El exministro de Asuntos Exteriores, ex alto representante de la UE para asuntos exteriores y ex secretario general de la OTAN Javier Solana ha vaticinado que el presidente ruso, VladímirPutin, no va a parar la guerra en Ucrania. En este sentido, ha advertido de que es importante "conseguir que no lo sea".
En una entrevista en TVE, Solana ha subrayado que la mejor manera para parar a Putin es que "sienta que la comunidad internacional responde" y lo hace con fuertes sanciones, que podrían tomarse "todas de golpe o de forma pausada". Solana ha calificado de "obsesión" y "locura" que Putin quiera que Ucrania vuelva a ser parte de Rusia.
FOTO: Javier Solana, en una imagen de archivo en Alcalá de Henares. EFE/Juanjo Martín
Las tropas rusas han entrado a Kiev por el distrito de Obolón, un barrio residencial, donde durante la mañana se han producido "combates entre las fuerzas rusas y ucranianas", según informa el enviado especial de RTVE en la capital ucraniana, Víctor García Guerrero. Mientras tanto, los ciudadanos están adaptándose "a una situación inusual con soldados de otro país que han llegado hasta su casa", señala García Guerrero.
En este distrito, los ucranianos tratan de seguir con su vida, aunque muchos ya han pasado la noche fuera de su casa, en las estaciones de metro reconvertidas en búnkeres.
FOTO: Un hombre mira los restos de un avión militar que fue derribado durante la noche en Kiev. EFE/EPA/SERGEY DOLZHENKO
Víctor Paredes,enviado especial de RNE a Moscú. Boris Johnson hablaba esta mañana con el presidente ucraniano Zelensky; se comprometía a multiplicar su apoyo a Ucrania y Moscú acaba de anunciar que cierra su espacio aéreo a los aviones británicos y les prohíbe aterrizar en sus aeropuertos o atravesar el espacio aéreo. El Ministerio de Defensa dice haber conquistado una pequeña isla en el Mar Negro.
Además,mantienen que sus tropas no están atacando a los civiles sino tan solo infraestructuras militares. Las autoridades anuncian una respuesta pronto a la decisión británica de restringir las operaciones de las compañías rusas. También se están estudiando las consecuencias que puede tener la iniciativa de Ucrania de prohibir a sus bancos operar con rublos y todas las transacciones con Rusia y Bielorrusia.En las manifestaciones contra la guerra hubo casi 1.700 detenidos.
Le preguntamos a Josep Piqué, exministro de Exteriores, sobre las sanciones históricas de la Unión Europea, Estados Unidos y Reino Unido ante la ofensiva rusa. Piqué sostiene que las sanciones son "claramente insuficientes", a pesar de su dureza y del dolor que pueden suponer para los sancionadores y el sancionado. "El designio de Putin está por encima del coste. Su destino restaurar la influencia histórica de Rusia desde la época de los zares y que se plasmó con la Unión Soviética", explica. El exministro de Exteriores explica que lo que Vladimir Putin está llevando a cabo "lo está haciendo desde hace tiempo": "Tampoco es estrictamente una novedad. Lo hizo en Moldavia, lo hizo en Georgia o en la propia Ucrania, en 2014 con la anexión de una parte del Donbás y de Crimea. Ahora está completando este trabajo", insiste.
¿Querrá Rusia ir más allá? Piqué cree que "es razonable pensarlo. Sobre todo en el caso de las Repúblicas Bálticas, que pertenecieron a la propia Unión Soviética, y podrían ser el paso siguiente. A diferencia de Ucrania, los países bálticos están en la OTAN y cualquier agresión militar sería respondida también militarmente", dice en los micrófonos de RNE.
¿Cómo transforma el mundo esta invasión? El exministro de Exteriores, Josep Piqué, destaca que Rusia acaba de transgredir normas elementales del derecho internacional. "Detrás hay un propósito, compartido con China, de acabar con el orden mundial que se estableció tras la Segunda Guerra Mundial y, sobre todo, tras la caía del muro de Berlín. Son potencias que no asumen ese orden, que quieren imponer sus normas del juego entre las que están el uso de la fuerza militar para cumplir sus intereses. Podemos estar en la antesala de un mundo mucho más peligroso, mucho más difícil, complejo e inquietante que el que hemos vivido con anterioridad", afirma. "Ha habido muchos conflictos geográficmente localizados. Pero llevamos décadas de paz y de intentos de construir una convivencia a nivel global. Ahora todo eso está en grave peligro".
Por último, Piqué advierte que China está ayudando a Rusa "a paliar el impacto de las sanciones", ya que comparten un objetivo común pero no hay una alianza en toda regla.
