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La evacuación de civiles ha comenzado en Jersón, la región limítrofe con la península de Crimea que controla parcialmente Moscú, según han confirmado las autoridades prorrusas. El general ruso Serguéi Surovikin, comandante de la "operación militar especial" -tal como se refiere Rusia a la invasión de su país vecino- en Ucrania, ha admitido que la situación es "tensa" debido a la contraofensiva ucraniana en el sur del país y ha asegurado que el Ejército se encargará de garantizar la evacuación segura de la población.

Entre 50.000 y 60.000 personas van a ser evacuadas de Jersón, a la margen izquierda del río Dniéper y se espera que la evacuación dure unos seis días, según ha asegurado el gobernador prorruso de la región, Vladimir Saldo, en la televisión pública rusa, según recoge la agencia estatal TASS.

La segunda edición del Telediario se ha trasladado este lunes a Kiev para narrar los acontecimientos casi ocho meses después de la guerra en Ucrania. TVE ha visitado la capital, que ha vuelto a ser atacada por drones, pero también otras zonas cercanas al frente de la guerra, como Kupiansk. También ha contado con los testimonios de dos refugiadas ucranianas y una rusa. Además, el programa analiza la crisis energética provocada por la guerra en Ucrania y las consecuencias a nivel geopolítico. [Sigue la última hora de la guerra en directo]

FOTO: RTVE

Rusia ha bombardeado este lunes de nuevo Kiev, en un nuevo ataque con drones suicidas que confirma la escalada rusa en la guerra de Ucrania. De momento no se ha informado de víctimas.

Las autoridades locales han asegurado que se han visto afectadas infraestructuras esenciales. "Explosiones en Kiev. La capital fue atacada con drones kamikaze", ha señalado en su cuenta de Telegram Andriy Yermak, jefe de la Oficina del Presidente de Ucrania.

El alcalde de Kiev, Vitaliy Klitschkó, ha dado cuenta en el mismo canal de al menos dos explosiones en el barrio de Shevchenkivskyi, en el centro de la capital. Se ha producido un incendio en un edificio no residencial y han resultado dañados varios edificios de apartamentos, según Klitschkó. El alcalde ha informado de que 18 personas han sido rescatadas, mientras que dos vecinos permanecen bajo los escombros, de acuerdo con información preliminar.

La capital de Ucrania, Kiev, ha registrado este lunes varias explosiones en lo que han sido ataques con drones kamikaze por parte de Rusia, según la Oficina del Presidente de Ucrania. Unos ataques que, según las autoridades ucranianas, no han causado víctimas. En Dnipro, también ha sido atacada esta madrugada una central que suministra energía a la zona. La semana pasada, especialmente el 10 y 11 de octubre, las tropas rusas atacaron masivamente varias regiones ucranianas. En esos bombardeos, Rusia empleó varios tipos de misiles y drones kamikaze. Kiev también fue atacada, ya que hubo dos impactos en el distrito de Shevchenkivskyi. Seis personas murieron como resultado del bombardeo. 

Foto: EFE/EPA/VADYM SARAKHAN

Ya ha comenzado el Congreso del Partido Comunista chino con el mandato de Xi Jinping. En Las Mañanas de RNE analizamos esta realidad en el país asiático con Marcelo Muñoz, presidente emérito y fundador de Cátedra China y decano de los empresarios españoles en China. Además, presenta su libro su libro ‘China ha vuelto para quedarse’. Y Muñoz explica que “China es otro mundo completamente distinto” y cree que el mundo que quiere construir China se expresa en su macro proyecto de la nueva Ruta de la Seda. En relación con la guerra en Ucrania, “China no ha estado de acuerdo con Putin y no apoya la guerra porque la política de Putin es contraria a la estrategia política de China.” Y recalca que Occidente no cuenta con China para paliar la solución que es “partidaria de negociaciones en lugar de sanciones.” Y recuerda que no se puede prescindir de China en lo relacionado con la comunidad internacional. Sobre Taiwán, explica que este país es “según la ONU, es parte de la soberanía China y por tanto no recuperan nada.”

Kiev ha vivido otra noche iluminada por los bombardeos y en Las Mañanas de RNE hemos contactado con la profesora y residente, Yulia Pidipryhora. Nos cuenta que en las últimas horas han podido escuchar cinco o seis explosiones en la zona centro, en la que reside, y que tienen prohibido salir al exterior. "Estamos acostumbrados a vivir en esta situación de constante amenaza", señala la profesora, que explica que tienen pautas ya marcadas para saber cómo reaccionar en estos casos: "No tenemos otro remedio que protegernos y seguir luchando contra esta agresión", añade. Indica que, por lo general, la sensación es de "tranquilidad" y subraya que tienen que resistir y "luchar hasta la victoria", porque de lo contrario les aniquilarán a todos. 

Al menos una persona ha muerto tras un ataque al Ayuntamiento de Donetsk, en el Donbás, una ciudad controlada por los rebeldes prorrusos, que acusan del bombardeo al ejército ucraniano. En esa región, Kiev sigue defendiendo territorios con duros combates, especialmente en los alrededores de Bajmut. Mientras, en la anexionada Jersón, las autoridades impuestas por Moscú han organizado la evacuación de civiles hacia Rusia ante los continuos ataques ucranianos.

Foto: Ayuntamiento de Donetsk, bombardeado por el ejército ucraniano (REUTERS/Alexander Ermochenko)

Ya está operativa la fuerza militar conjunta que Rusia y Bielorrusia acordaron crear hace unos días. Este sábado han llegado los primeros soldados rusos que se desplegarán a lo largo de la frontera con Ucrania. Kiev sufre las consecuencias de los últimos bombardeos. En la capital ucraniana hay cortes de electricidad. La empresa suministradora ha pedido a los habitantes que ahorren todo lo que puedan. Los ataques rusos han destruido un tercio de la red eléctrica del país. Las tropas ucranianas mantienen su ofensiva en Jersón. Kiev ha logrado recuperar ya unos mil kilómetros cuadrados a los rusos. Moscú dice que están ofreciendo vivienda gratuita a los refugiados que huyen.

Foto: Una calle en el centro de Kiev (EFE/EPA/ROMAN PILIPEY)

Rusia ha vuelto a atacar a la población civil y a la infrastructura energética de Ucrania, a pesar de que Putin dijera ayer que no veía necesarios más ataques masivos. "Yo creo que son signos de desesperación. No es una respuesta al ataque al puente de Crimea, sino que es una operación que se había planificado desde hace tiempo", expresa Borja Lasheras, investigador de CEPA. Sin embargo, está consiguiendo todo lo contrario: "Rusia no tiene un número ilimitado de misiles y la industria militar rusa ha sido muy dependiente del suministro occidental. Por eso estamos viendo que están comprando drones a Irán y que buscan artillería de Corea Norte".

Rusia está perdiendo la guerra y, por lo tanto, su respuesta inmediata es escalar, expresa Lasheras, que está ahora en Járkov. El investigador asegura que, a diferencia de febrero, lo que se encuentra en las calles es "cierta normalidad tensa": "Lo primero que te dicen es que no tienen miedo, lo que tienen es mucha rabia". Asegura que, aunque Rusia busca castigar a la población civil, lo que está logrando es más resistencia y más sentimiento de victoria.