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Hasna Aitbouhlacen quería hacer el mismo viaje que las tres adolescentes británicas, en mayo partieron hacia Turquía camino de Siria. Hasta allí fue Sara Meheni, otra joven francesa a la que el Estado Islámico casó con un combatiente tunecino nada más llegar. Aitbouhlacen escribió el 11 de junio en las redes sociales: "Pronto voy a ir a Siria", pero nunca fue. Y se ha convertido en la primera mujer suicida que se inmola en Europa.

El belga Abdelhamid Abaaoud, considerado el cerebro de los atentados de París, ha sido identificado como uno de los terroristas fallecidos este miércoles en el asalto de Saint Denis, según ha indicado la Fiscalía de París. Abaaoud, ciudadano belga de 28 años, planificó la masacre del 13-N y es sospechoso de organizar diversas acciones terroristas en Europa en nombre del autoproclamado Estado Islámico.

El exministro socialista Jesús Caldera habla sobre la amenaza del terrorismo yihadista y señala que "no solo quieren destruir los valores de Occidente, quieren tiranizar a sus propios hermanos". Una amenaza, dice, contra la que hay que permanecer unidos, pero apunta que "no se soluciona solo con la fuerza, hace falta mucho más, educación, integración y diálogo entre todos".

El ministro de Exteriores asegura que, de momento, ningún país ha solicitado nada a España y apuesta por un plan internacional conjunto para acabar con los terroristas de Daesh. España -dice- hará un esfuerzo, como miembro de la coalición antiyihadista. Sobre una posible intervención militar de España en Siria, lo prudente- dice- es esperar a que pasen las elecciones generales.

El Estado Islámico crece más allá de una organización terrorista. Nutre sus filas con los restos institucionales del fallido estado de Irak, servicios de inteligencia incluidos, y se financia con el petróleo, la extorsión y la apropiación de fondos bancarios en las áreas que conquista. Así extiende su tejido con vocación de nación para materializar el Califato.  Los atentados de París son el último episodio de una historia que ha terminado de convencer a Occidente de que debía mirar hacia Asia.

Hasta ahora se sabe que nueve personas participaron directamente en los atentados del viernes. Cinco están identificados. Tres han muerto en el ataque a la sala Bataclan, Samy Amimour, Omar Mostefai y un tercero no identificado. En las terrazas de los distritos 10 y 11 de París atentaron los hermanos Abdeslam, Brahim, muerto, y Salah, huido, así como un tercer terrorista no identificado. De los tres suicidas que atentaron en el estadio de Francia solo ha sido identificado Bilal Hafdi.

28 años, de Bruselas pero de origen marroquí. Abdelhamid Abaaoud, supuesto cerebro de los atentados y sospechoso de organizar desde Siria varias acciones terroristas en Europa. Se hace llamar el emir de los yihadistas de Bélgica. Amigo de la infancia de los hermanos Abdeslam, en particular de Salah, el terrorista más buscado desde los atentados de París.

Cuatro y veinte de la madrugada. Fuerzas Especiales de la policía se han desplegado en la Calle Republique y Corbillon de la localidad de Saint Denis. Buscan al cerebro de los atentados. Comienza el asalto, hay un fuerte tiroteo. Dentro de la vivienda, al menos hay cuatro hombres y una mujer que responden con fuego. Al parecer, la mujer pide ayuda a uno de los agentes y cuando uno de ellos se acerca, ella se hace estallar con un cinturón explosivo. Otro sospechoso muere alcanzado por los proyectiles de un francotirador.