El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha asegurado que ya han sido devueltas 2.700 personas de los alrededor de 6.000 migrantes que han entrado en Ceuta en las últimas horas. Los inmigrantes devueltos, asegura el Ejecutivo, son todos adultos, no incluyen menores porque a estos en ningún caso se les puede devolver inmediatamente.
Las ONG hablan de que se está expulsando a los inmigrantes sin garantías legales, de "devoluciones en caliente", aunque el tribunal europeo de derechos humanos avaló esta práctica el año pasado.
Marruecos está molesto porque España ha acogido en un hospital al líder del Frente Polisario y porque Alemania ha insistido en que la solución para el Sáhara Occidental debe ser negociada y avalada por Naciones Unidas. Un varapalo para Marruecos, que había sacado pecho después de que Trump reconociera su soberanía sobre la antigua colonia española. Relajar la vigilancia en el paso fronterizo de Ceuta es una prueba de su malestar.
Prácticamente un tercio de las personas que están llegando a Ceuta en la crisis migratoria que está sufriendo en las últimas horas son menores. Se estima que más de 1.500 niños y jóvenes han llegado ya a la Ciudad Autónoma. Jóvenes y niños que llegan nadando, corriendo, teniendo que recibir ayuda para pisar suelo español, algunos han tenido que permanecer solos en el agua acertando apenas a mantenerse a flote en el momento en el que eran rescatados por los equipos de salvamento. A todos se les harán pruebas isométricas para determinar su edad porque los menores en lugar de ser devueltos a Marruecos pasarán a a estar bajo la tutela del Gobierno ceutí. Las autoridades ya han comenzado a trasladarles a las naves de El Tarajal y al albergue provisional de Piniers, que ha sido habilitado para acogerles.
Ceuta está sufriendo la mayor crisis migratoria de su historia, con la llegada de más de 6.000 migrantes en menos de 24 horas. Son dos los puntos por las que han logrado entrar los migrantes: por la bahía norte, desde la playa de Belliones, y por el espigón que rodea el paso fronterizo del Tarajal. Los hombres, mujeres y niños que han entrado a través de la bahía norte lo han hecho aprovechando la marea baja para rodear a nado el espigón marítimo fronterizo de Benzú, apenas 400 metros separan la zona marroquí de Belliones y la española. A pesar de la corta distancia, al estar frente al estrecho de Gibraltar, es una zona donde las corrientes marinas son mucho más fuertes y la temperatura del agua al tratarse del atlántico, es más fría que en la bahía sur, por donde también han entrado un buen número de personas. Los que han entrado por aquí, lo han hecho sorteando un pequeño espigón, primero a nado y después a la carrera, que les ha dado acceso a la playa ceutí del Tarajal, la más cercana al paso fronterizo.
En Ceuta, en la playa de El Tarajal siguen llegando centenares de migrantes tras cruzar a nado el espigón que separa España de Marruecos. Se estima que hasta 9.000 personas podrían haber entrado en Ceuta. A lo largo de la mañana hemos visto a Cruz Roja auxiliando a muchas de ellas, miles son menores.
Las organizaciones están totalmente desbordadas. Una de ellas es Andalucía Acoge. Su delegada en Ceuta, Marina Pérez, ha dicho que en la ciudad hay dos pabellones habilitados para atender a las personas que han llegado, pero que el resto está en la calle. Han podido hablar con ellos y preguntarles por qué han venido. "Hemos estado hablando con gente que ha cruzado, y nos han contado que unos se han avisado a otros", ha dicho.
Los menores de edad, unos 1.500, están en un centro de menores. "Hasta donde sabemos, creemos que va a haber devoluciones, pero no sabemos hasta qué punto o cómo va a acabar esto", cuenta. Denuncia que se utilice a las personas para hacer presión. "Es una crisis humanitaria y una vez más utilizar a personas migrantes para presionar a España y a la Unión Europea. Es una medida de presión total", explica. Entre la población autóctona el ambiente es un poco tenso. "Es de entender. Aunque esperamos que se restablezca la normalidad lo antes posible y que tanto las personas que han llegado como los que viven aquí, puedan vivir dentro de un clima que no les repercuta y no les perjudique", concluye.
