Italia fue pionera en proteger su sector turístico. El pasado verano, el Gobierno aprobó una serie de medidas para que los italianos pasaran sus vacaciones en el país para compensar la brusca caída de visitantes extranjeros. Así surgió el 'bono vacacional'. Las ayuda podía ser de un máximo de 500 euros, una parte se descontaba de los gastos de alojamiento y otra en la declaración de la renta. El Gobierno ha prorrogado la medida. [Última hora del coronavirus]
Foto: Via della Conciliazione en Roma (EFE/EPA/ANGELO CARCONI)