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La preocupación por la situación de la eurozona, por la deuda española y la situación de nuestros bancos ha estado hoy en muchas declaraciones no sólo dentro sino fuera España. El Ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, insistía esta tarde en que España no necesita un rescate. Por la mañana algunos interpretaron que el ministro de Hacienda pedía ayuda europea para los bancos españoles. Esta tarde, Montoro ha aclarado que no ha pedido ayuda sino una unidad bancaria para salir de la crisis. Desde la OCDE, su secretario general ha dicho que las reformas del Gobierno son las correctas y no ve lógico los intereses que España tiene que pagar por su deuda.

Nunca antes el presidente del Gobierno había defendido tan explícita y tan contundentemente la fórmula de los eurobonos. Pero esta vez se ha comprometido a llevarlos al Consejo Europeo, y a pedirle a la Unión que juegue un papel decisivo en la salida de la crisis. Diferencias también entre PSOE y Gobierno a la hora de encarar posibles pactos de Estado. Antes de someterse al último control del Senado antes del verano, por la mañana Rajoy se ha reunido con el Grupo Popular en la Cámara Alta.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha reconocido en el Senado que España tiene "un problema financiación, liquidez y sostenibilidad de la deuda", ha señalado que la solución "no depende solo" del país y ha solicitado a Europa que apoye "a quien lo necesite". Así se ha manifestado Rajoy en la sesión de control al Gobierno a pregunta del portavoz del PSOE en el Senado, Marcelino Iglesias, que le ha cuestionado sobre la situación económica.

Hoy desde el gobierno hemos oído también mensajes de calma. Tanto la vicepresidenta como el ministro de Hacienda insisten en que hay que huir del catastrofismo. Cristóbal Montoro además dice que, aunque ha tardado, parece que Europa está empezando a reaccionar.

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha asegurado este martes que España está "a la cabeza" del esfuerzo reformista en la UE y que en el mundo se empieza a "confiar en un país que está dispuesto a asumir su responsabilidad" y que "no se arredra ante nada". "La crisis tiene ahora dos adversarios: la voluntad de un país y la determinacion de un Gobierno. Los españoles ven que se cambia lo que no funciona. España está a la cabeza del esfuerzo reformista de la UE y empieza a reconocerse. Por ahí ya se dice: 'Los españoles están haciendo las reformas que su país necesita y con gran valentía. Y se empieza a confiar en un país que necesita una voluntad de mayor unidad", ha afirmado en un desayuno informativo Sáenz de Santamaría.