Investigado por delitos de agresión sexual y lesiones el secretario general del PP catalán, Daniel Serrano. Una compañera de partido le denunció por presuntas relaciones sexuales no consentidas y maltrato y el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña lo está investigando. Serrano, número 4 en las listas del PPC por Barcelona, ha respondido en un comunicado que los hechos son falsos y que responden a un chantaje que se hace público en precampaña electoral para dañar su imagen.
FOTO: Daniel Serrano, durante una intervención en el Parlament catalán. David Zorrakino / Europa Press
Francia da el primer paso para la tipificación de un nuevo delito que castigue los abusos sexuales a menores. El Senado francés ha aprobado esta tarde por unanimidad -en primera lectura- el proyecto de ley que crea un nuevo delito sexual para proteger a los menores de 13 años. La finalidad del proyecto de ley, que todavía debe volver a la Asamblea Nacional, es crear en la ley una nueva prohibición: la de cualquier relación sexual con un menor de 13 años, sin cuestionar el asunto del consentimiento. El texto establece el plazo de prescripción del delito al menor con el de la violación, 30 años desde la fecha de la mayoría de edad de la víctima. El proyecto también prevé el fortalecimiento de la protección a los jóvenes de entre 13 a 15 años, aunque las asociaciones ciudadanas piden que la cuestión del consentimiento sexual quede establecida definitivamente en los 15 años. Informa Paco Forjas, corresponsal en París.
Los jesuitas han reconocido que ha habido más de cien menores víctimas de abusos sexuales dentro de la orden en los últimos cien años. Este jueves han presentado las conclusiones de una investigación que identifica a 65 agresores y han pedido perdón. Las asociaciones de víctimas creen que las cifras son ridículas y denuncian que no han contado con ellos.
Los Jesuitas identifican 16 casos de abusos por parte de religiosos desde el año 2000. Según un informe de la Compañía de Jesús, que recoge un rango amplio de conductas desde 1927, 65 jesuitas han sido acusados de abusos. En Radio5 analizamos con Susana Pradera, responsable del estudio, la dificultad del trabajo.
Francia lleva varios días bajo la conmoción que ha supuesto levantar las alfombras y ver que el incesto está más presente de lo que se pensaba. Siguiendo el modelo "Me Too" ha surgido el #MeTooIncesto, y en las redes las víctimas han contado sus casos y han sido decenas de miles. Todo esto ha provocado un enorme revuelo en Francia, donde el incesto sigue siendo un tema tabú y donde, según las encuestas, uno de cada diez franceses dice haber sido víctima de abusos sexuales durante la infancia, abusos cometidos en el 80% de los casos en el ámbito familiar.
La Guardia Civil ha detenido a un frutero de 47 años en la localidad madrileña de Valdeavero, de 1.500 habitantes, por supuestos abusos sexuales a más de una decena de niños. La investigación comenzó a finales del mes de agosto a raíz de la denuncia de la madre de una víctima de 13 años, que confesó los abusos pese a que el hombre amenazaba a los menores.
La congregación religiosa de los Maristas ha reconocido que 25 de sus exalumnos fueron víctimas de abusos sexuales durante sus escolarización en colegios catalanes de la Hermandad y les indemnizará con 400.000 euros. La decisión llega, en muchos casos, 30 ó 40 años después de que se produjeran los hechos. En una carta remitida a las víctimas, la institución se muestra profundamente avergonzada por los sucedido y les pide perdón.
Un tribunal de Castellón ha condenado a 15 años de prisión a Carlos Franch, un entrenador de gimnasia, por un delito de abusos sexuales a menores. Fueron 12 las denuncias, pero solo ha sido condenado por tres casos, los que no habían prescrito. Además de la pena de prisión, Franch queda inhabilitado 10 años para ejercer cualquier profesión deportiva con menores.
Entre las inciativas para luchar contra las violencias machistas, el Gobierno prepara la ley de libertad sexual en la que se preve la modificación del códido penal para exigir el consetimiento expreso en las relaciones sexuales. En la nueva redacción, definen consentimiento como actos exteriores, concluyentes e inequívocos y cualquier otra cosa es violación. Ya no hace falta que haya violencia o intimidación y aunque todo seguirá dependiendo de la interpretación de un juez, los juristas sí creen que es un avance y que ayuda en los casos en los que la víctima está bloqueda o drogada, por ejemplo. Aseguran que el camino del cambio es largo y que las sentencias serán distintas cuando los jueces tengan una formación en perspectiva de género y cuando cambie también la mentalidad de todos.
El propio Francisco encargó este informe, un documento exhaustivo, con testimonios a veces demasiado explícitos. Casi un centenar de entrevistados, como el de una madre que cultivó la amistad con el padre de Mc Carrick, el tío Ted, hasta que un día lo vio sentado en el sofá de su casa manoseando a sus dos hijos. De eso hace ya 30 años. Hoy McCarrick aún no ha pedido perdón, a sus 90 años vive retirado en Estados Unidos en una residencia para exsacerdotes.
El papa se ha referido a él, como un informe doloroso. En la audiencia de este miércoles ha mostrado su cercanía con las víctimas de abusos y ha renovado el empeño de la iglesia por acabar con este mal. El informe reconoce errores que empiezan con Juan Pablo II. Wojtyla fue quien promocionó a Mc Carrick nombrándole arzobispo de Washington y cardenal cuando ya existían indicios de su comportamiento sexual. Benedicto XVI lo mantuvo como cardenal un año más, pero como seguían las sospechas de abusos se le aconsejó que lo apartara de la vida pública. Y Francisco heredó el problema. Todo cambió cuando se presentó la primera denuncia oficial en 2017, el abuso de Mc Carrick a un menor: entonces se le juzgó, se le condenó, se le retiró el cargo de cardenal y se le expulsó del sacerdocio.
El Vaticano ha publicado el informe final sobre el caso del exarzobispo de Washington, Theodore McCarrick, expulsado del sacerdocio en 2019 tras haber sido condenado por abusar sexualmente de seminaristas menores de edad en el que reconoce "errores" e "informaciones inexactas", que impulsaron su ascenso eclesial hasta convertirse en arzobispo de Washington y cardenal de la máxima confianza de la Santa Sede en Estados Unidos.
Una investigación interna del Vaticano sobre los abusos sexuales a menores del ex arzobispo de Washington, Theodor Edgar McCarrick, reconoce que Benedicto XVI evitó someterle a un juicio canónico y que solamente le pidió que mantuviera un perfil bajo. Además, el informe también incluye reproches a Juan Pablo II, que nombró arzobispo a McCarrick y que, según la investigación, no creyó las acusaciones de abusos y se dejó llevar por su relación personal con McCarrick.