Ahmadineyad cierra su campaña enfrentado a sus rivales y al ex presidente Rafsanyani
- El presidente iraní cree que sus rivales han utilizado "tácticas propias de Hitler"
- Ha asegurado que "deberían ser castigados con prisión" por insultarle
- Ha tenido un enfrentamiento con el ex presidente Rafsanyani, al que acusó de corrupción
- Rafsanyani exige a Jameini que obligue a Ahmadineyad a "retirar sus acusaciones"
El presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, ha cerrado la campaña electoral con nuevas críticas contra sus predecesores, a los que ha acusado una vez más de corrupción y complot para derrocar su gobierno.
"El gobierno de las reformas (de Mohamed Jatamí) no fue más que la continuidad del gobierno de (Ali Akbar Rafsanyani) quien ahora trabaja para lograr sus propósitos", ha dicho el mandatario ante decenas de miles de personas concentradas en la Universidad de Sharif, en el sur de Teherán.
Ahmadineyad ha mantenido la estrategia de acoso al ex presidente, a cuya familia acusan de ser la mafia que controla las fuentes de riqueza en Irán, y ha advertido a sus partidarios de tener cuidado con las conspiraciones.
"Intentan provocar enfrentamientos callejeros", recalcó Ahmadineyad aludiendo a Rafsanyani quien en una carta emitida al líder supremo iraní ha advertido de que la continuación de las acusaciones del presidente del gobierno puede provocar tensiones en la calle ya que "el pueblo no podrá aguantar más que los grandes personajes de la revolución sean atacadas de esta forma".
Rafsajani ha enviado una carta al ayatolá Jameini en el que exige que "se retiren todas las acusaciones contra él y su hijo para evitar las acciones judiciales". Además, el ex presidente también ha pedido a la radio y a la televisión un derecho a réplica "para quienes han sido acusados". Sin embargo, la televisión iraní ha obviado esta propuesta al no estar Rafsanjani entre los candidatos a la presidencia y Jameini, de momento, ha preferido guardar silencio.
Rafsanjani, presidente entre 1989 y 1997 y actualmente el jefe de discernimiento (equivalente a un Consejo Constitucional), ha indicado que Jameini debería tomar medidas para poner fin a la rebelión, apagar el fuego y el humo que ha encendido Ahmadineyad".
"Tácticas propias de Hitler"
Asimismo, Ahmadineyad ha acusado a sus rivales de utilizar tácticas similares a las del dictador Adolf Hitler y ha asegurado que podrían enfrentarse a prisión por sus insultos.
Según el presidente, los tres candidatos opositores, Mousaví, Karroubí y Rezaeí, "han mentido" sobre el estado de la economía iraní, que sufre la mayor inflación de su historia y la caída de los precios del petroleo.
El presidente iraní ha dicho que sus rivales han roto las reglas al insultarle. "Las personas que insultan al presidente deberían ser castigadas con prisión", ha dicho ante sus seguidores, en la Universidad Sharif de Teherán.
"Estos insultos y acusaciones contra el gobierno son propios de los métodos de Hitler, repetir mentiras y acusaciones hasta que todo el mundo se las acaba creyendo", asegura Ahmadineyad. Insultar a cargos oficiales, incluido el presidente, es un crimen castigado en Irán con dos años de cárcel.
Mousaví: "Ahmadineyad ha aislado a Irán"
Por su parte, Mousaví ha asegurado que el presidente ha aislado a Irán con sus ataques a Estados Unidos, su combativa línea sobre política nuclear y su posición sobre el Holocausto.
Le ha culpado de crear tensiones nucleares y ha pedido que Teherán detenga su programa nuclear mientras Occidente crea que puede que será utilizado para fabricar bombas atómicas.
Las elecciones del viernes no cambiarán la política nuclear de Teherán, que está dirigida por el líder supremo, el ayatolá Jameini, pero una victoria de Mousaví podría rebajar las confrontaciones con Occidente.