El decreto establece que las medidas ventajosas para los ERTE acaban cuando se decida el fin del Estado de Alarma. Si después las empresas siguen teniendo problemas, tendrán que tramitar otros expedientes con la regulación laboral anterior. No podrán solicitarlos ni hospitales, ni ambulatorios, ni residencias y centros de día públicos o privados al ser considerados servicios esenciales. El decreto, más que prohibir, encarece el despido con motivo de la pandemia.
Además, otro decreto de Sanidad, obliga a volver al trabajo a los liberados sindicales sin que eto les permita prescindir se su sustituto. Informa Esperanza Martín.