El embajador ruso ante la ONU ha advertido este jueves del peligro de que estalle una guerra con Estados Unidos si Trump decide cumplir con sus amenazas y atacar Siria en respuesta al supuesto ataque químico que mató a 43 personas e hirió a más de 500 en Duma. El mandatario estadounidense ha rebajado el tono y ha asegurado que tomará una decisión “bastante pronto”, aunque su ministro de Defensa ha indicado que, por el momento, no tienen pruebas para determinar la autoría del régimen de Bachar al Asad. Todo ello mientras sus aliados analizan su apoyo al ataque, con Francia asegurando que sí tiene pruebas, la negativa de Alemania y la aparente inclinación de Reino Unido por atacar Siria. Mientras, la ciudad de Duma, el blanco de la diplomacia mundial en estos momentos, está ya bajo control de las tropas progubernamentales sirias y bajo la protección de la Policía rusa.
La evacuación de civiles y rebeldes prosigue en Duma mientras las tropas rusas se desplegan en la zona, ante la amenaza de un ataque de Estados Unidos y sus aliados. Bachar Al Assad insiste en que quieren desestabilizar la zona tras los avances del régimen y niega estar detrás del ataque químico en el que murieron 43 personas el sábado. El presidente francés, Emmanuel Macron, ha asegurado este jueves tener pruebas de que "el régimen sirio utilizó esas armas". Mientras, los buques de guerra estadounidenses se aproximan por el Mediterráneo, aunque en las últimas horas la Casa Blanca ha rebajado el tono. Según ha tuiteado Trump, el ataque podrá "ser pronto, o no"; y para ello el apoyo de los aliados será vital (May ha convocado un gabinete de urgencia y Merkel descarta participar en la acción militar).
El país galo vive una segunda jornada de huelga general en los trenes franceses. Este miércoles, están cancelados los trenes que conectan Francia con España, Suiza e Italia, mientras que el resto funciona con relativa normalidad. Ante la falta de tren, los ciudadanos han cogido los coches, lo que ha provocado masivos atascos. Sin embargo, el Gobierno de Macron mantiene sus planes para reformar el ferrocarril francés para adaptar la red estatal a la competencia dictada por la Unión Europea y reducir la deuda de la compañía.
"El empleo de un agente neurotóxico de calidad militar, de un tipo desarrollado por Rusia, es el primer empleo ofensivo" de un agente de esa modalidad" en Europa después de la Segunda Guerra Mundial", reza la nota de condena firmada por los cuatro líderes.
En la ciudad de Bastia, en Córcega, el presidente francés Enmanuel Macron ha calificado como "traición" ir contra la unidad de la república. Ha ofrecido a los nacionalistas que el nombre de la isla sea recogida en el texto de reforma de la constitución: "Estoy a favor de que todos en la Republica puedan reivindicar su propia identidad, su especifidad, sus propias señas distintivas. Esto vale para Córcega también. Pero si estas signos tratan de disminuir la republica sería una deriva , un error. No puedo aceptarlo. Seria una traición a nuestra identidad". El primer mensaje del presidente francés fue sin palabras. En el escenario la bandera de Europa y la de Francia. Ninguna enseña corsa. Los nacionalistas corsos, en el gobierno de la isla tras ganar las elecciones, rechazan ser vinculados con los independentistas catalanes, reclaman una mayor autonomía que la lengua corsa se reconozca como cooficial y un estatus especial para los residentes. Macron apostó por promover un mayor desarrollo económico. Los lideres de Córcega no acudieron a un almuerzo previo con el presidente, ni aplaudieron su intervención, después si que se reunieron con Macron.