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Los taxistas de toda Europa han protestado contra el servicio de transporte de viajeros entre particulares que ofrecen aplicaciones para teléfonos móviles como Uber. En España, el sector del taxi ha pedido al Gobierno que prohíba estas aplicaciones que llevan a prácticas "totalmente ilegales" que, en su opinión, hacen la competencia con vehículos sin control y sin autorización para dar servicio. Fomento se ha limitado a recordar las multas que prevé la ley.

Protestas de los taxistas en ciudades de toda Europa contra las empresas que conectan por Internet a usuarios y conductores particulares. Así amanecía esta mañana una de las terminales del aeropuerto de Barajas, en Madrid, donde este miércoles se ha convocado una huelga y una concentración por el centro de la ciudad. Protestas también en Barcelona y otras ciudades españoles. Además hay movilizaciones en Londres, Roma, Berlín y París. Bruselas defiende el derecho de los usuarios y el Gobierno recuerda que la ley sólo prevé multa para los transportistas que se lucren sin licencia.

Webs para compartir coche como Uber, BlaBlaCar o Easy Taxi han provocado un terremoto en el mundo del transporte público. Aprovechan las posibilidades que dan internet o el móvil y ofrecen aplicaciones que permiten a los particulares ponerse en contacto para compartir coche y gastos. 

Uber funciona en más de 100 ciudades del mundo. Un tribunal belga prohibió su uso en Bruselas y en España ha puesto en pie de guerra a los taxistas. Según la empresa estadounidense, el coche tiene que estar en perfectas condiciones, el conductor tiene que tener seguro, como mínimo a terceros, que la compañía completa con otra póliza que cubre daños a los pasajeros. 

Uber se lleva el 20% de lo que paga el pasajero con tarjeta de crédito.

El ministerio de Fomento recuerda que es necesario tener una autorización administrativa para transportar viajeros en turismos por cuenta ajena mediante retribución económica. Y advierte de multas si no lo tiene.

Plataformas como Uber o BlaBlaCar cuentan con el respaldo de la Comisión Europea, que está en contra de sancionar.

La ministra Ana Pastor ha dicho que desde que está al frente del Ministerio de Fomento, los sobrecostes de la obra pública se han reducido a cero. Por su parte, el exministro José Blanco ha dicho que fue el Gobierno anterior el que redujo los sobrecostes al 10%. Mientras las empresas reconocen que muchas veces se ven abocadas a pujar a la baja para conseguir licitaciones.

A partir de hoy, Renfe empieza a vender billetes de AVE con identificación del viajero. Según la compañía, es una forma de aumentar la seguridad ante fraudes y robos y también permitirá adaptar su política comercial a las necesidades de sus clientes, con ofertas y promociones.