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Locos por los clásicos

Séneca. Haz ejercicio

En la carta II, 15 de “Las Cartas a Lucilio”, Séneca, el filósofo romano destaca la importancia de equilibrar el ejercicio físico con el cultivo del espíritu. Un filósofo como él recomienda el ejercicio y la práctica deportiva para poder estudiar y aprender, para alcanzar la sabiduría. Séneca hace suya la máxima latina “Mens sana in córpore sano”. Subraya que debemos ejercitar el cuerpo para mantenerlo saludable, pero -y a esto le da importancia- sin permitir que esta actividad consuma toda nuestra energía y tiempo, lo que podría llevarnos a descuidar el bienestar espiritual. Nos advierte sobre los peligros de obsesionarnos con la apariencia física, recordándonos que un cuerpo fuerte es inútil si no alimenta su espítiru. Séneca promueve un enfoque moderado hacia el ejercicio, asegurando que el verdadero vigor del alma se manifiesta en el juicio recto y la moderación en todos los aspectos de la vida. En el punto medio, está la virtud.

Séneca es un clásico para la vida: en un mundo que a menudo valora más la apariencia física que la salud mental. Séneca nos invita a reflexionar sobre la necesidad de encontrar un equilibrio entre ambos aspectos. Su filosofía no se limita a la contemplación y el estudio, sino que también incluye el cuidado del cuerpo como un componente esencial para una vida plena y equilibrada. Para Séneca, un cuerpo sano es fundamental para sostener una mente sana, y sus enseñanzas nos recuerdan que no debemos descuidar ni el ejercicio físico ni el cultivo del espíritu para lograr una vida verdaderamente saludable y virtuosa.

Como no hay nada más actual que los clásicos grecolatinos, les ponemos música actual. La banda sonora de la carta II, 15 de Séneca está formada por: “Voglio vederti danzare” de Franco Battiato; “Landslide” de FleetwoodMac y “Viva la vida” de Cold Play

En esta ocasión la serie de “La España vivida” va a volver a transitar por los caminos de la reflexión sobre el pasado reciente de nuestro país y sobre su presente de la mano de un buen conocedor de su historia. Nuestro invitado es el catedrático de Historia Universal Contemporánea y de España José Manuel Cuenca Toribio. Nacido en Sevilla el año en que terminó la Guerra Civil española, en 1939, desempeñó cargos docentes en Universidades de media España, entre ellas las de Navarra, Valencia, Barcelona, Córdoba y en la CEU San Pablo de Madrid. Su libro “Andalucía, historia de un pueblo”, le mereció el Premio Nacional de Historia en 1982. Es autor de varias decenas más de monografías, con títulos como “Historia de la Segunda Guerra Mundial”, “Aproximación a la historia contemporánea de la Iglesia en España”, “Historia General de Andalucía”, “El poder y sus hombres. Por quiénes hemos sido gobernados los españoles?” o “Amada Cataluña. Reflexiones de un historiador”, entre otros muchos. En paralelo ha sido también un prolífico articulista en prensa, donde ha tocado todos los palos, principalmente como comentarista de obras de escritores muy reconocidos, desde Tolstoi a Hemingway, pasando por los españoles Antonio Machado, Luis de Góngora o Federico García Lorca. También es Cuenca Toribio un buen conocedor de la historia de las ideas, o habría que decir de las ideologías, entre ellas las de los nacionalismos peninsulares y su evolución. De todo ello queremos hablar con nuestro invitado, para conocer su análisis de la evolución de España durante la segunda parte del siglo XX y este primer cuarto aún no completado del siglo XXI.

El Lyceum Club Femenino es una asociación surgida en 1926 gracias al impulso de mujeres de brillante trayectoria profesional. Esta entidad promovía la promoción de la mujer en diferentes ámbitos: la política, la educación, el arte o el mundo laboral. Uno de sus objetivos principales consistía en acabar con cualquier clase de discriminación por razón de sexo. Nos centramos en las semblanzas de tres mujeres que ocuparon puestos de responsabilidad en el Lyceum Club Femenino: María de Maeztu, Isabel Oyarzábal y Zenobia Camprubí.

Rosario Sánchez Mora, que pasó a la historia como Rosario 'Dinamitera', fue una miliciana que a los 17 años se alistó para defender el bando republicano, en el frente de Buitrago de Lozoya, durante la Guerra Civil. Perdió su mano derecha manipulando un cartucho y Miguel Hernández le dedicó un poema. En 1991 pasó por los micrófonos de Radio Nacional de España.

Belén Yuste y Sonnia L. Rivas-Caballero tienen verdadera devoción por la obra científica del Nobel Santiago Ramón y Cajal.

