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Las deficiencias genéticas o inmunológicas de los pacientes de coronavirus es la causa de que la enfermedad se manifieste de manera grave. Alrededor 10% de los pacientes, sobre todo jóvenes y previamente sanos, que desarrollan la enfermedad del Sars-Cov2 de forma grave, lo hacen porque tienen anticuerpos erróneos y el 3,5% por mutaciones genéticas. Son los resultados de un estudio publicado en la revista Science por investigadores del consorcio internacional Covid Human Genetic Effort, en el que participan 50 centros, entre ellos 2 hospitales canarios. Esta investigación podría ayudar a adaptar los tratamientos y a resolver la incógnita de por qué la mortalidad es mayor en hombres que en mujeres. Informa Helena Sampedro.

El Gobierno central valora tomar el mando de la Comunidad de Madrid si no llega a un acuerdo con Isabel Díaz Ayuso para controlar la pandemia del coronavirus. Podría hacerlo mediante el artículo 65 del Real Decreto Ley de la Nueva Normalidad en caso de no alcanzar ningún acuerdo con Madrid, según ha podido saber RTVE por fuentes de la Moncloa. Mientras, el Gobierno autonómico acusa a Sanidad de "deslealtad". [Coronavirus: última hora en directo

Nueva York cerró casi al mismo tiempo que España, con un confinamiento menos estricto. La curva de contagios por coronavirus de Nueva York y Madrid son casi gemelas al inicio de la pandemia y en la desescalada, pero se divorcian al arrancar el otoño. En el estado y la ciudad de Nueva York la incidencia es de menos de 30 nuevos casos por cada 100.000 habitantes, mientras que en la Comunidad Madrid son más de 700.

Italia presume de haber hecho uno de los confinamientos más duros, que arrancó el 9 de marzo, seis días antes del que se decretó en España. En ese momento había más de 9.000 casos y la cifra de muertos por coronavirus se acercaba al medio millar. Para la desescalada, tanto España como Italia eligieron el 4 de mayo y en ambos casos se hizo de manera progresiva y por fases. Seis meses después, el panorama es bien diferente. De ser el epicentro del COVID en Europa, a ejemplo para sus vecinos europeos. Italia ahora tiene una incidencia acumulada diez veces menor que la de España.

El balance que hacen todos los expertos científicos consultados por el Telediario es coincidente. Las nuevas medidas adoptadas este viernes por la Comunidad de Madrid, como las de la semana pasada, son "insuficientes", "llegan tarde" y deberían aplicarse a un entorno mayor y ser "más restrictivas".

"Son insuficientes a todas luces, llegan tarde y son incoherentes", sostiene Salvador Peiró, investigador de la Fundación Fisabio, en declaraciones a TVE. Una opinión que comparte Ildefonso Hernández, portavoz de la Sociedad Española de Salud Pública y Administración Sanitaria, que añade que "en países con indicadores mucho menores se toman medidas más estrictas" que las del gobierno madrileño.

"Es totalmente artificial segmentar cuando estamos teniendo en las zonas que no han sido restringidas asintomáticos, positivos y transmisión del virus", abunda Daniel López Acuña, exdirector de Acción Sanitaria en Crisis de la Organización Mundial de la Salud.

En el barrio de Vallecas, en Madrid, este viernes se ha concentrado el triple de personas que en la jornada anterior, para protestar por las cargas policiales y también contra las restricciones de movilidad en el sur de la capital por el coronavirus. Con lemas como "Menos Policía y más Sanidad", los manifestantes se han concentrado primero ante la Asamblea de Madrid y después han avanzado por las calles del barrio madrileño. La Delegación del Gobierno en Madrid ha anunciado que va a investigar las cargas policiales que dejaron cuatro detenidos y seis heridos.

Mientras las autoridades sanitarias protagonizan desencuentros en ruedas de prensa, en muchas calles de la Comunidad de Madrid se reciben con resignación las nuevas restricciones. Se suman 8 zonas básicas de salud a las 37 que permanecían confinadas desde esta semana, otros barrios en los que no se podrá entrar ni salir sin motivo justificado. Los vecinos, de nuevo, manifiestan reacciones contrapuestas, entre la resignación y la protesta.

La pandemia de coronavirus no justifica, por sí sola, que los niños no vayan a clase. Así lo recoge un informe de la Abogacía del Estado que sólo justifica que los alumnos se queden en casa si tienen problemas previos de salud o si conviven con personas vulnerables. El dictamen lo había solicitado el Ministerio de Educación ante la postura de algunas familias de no llevar a los niños al colegio por miedo al contagio.

Un estudio de la desescalada en nueve países subraya los problemas de España al hacer frente al coronavirus: el rastreo y la apertura de fronteras. "No entendemos por qué se tardó mucho en implantar rastreadores en Europa", explica la investigadora en Salud Pública y coautora del estudio de The Lancet, Helena Legido-Quigley. El análisis apunta también a la falta de estrategia clara y decisiones transparentes. [Coronavirus: última hora en directo

"Hemos fallado en involucrar a la población en la toma de decisiones", ha explicado Legido-Quigley en una entrevista en el Telediario en la que ha comparado las estrategias de los países europeos con otros como Nueva Zelanda, Singapur u Hong Kong. La experta considera que faltan planes claros, buena comunicación y liderazgo, además de datos epidemiológicos a tiempo real e inversión pública. "Se debería invertir más en mejorar el sistema de salud", ha reclamado la experta que reclama una evaluación "lo antes posible".

En el informativo 14 horas de Radio Nacional hablamos con Ángel Gil de Miguel, el catedrático de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad Rey Juan Carlos, sobre las medidas restrictivas ampliadas por la Comunidad de Madrid a 8 zonas sanitarias más que la semana pasada. "Ellos tienen más información y todos los datos. Desde su punto de vista, están aplicando restricciones en aquellos barrios que superan la cifra de 1.000 contagios por cada 100.000 habitantes" ha dicho Gil de Miguel. "Creo que a veces es mejor ser un poco más contundente. Marcar fronteras entre barrios en una ciudad como Madrid es tremendamente complicado. Igual hubiese sido mejor confinarnos a todos durante dos, tres semanas, y entre todos contribuir a reducirlo". Sobre la movilidad en Madrid, Gil de Miguel defiende que "no se puede controlar" ya que Madrid es una ciudad compleja y una Comunidad con una densidad de población tremendamente elevada. "Igual tenemos que hacer un esfuerzo entre todos, no solo los de un barrio".