El programa electoral de CC-PNC-PIL se propone una segunda modernización del archipiélago, para lo que propugna una profundización del autogobierno y una relación bilateral entre la comunidad autónoma y el Estado. Los nacionalistas canarios demandan la transferencia o delegación de competencias en materias como inmigración, comercio exterior, transporte aéreo, y gestión de puertos y aeropuertos. También defienden una participación directa de las islas en las negociaciones ante la Unión Europea cuando se traten materias que afecten a los canarios. Estas reclamaciones forman parte del proyecto de nuevo estatuto, pendiente aún de aprobación en Madrid.