Polonia, Veiga expresa: "En días anteriores Moscú advirtió que atacaría envíos de armas a Ucrania, por lo que el ataque a esta base yo creo que responde a estas advertencias". Sobre el uso de armas químicas, cree que estamos en una "fase de escalada" del conflicto, pero parece que los contactos entre delegaciones rusa y ucraniana van aumentando: "El argumento de Putin era disuadir la expansión de la OTAN cercana a sus fronteras, si Moscú considera que la OTAN está advertida de esto, habrá llegado el momento del final de la guerra".
Brent Renaud, un cámara estadounidense, ha fallecido en la localidad de Irpín por disparos aparentemente de tropas rusas, mientras filmaba la salida de refugiados. Así lo ha contado Juan Arredondo, otro cámara colombiano que le acompañaba, que también resultó herido en el ataque. Irpín es uno de los lugares más frecuentados por la prensa porque es por donde huyen numerosos civiles de combates. Renaud llevaba una acreditación de prensa de NY, aunque este periódico ha dicho que no trabajaba con él desde 2015.
Informan Óscar Mijallo, Miguel de la Fuente y Hugo Hubeda, en Kiev
Rusia mantiene su asedio a Kiev y amplía su ofensiva por el oeste, en las zonas más próximas a la frontera de la Unión Europea, para cortar cualquier tipo de suministro. Aviones procedentes a la armada rusa han lanzado 30 misiles en Yavoriv, a solo 25 kilómetros de la frontera con Polonia. El bombardeo ha causado 35 muertos y 134 heridos, según las autoridades locales. Esta base militar tendría capacidad de 1.800 personas y en ella habría asesores militares internacionales. Ucrania pide más medios par poder protegerse de ataques como este.
Informan María Eulate y Luis Montero, enviados especiales
Hace unos días conocíamos la dimisión de Tugan Sokhiev como director del Teatro Bolshói de Moscú; dijo que lo hacía por el conflicto en Ucrania. La guerra ha llegado hasta el mundo de la cultura; países e instituciones empiezan a vetar el arte que llega de Rusia.
Continúan llegando refugiados ucranianos a toda España huyendo de la guerra en su país, y continúan los recibimientos, los abrazos, los besos y las lágrimas. El viaje para ellos ha sido largo y complicado, y tampoco ha sido fácil para las familias de acogida.