El Gobierno de Ucrania ha pedido a los civiles que salgan de la región de Lugansk, en el Donbás, después del ataque ruso del viernes a una estación de tren en la ciudad de Kramatorsk, en el que murieron al menos 50 civiles. Las sirenas antiaéreas han sonado en buena parte del este del país en las últimas horas, ante la previsión de nuevos ataques.
FOTO: Imagen de la estación de tres de Kramatorsk desde el interior de un vagón de tren destrozado tras el bombardeo del viernes. FADEL SENNA / AFP
El ataque ruso contra la estación de Kramatorsk, que ha dejado más de 50 muertos y cien heridos, está dificultando que continúen las evacuaciones de civiles víctimas de la guerra. La paralización de la estación de tren de Kramatorsk, que era un nudo ferroviario en el que concluían muchas líneas, está ralentizando el ritmo de huida. Las autoridades aseguran que se buscan alternativas, pero siguen llegando desplazados.
Las personas que llegan a Kiev insisten que les ha impactado la matanza de Kramatorsk. "Era un horror, había tantos gritos que se me ponían los pelos de punta, no se puede describir con palabras", dice Ludmila, que huye de la región. Natalia, una mujer de mediana edad que viaja sola con sus 6 hijos, también intenta llegar a la frontera: "Es difícil, llevamos viajando desde las 2 de la madrugada, los niños están cansados, tienen hambre, intento tranquilizarlos", nos cuenta. Su objetivo es salir de Ucrania hacia Polonia.
El presidente del Gobierno le ha pedido este sábado al PP que no ceda al chantaje de la ultraderecha y que mire más "a la derecha europea y menos a la ultraderecha española". Así lo ha señalado en un acto de partido en Madrid, donde ha asegurado que los crímenes de guerra en Ucrania no van a quedar impunes.
FOTO: El presidente del gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, participa en un acto de su partido celebrado este sábado en el Espacio Rastro Madrid. EFE/Victor Lerena
Tras el bombardeo de la estación de Kramatorsk, el ritmo de evacuación de civiles se ha ralentizado. Kramatorsk se trataba de un importante nudo ferroviario, por lo que las autoridades buscan ahora alternativas para continuar con las evacuaciones. En la estación central de Kiev, donde se encuentra nuestro enviado especial, Fran Sevilla, llegan desplazados especialmente de la región del Donbás. Mientras, continúa la conmoción por la mayor masacre de la guerra.
Al menos 50 personas murieron el viernes en un ataque con misiles contra la stación de tren de Kramatorsk, principal bastión militar ucraniano en el Donbás. Rusia no reconoce el bombardeo y culpa a Ucrania, quien afirma que Moscú es responsable, como prueba la leyenda 'Venganza por los niños' que se podía leer en ruso en uno de los proyectiles que no ha explotado. Kiev espera ahora un intento de las fuerzas de Putin para controlar por completo Donetsk y la vecina Luganks, en la zona del Donbás.
FOTO: Coches calcinados tras el ataque con misiles a la estación de Kramatorsk, en el este de Ucrania. FADEL SENNA / AFP.
Los ataques rusos a la población civil ucranania y los saqueos de casas y edificios públicos y privados por parte del Ejército ruso, son los protagonistas de esta guerra. Un grupo de ciudadanos ucranianos en Leópolis ha querido denunciar con protestas frente al Consulado Ruso inoperativo en la ciudad estos saqueos muy presentes estos días en el país. Portátiles, microondas y móviles manchados con sangre frente al edificio recuerdan estos actos cometidos por los rusos.
