El presidente de EEUU, Barack Obama, ha dicho este miércoles, tras la victoria electoral del candidato republicano, Donald Trump, como nuevo presidente del país, que todo el mundo se entristece cuando su candidato pierde las elecciones, como ha ocurrido con la derrota de Hillary Clinton, pero a continuación enfatizó: "Somos estadounidenses primero y queremos lo mejor para nuestro país".
Cuando se cumplen dos años del anuncio de normalización en las relaciones entre Cuba y Estados Unidos, en La Habana temen que el triunfo de Donald Trump ponga en peligro el deshielo. Cuba sigue apostando por la profundización en las relaciones bilaterales.
El PSOE considera que la victoria de Donald Trump es una mala noticia. En un comunicado los socialistas aseguran que se abre una etapa de enorme incertidumbre y muestran su preocupación por la victoria del populismo en Estados Unidos. Pablo Iglesias ha recordado a Bernie Sanders, que dice habría sido mejor candidato que Clinton y ha criticado la reacción de Rajoy: "Es un ejemplo de servilismo que me avergüenza como español". Ciudadanos cree que la victoria de Trump demuestra que gana el populismo cuando no hay soluciones para la clase media.
Mariano Rajoy ha enviado al presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, un telegrama de felicitación por su victoria en las elecciones. El presidente del Gobierno de España le traslada su deseo de reforzar las relaciones entre los dos países.
México ha recibido con inquietud la victoria de Donald Trump. Muchos mexicanos han mostrado su preocupación por los emigrantes que se encuentran ahora en Estados Unidos. El país contiene la respiración después de la campaña del republicano, basada en el descrédito hacia los migrantes, las promesas de construcción de un muro y en la eliminación del tratado de libre comercio que tienen Canadá, México y Estados Unidos.
China se ha limitado a decir que una buena relación favorece a las dos partes. Por otro lado se aguarda a ver cómo se articula el apoyo militar en una zona con desencuentros con el gigante asiático por los islotes del Mar Meridional.
Vladimir Putin ha felicitado a Donald Trump por telegrama y le ha pedido un diálogo directo para solucionar la crisis entre ambos países, sobre todo en lo relacionado con la guerra en Siria.
Los presidentes del Consejo Europeo y de la Comisión Europea, Donald Tusk y Jean-Claude Juncker, respectivamente, han felicitado a Donald Trump por su victoria y le han invitado a visitar "lo antes que pueda" la UE en el ámbito de una cumbre transatlántica. "Esa conversación nos permitirá trazar el curso de nuestras relaciones para los próximos cuatro años", ha señalado en una misiva. Por su parte, el presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz, ha dicho que no será sencillo trabajar con él. "No será fácil porque durante la campaña electoral oímos algunas cosas sobre proteccionismo, palabras preocupantes sobre las mujeres, las minorías. Pero mi experiencia es que las campañas electorales son distintas de la política real durante el mandato presidencial. Espero que volvamos a una cooperación racional", ha aseverado.
Líderes populistas europeos, como el primer ministro húngaro, Víctor Orban, ya han felicitado a Donald Trump. Su victoria ha sido acogida con satisfacción en distintos puntos de Europa. En Francia la líder del Frente Nacional, Marine Le Pen ha felicitado al nuevo presidente de los Estados Unidos y "a la América libre". Comparte opinión el eurófobo partido de la Independencia del Reino Unido, el UKIP cuyo líder, Nigel Farage, ha bromeado con la posibilidad de ser el representante de Trump en Bruselas.
Cuando Donald Trump se dirigía esta mañana a sus seguidores, reunidos en el Hotel Hilton de Nueva York, lo hacía con la satisfacción de haber vencido a todos. A Hillary Clinton, su rival en la que ha sido una encarnizada y larga carrera por la Casa Blanca. Pero también al aparato de su propio partido. Los Republicanos vieron en un primer momento al magnate neoyorkino como una anécdota, que no pasaría las primarias, pero fue un error. Los pesos pesados del partido fueron cayendo uno detrás de otro a la misma velocidad que Trump, impulsado por el apoyo de las bases, se distanciaba del aparato republicano.
Con el objetivo conseguido, Donald Trump tendrá que empezar a cumplir sus promesas a partir de enero, cuando tome posesión como presidente. Entre sus propuestas, un mayor proteccionismo en lo económico y cambios profundos en sus relaciones internacionales, algo que ha levantado polémica e incertidumbres.
Donald Trump ha vencido en los tradicionales feudos republicanos, que ha sabido mantener, y también en varios de los llamados estados oscilantes que, como se esperaba, han sido decisivos. Ha vencido con autoridad en Ohio, el estado que desde 1964 siempre elige al presidente estadounidense; en Florida, otro estado cambiante (swing state) que concede el tercer mayor contingente de delegados en el Colegio Electoral; y varios estados industriales que en las últimas décadas solían votar demócrata, como son Pensilvania, Michigan y Wisconsin.