En 1850 los hermanos Allan y Robert Pinkerton fundaron la primera agencia de detectives del planeta en Chicago, La Agencia Nacional de Detectives Pinkerton. Unos años más tarde, en 1856 los hermanos querían contratar más detectives y pusieron un anuncio en el periódico de Chicago. Se presentó una joven viuda de 23 años llamada Kate Warne. Los Pinkerton pensaron que buscaba un trabajo de secretaria, la vieron despierta y decidieron contratarla. Kate se negó, ella quería ser detective. La mujeres no podían ser detectives. Ya iban a pedirle a Kate que se marchara cuando la joven les dijo: "Las mujeres somos las que menos sospechas levantamos y las que logramos que los hombres hablen más de la cuenta". Y la contrataron. Kate se inflitraba con mucha más facilidad que los hombres detectives. Kate se disfrazaba como nadie. Kate imitaba con mucho talento otros acentos y nacionalidades. Unos años más tarde fue ella quien descubrió un complot de los secesionistas más radicales para asesinar a Abraham Lincoln, se disfrazó, disfrazó a Lincoln le metió en un tren y le salvó la vida. Esta es la historia de la mujer que dio un gran paso para que las mujeres pudieran dedicarse a la profesión que quisieran y lo logró 60 años antes de que en EEUU permitieran a las mujeres ser policías. Kate Warne, una mujer, una diosa y una rebelde.

Pero qué invento es esto!

La cámara oscura

En este nuevo podcast de “¡Pero qué invento es esto!” vamos a hablar de un invento óptico, ancestral y misterioso, que ayudó a comprender la realidad física de nuestro mundo y que fue fundamental para el alumbramiento y el desarrollo de la fotografía, entre otras muchas cosas…

Y en la segunda parte intentaremos averiguar qué hay de cierto en las leyendas que lo relacionan con figuras míticas del Arte, como Vermeer, Velazquez o Caravaggio, y también con seres legendarios como el unicornio…

Si estos asuntos te interesan, apaga las luces y descárgate este podcast, que ya veras qué bien.

Los investigadores, Moisés Rodríguez Escobar y Francisco Rodríguez Jiménez han indagado en la evolución de la imagen de España en Estados Unidos desde los años 30 hasta la Transición democrática. En el interesante artículo, “El Encanto del Sur”, incluido en el ensayo colectivo “Somehow Different” (editorial La Catarata), identifican y analizan la acción cultural exterior y las campañas informativas impulsadas en ese periodo. Charlamos con ambos autores en este nuevo viaje cultural por la Historia compartida de España y Estados Unidos, planteando algunas preguntas de interés: ¿Qué grado de acceso tuvieron los representantes de la II República a los medios de comunicación de Estados Unidos? ¿Qué tipo de estrategias se siguen en ese periodo para ganarse la atención y la adhesión por parte de grupos de interés de Estados Unidos? ¿cuáles son las instituciones que se crean para alcanzar la difusión de la imagen deseada y quienes las personas encargadas para ello? ¿cuál es la recepción de los principales periódicos de Estados Unidos de las propuestas o estrategias españolas?

Segundones que hubieran podido reinar pero que no pasaron la nota de corte. Por ejemplo: John Field, el inventor del nocturno; el otro Mozart que nadie conoce, Camargo Guarnieri; y el íntimo enemigo de Pierre Boulez, Henri Dutilleux. Miguel Baselga en Lo que no me contaron en el conservatorio siempre sorprende.

Hoy en Por tres razones hablamos con el escritor Giles Tremlett, que acaba de publicar España. Una historia abreviada (Edit Penguin Random House). El ejemplar recorre la dilatada historia de un país que, por su ubicación geográfica en el sureste de Europa, se ha visto y sigue viéndose expuesto a vientos culturales (políticos, pero también meteorológicos) desde todos los puntos cardinales. 

El doctor en Periodismo e investigador Carlos Primo Cano ha publicado en la editorial Carpe Noctem el libro 'Las máscaras de Cleopatra. Génesis de una femme fatale (1830-1930)', un ensayo que tiene como origen la tesis doctoral del autor en el que indaga en las miradas masculinas de escritores y pintores desde el final del Romanticismo –Gautier, Moreau, Alma Tadema, Jean-Léon Gérôme– hasta el inicio de las vanguardias sobre la figura de Cleopatra VII, la última reina egipcia de la dinastía ptolemaica. En el Apúntatelo, Carlos Primo nos recomienda efusivamente visitar la exposición 'Ecologías de la paz', que se puede visitar en Córdoba hasta marzo de 2025, coorganizada por TBA21 Thyssen-Bornemisza Art Contemporary y C3A Centro de Creación Contemporánea de Andalucía.

Locos por los clásicos

Jenofonte. El económico

El primer tratado de economía es la obra Económico de Jenofonte, escrita en la primera mitad del siglo IV a. C. Es un diálogo socrático y, por tanto, su interés es moral y no práctico. Es fascinante que la primera obra sobre economía no sea un manual sino una interpretación moral. Algunos todavía no se han dado cuenta, dos mil cuatrocientos años después, de que, siguiendo a Rousseau, «quienes quieran interpretar la economía y la moral por separado no han entendido ninguna de las dos».

Economía viene de oikonomía, que viene a significar algo así como ‘el gobierno o administración de la casa’. La administración de la casa no se refería en principio a la gestión del dinero, sino a lo que expresa la palabra misma: la gestión y organización del oikos, que es la casa pero en el sentido más amplio, el lugar en el que viven y trabajan un conjunto de personas, la familia y los esclavos, así como la hacienda y los bienes en general. Tendríamos que recordárselo siempre a nuestros responsables políticos, que la economía es ‘administrar lo de todos, lo de casa’.

Como no hay nada más moderno que los clásicos grecolatinos, los podemos interpretar con música actual. La banda sonora del Económico de Jenofonte está compuesta por: “Catch the wind” de Donovan; “Don’t give up” de Peter Gabriel y “I will” de The Beatles”