Un ataque del ejército ruso con misiles contra la estación de tren de Kramatorsk, en la región de Donetsk, al este del país, ha dejado al menos50 muertos y más de un centenar de heridos, según ha confirmado el gobernador de Donetsk. El alcalde asegura que en el momento del ataque había unas 4.000 personas que se encontraban en la estación esperando a ser evacuados de la zona donde las tropas de Putin han centrado ahora su ofensiva para controlar totalmente el Donbás. Los rusos niegan haber atacado y culpan a los ucranianos del bombardeo. Es la mayor agresión contra civiles en Ucrania hasta el momento.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el alto representante para la Política Exterior de la Unión Europea, Josep Borrell han visitado Bucha y se han desplazado también a Kiev para expresar todo el respaldo de la UE a Ucrania. "Vuestra lucha es nuestra lucha", ha dicho Von der Leyen. Ante la masacre en Kramatorsk, han asegurado que los responsables responderán ante la justicia y han calificado el bombardeo de "atroz" y "espeluznante". Radio Nacional de España ha podido conversar en exclusiva con Josep Borrell, quien ha reconocido haberse quedado muy conmocionado. "Esta gente está resistiendo con mucho dolor y hay que ayudarles", ha afirmado. Durante la jornada, también ha anunciado que la UE va a asignar otros 500 millones de euros para ayuda militar a Ucrania. "Zelensky está recibiendo muchos aplausos, pero ahora, más que aplausos, lo que necesita son armas", ha aseverado.
El fiscal Carlos Castresana ve complicado que Vladimir Putin sea juzgado por crímenes de guerra: "Es muy posible que no sea sometido de una manera efectiva a proceso". En ese sentido ha explicado que va a recopilarse toda la prueba disponible, se van a formular acusaciones, que pueden incluir al propio presidente ruso, a los altos responsables de su Gobierno y a los altos mandos militares de la Federación rusa, pero no se pueden hacer juicios en ausencia según el Estatuto de Roma. Igualmente ha recordado que aunque Putin no tiene inmunidad y se puede producir una persecución penal, "es difícil que tenga consecuencias prácticas si la situación no cambia radicalmente en Rusia porque Rusia, al menos en estos momentos, es impesable que vaya a entregarlo". Las imágenes que estamos viendo de la guerra en Ucrania son muy claras para el fiscal. "Ya no queda ninguna duda de que son crímenes de guerra", ha asegurado en 'Las Claves del Siglo XXI' el fiscal, que cuenta con 33 años de carrera fiscal, fue fiscal anticorrupción y también candidato a fiscal jefe en la Corte Penal Internacional. "Aquí tenemos ya la evidencia de que se ha elegido a los civiles como objetivo y eso está rigurosamente prohibido, es una infracción grave de las convenciones de Ginebra y por tanto son crímenes de guerra", sostiene Castresana, que recuerda que las convenciones de Ginebra están construidas sobre la base del principio de distinción y en las guerras los combatientes se pueden matar recíprocamente, pero no pueden atacar a quienes no lo son. "En estos momentos la Fiscalía ucraniana dice que tiene 4.500 crímenes de guerra ya documentados, habrá que identificar a las personas responsables de esos crímenes y a partir de ahí construir un escrito de acusación", señala Castresana.
En Kramatorsk son al menos 50 los muertos en un ataque que ha dejado también decenas de heridos. Ha sido en la estación de tren, donde en ese momento se encontraban miles de personas que huían de las zonas más castigadas por la ofensiva rusa en el este.
A la estación de tren de Dnipro llegan refugiadas todos los días con sus hijos desde la zona del Donbás. Este viernes, algunas de ellas provenían de Kramatorsk, de donde partieron minutos antes de que se produjera el ataque sobre la estación. En los centros de acogida de Dnipro cada vez llegan más refugiados. Allí dan comida, medicamentos, apoyo legal y hasta psicológico a quienes huyen de zonas de combate o ciudades ya controladas por las fuerzas rusas. Informa el enviado especial de TVE, Víctor García Guerrero.
Ucrania cumple 44 días de guerra con las tropas rusas centradas en el Donbás, donde Occidente espera que se produzca una gran ofensiva. Al menos 50 personas han muerto y decenas han resultado heridas en un bombardeo en la estación de Kramatorsk, al este del país. Tanto Kiev como Moscú niegan su responsabilidad y acusan al otro bando.