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  • El préstamo será para las necesidades de la banca y del propio Estado
  • El pequeño país del euro está muy lastrado por su exposición a Grecia

Después de 10 años sin representación en la Asamblea Nacional de Francia, el pasado domingo el ultraderechista Frente Nacional consiguió dos escaños.

Unos resultados precedidos del gran éxito de Marine Le Pen en la primera vuelta en las presidenciales de abril, cuando obtuvo el 18 por ciento de los votos, un récord en la historia del partido.Hay partidos de ultraderecha, como el Frente Nacional en Francia, el Partido Unión por el Futuro en Austria o el de la Libertad de Holanda que llevan años teniendo presencia, en mayor o menor grado, en la escena política. Pero la crisis ha hecho que surjan nuevos movimientos más radicales como el partido Amanecer Dorado en Grecia que, con escenas como ésta, han puesto en alerta a los europeos. Una forma de protestar contra el gobierno pero también contra los partidos tradicionales. Por eso, aseguran los analistas, el voto se radicaliza. También con nuevos partidos a la izquierda, como el liderado por el cómico Beppe Grillo en Italia, o de ideología poco clara, como el Partido Pirata en Alemania, una de las fuerzas que más está creciendo en el país.

Las elecciones del pasado domingo han tenido todas las características de los mejores dramas griegos: pasiones humanas, conflictos individuales, una puesta en escena dramática y un final trágico, -la salida del euro y el derrumbe de parte de la eurozona- que, al menos, se ha pospuesto. El nuevo mapa político sigue fragmentado pero tres formaciones, los conservadores de Nueva Democracia, los socialistas del Pasok e Izquierda Democrática, se han puesto de acuerdo, en un tiempo record, para formar gobierno. Queda al margen la oposición izquierdista de Syriza que con 71 diputados ha sido el segundo partido más votado en las pasadas elecciones. Grecia inicia una nueva etapa aunque la desconfianza de Europa hacia el país heleno no parece dispuesta a amainar mientras las cifras económicas no sean convincentes.