Al menos 66 civiles han muerto este martes en Siria por ataques aéreos y de artillería contra distintas partes de Guta Oriental, el principal bastión opositor de las afueras de Damasco, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
La ofensiva prolonga la oleada de bombardeos lanzada el lunes en este sector por las fuerzas gubernamentales que ha dejado más de un centenar de muertos, la mayor masacre en un solo día registrada por esta ONG en los últimos tres años, según Reuters.
Las zonas de Guta Oriental que han sido blanco de los ataques son Al Nashabie, Otaya, Arbín, Zamalka y Mesraba. La Defensa Civil Siria, que presta labores de rescate en áreas fuera del control del Gobierno, ha informado en Twitter de la muerte de 24 civiles por quince bombardeos y decenas de disparos de artillería contra Al March, donde se localiza Otaya.
Los también llamados cascos blancos confirmaron el fallecimiento de otras siete personas por ataques aéreos en Arbín y de otras cuatro, en Al Nashabia. Además, denunciaron que sus equipos fueron blanco de ataques cuando trabajaban para evacuar a las víctimas de los bombardeos en Mesraba.
Al menos 50 civiles han muerto este martes en Siria por ataques aéreos y de artillería contra distintas partes de Guta Oriental, el principal bastión opositor de las afueras de Damasco, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
La ofensiva prolonga la oleada de bombardeos lanzada el lunes en este sector por las fuerzas gubernamentales que ha dejado más de un centenar de muertos, la mayor masacre en un solo día registrada por esta ONG en los últimos tres años, según Reuters.
Las zonas de Guta Oriental que han sido blanco de los ataques son Al Nashabie, Otaya, Arbín, Zamalka y Mesraba. La Defensa Civil Siria, que presta labores de rescate en áreas fuera del control del Gobierno, ha informado en Twitter de la muerte de 24 civiles por quince bombardeos y decenas de disparos de artillería contra Al March, donde se localiza Otaya.
Los también llamados cascos blancos confirmaron el fallecimiento de otras siete personas por ataques aéreos en Arbín y de otras cuatro, en Al Nashabia. Además, denunciaron que sus equipos fueron blanco de ataques cuando trabajaban para evacuar a las víctimas de los bombardeos en Mesraba.
La ONG en España ha confirmado este jueves cuatro casos de mala conducta sexual de sus trabajadores en África y América Latina. Tres de ellos fueron hacia compañeras de trabajo y el otro implicó el pago por servicios sexuales. La filial española de la ONG ha asegurado que pudieron detectar y sancionar esos casos porque el protocolo interno que tienen desde 2012 funciona. Dos de las conductas inadecuadas fueron comentarios sexuales de trabajadores a sus compañeras, a los que se amonestó y la infracción quedó registrada en su expediente laboral. Oxam Intermon insiste en que han detectado cuatro casos desde 2012 en una organización que tiene 1.400 trabajadores y 1.700 voluntarios.
España tendrá que indemnizar a los dos etarras que atentaron contra la T4 del aeropuerto de Madrid con 30.000 y 20.000 euros.
Igor Portu y Martín Sarasola, que cumplen condena, denunciaron haber sido objeto de malos tratos durante su detención y traslado. El atentado, cometido el 30 de diciembre de 2006, causó dos muertos, una veintena de heridos e importantes destrozos en el edificio de la terminal.
La ONG Wanawake Mujer trabaja en Kenia para proteger a las mujeres en riesgo de ser mutiladas. Aunque la práctica sigue realizándose en el país, muchas niñas, como X e Y han conseguido escapar y acuden a un centro de rescate en Kenia en busca de ayuda. "Cada vez más las niñas no quieren ser cortadas, dicen no a la mutilación genital femenina porque son conscientes de lo que van a sufrir el resto de su vida", explica Mónica Batán, de la ONG.
La mutilación genital femenina, es una práctica que todavía se practica en 29 países de África, Asia y Oriente Medio, con secuelas físicas y psicológicas horribles para las casi tres millones de niñas afectadas cada año. La ONG Plan International, que ha creado una campaña de recogida de firmas para pedir la creación de una ley que prohíba esta práctica en el parlamento de Mali, ha recopilado los testimonios de víctimas en Mali y Sierra Leona. Selina, una joven de Sierra Leona, todavía se emociona cuando se acuerda del "dolor y las chicas que estaban conmigo" en el momento en que le practicaron la ablación, cuando se sintió muy mal y lloró mucho. Un dolor que describe una de las cooperantes del Plan Mali de Plan International, Madina Bocoum, que explica que "las chicas se desmayan del dolor, que puede durar mucho tiempo". Pero ¿por qué se hace? Según relata Ramatou, otra joven de Sierra Leona, "la tradición es muy importante". Otra víctima asegura que "si no pasas este proceso como las demás, no se te considera mujer".
Sudán del Sur se desangra. Repartidos en cinco países, más de tres millones de refugiados sudaneses aguardan tiempos mejores. País de ricos recursos naturales, Sudán posee las terceras reservas de petróleo de África, pero no deja de ser noticia por la guerra que lo ha dividido y por los desplazados que este conflicto y las hambrunas provocan. Más de un millón de niños sursudaneses padecen desnutrición aguda. La ONU cifra en unos 183 millones de dólares la ayuda necesaria. Y mientras los machaca el conflicto entre el norte musulmán y el sur cristiano, se mantiene activo el interés de las potencias por la gestión de sus recursos patrolíferos, ahora en manos de China y pretendidos por Estados Unidos, Israel e Irán.