Valentina Kotenko , ciudadana ucraniana, vive a 130km al oeste de Kiev. Trabaja en la capital, por lo que ayer fue a recoger documentos importantes, como diplomas. Nos cuenta en Las Mañanas de RNE que, desde su casa, se oyen los aviones pero no se ven: "Decir que estamos bien es solo una expresión, estamos llorando, muy preocupados, sin saber lo que pasa", expresa. Valentina habla con sus amigos en Kiev, escondidos la mayoría en refugios antiaéreos, en sótanos y en estaciones de metro. "Nosotros intentamos mantener la mente fría, aunque no siempre es posible. Tenemos las maletas preparadas por si tenemos que salir al sonar la alarma", explica. Los supermercados en su barrio están abiertos, hay colas para las farmacias y han comprado comida y lo más importante. "No quiero usar esa palabra, la de 'huir'. Nunca lo podríamos haber imaginado. No es una operación militar. Es una guerra, en el año 2022, en Europa", asegura,
En Las Mañanas de RNE, hablamos con Javier Solana, exsecretario general de la OTAN, para analizar la invasión de Rusia en Ucrania. Solana asegura que todavía no se sabe qué consecuencias va a traer este conflicto, pero que Putin ha demostrado que “es capaz de hacer las cosas más aparentemente insensatas.”
En relación con las sanciones que Occidente va a poner a Rusia, Solana asegura que estas van a afectar tanto Putin como a los demás porque “cuando hay interconexiones económicas, toda sanción ataca también a quien la pone.” Y sobre China, Solana afirma que “tampoco debe de estar excesivamente contenta de que Rusia haya dado este paso."
Javier solana explica que no cree que Putin vaya más allá de Ucrania, porque “este país supone la recuperación de lo que él llama ‘el gran fracaso del siglo XX’: la ruptura de la Unión Soviética.” Y, añade, que Putin ya controla las repúblicas que se han separado, “pero se le escapó Ucrania y simbólicamente para él es mucho.” Además, considera que "Rusia es un país atascado, que no tiene grandes cosas que ofrecer excepto el gas” y que no ha sido capaz de moverse en el mundo tecnológicamente.
Tras reunirse con miembros de su consejo de seguridad nacional y con el resto de líderes del G-7, el presidente estadounidense Joe Biden ha comparecido para anunciar las nuevas sanciones contra Rusia y los próximos movimientos que va a tomar. En su discurso, Biden ha sido muy duro con Putin: "Es el agresor, el que ha elegido la guerra y su país pagará las consecuencias". Las nuevas medidas de la Casa Blanca se dirigen especialmente a los principales bancos rusos y también a las élites del país. Biden trata de dificultar la financiación de Rusia, de impedirle el acceso a dólares y a nueva tecnología. También impondrá restricciones a la importación de tecnología rusa. Dice el presidente estadounidense que enviará nuevas tropas a países de la OTAN, especialmente a Polonia o Rumanía, aunque también a Alemania. Ha negado, si embargo, que sus tropas vayan a dirigirse a Ucrania para combatir.
Las reaccines a la invasión rusa de Ucrania se suceden, pero no todas van en la misma línea. China, la otra gran potencia mundial, tiene relación con ambos países,con Rusia y con Ucrania, por eso evita condenar el ataque y se mantiene a la expectativa.
Uno de los lugares más castigados por el ataque ruso es Jarkov, al norte de la región del Donbás. Es la segunda ciudad más grande de Ucrania, con casi millón y medio de habitantes en su zona metropolitana. Los bombardeos comenzaron allí hace ya más de 24 horas. Miles de personas se han refugiado en el interior de las estaciones del metro.
Kiev amanece, por segundo día, bajo los bombardeos rusos. El metro ha estado abierto toda la noche para los ciudadanos puedan refugiarse allí. Una noche que han pasado bajo el toque de queda y con la advertencia del gobierno de que ya hay saboteadores rusos en la ciudad.
José Manuel Albares, ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación del Gobierno de España, explica en una entrevista en el informativo 24 horas el dispositivo de la embajada en Ucrania para facilitar la salida de los españoles del país. En estos momentos, quedan unos 200 españoles en Ucraniay el Gobierno está poniendo convoyes a su disposición, a través de furgonetas y con vuelos desde Polonia. Albares matiza, sin embargo, que la mayoría de estas 200 personas "han mostrado una voluntad de no abandonar Ucrania en cualquier circunstancia". Con todo, explica que por la mañana ha salido un primer convoy con 52 personas y que está previsto que mañana parta otro que podría transportar hasta 130 más.