El presidente del Gobierno, que ha cancelado su agenda y visitará hoy Ceuta y Melilla, ha prometido firmeza para resolver la crisis de la ciudad de Ceuta. El Gobierno estudia qué ha pasado pero evita hablar de crisis o hacer referencia al ingreso en España del líder del Frente Polisario. Marruecos guarda un silencio total, pero lo que está ocurriendo es la consecuencia de la que Rabat advirtió hace semanas, cuando Ibrahim Gali fue ingresado en Logroño. Es habitual que el reino vecino aproveche la inmigración para presionar a España y también a Europa que, por cierto, recuerda a Marruecos que debe cumplir sus compromisos.
El presidente de Melilla, Eduardo de Castro, hablará esta mañana con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y le pedirá que refuerce la frontera. Teme que su ciudad se enfrente en las próximas horas a una situación parecida a la que está sufriendo Ceuta. “No descartamos que pase lo mismo. Va a depender de lo que haga Marruecos”. Según Castro, hay entre 100 y 500 subsaharianos intentando cruzar al otro lado de la valla. De Castro dice que ni Ceuta ni Melilla tienen capacidad para asumir esas llegadas y que, además, en el caso de inmigrantes subsaharianos, la situación se complica aún más: “Esos inmigrantes van directamente al CETI”. Lamenta que esto sea un mecanismo de Marruecos para presionar, en este caso, por la presencia en España de líder del Frente Polisario. “Siempre hay un motivo para usar a seres humanos con problemas que necesitan buscarse la vida. Es deleznable y una falta de respeto a nuestra soberanía”, ha dicho en RNE.
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha asegurado que ya han sido devueltas 1.500 personas de los alrededor de 6.000 migrantes que han entrado en Ceuta en las últimas horas y ha asegurado que se están tomando “todas las medidas necesarias para garantizar la seguridad, proteger las fronteras y proceder a la devolución de una forma efectiva y coordinada con las autoridades marroquíes”.
El ministro también ha detallado que, a lo largo de este martes, van a llegar 200 efectivos “para completar una plantilla de 1.100 agentes” en total. 150 de ellos son policías nacionales y, 50, guardias civiles que trabajarán, además, en patrullas conjuntas con la colaboración de las Fuerzas Armadas.
En solo un día han llegado a Ceuta5.000 inmigrantes y en las últimas horas cerca de un centenar a Melilla. La mayoría a nado y muchos de ellos, unos 1.500, menores. El goteo comenzó la madrugada del domingo y siguió a lo largo de todo el lunes. Al otro lado de la frontera, en Marruecos, los gendarmes no hicieron nada. La relación entre los dos países han pasado por etapas complicadas y, esta vez, todo indica que es la respuesta de Rabat a la decisión de España de acoger al secretario general del Frente Polisario, Brahim Ghali. Está hospitalizado en Logroño. El Gobierno cree que Marruecos ha aprovechado este detalle para reivindicarse. Hay que recordar que hace solo unos meses, el entonces presidente de EEUU, Donald Trump, reconoció la soberanía marroquí sobre el Sahara. Informa nuestra corresponsal diplomática, María Gámez.
Llegada sin precedentes de migrantes marroquíes a Ceuta. Unos 2.700 han alcanzado las costas de la ciudad autónoma a nado o en pequeñas embarcaciones hinchables. En algunos casos se trata de familias enteras y se estima que hay unos 700 menores. Esta madrugada alcanzaban la bahía norte los primeros migrantes. Desde entonces han ido llegando a centenares, en un goteo constante. A primera hora de la tarde ya se rozaban los mil. Esta llegada masiva coincide con un momento especialmente tenso en las relaciones diplomáticas entre España y Marruecos.
A las 20.00 horas, casi 3.000 personas migrantes han llegado a la ciudad autónoma de Ceuta por tierra y a nado. Isabel Brasero, responsable de Comunicación de Cruz Roja Ceuta, ha indicado que están “desbordados”. Todos nuestros recursos materiales y humanos están en el Tarajal”, ha señalado en 24 horas de RNE, donde ha lamentado no saber cuándo acabará “el conteo de personas” y ha destacado que “no paran de atender”. “Están llegando muchísimos menores y durante la madrugada, dos familias enteras”, ha comentado.
El Gobierno de Ceuta anunció que se establecería un protocolo sanitario ante la llegada masiva de personas inmigrantes. Brasero ha destacado que Cruz Roja Nosotros “siempre tiene el protocolo activado para este tipo de llegadas” tras todos los saltos a la valla que han vivido.
Entrada masiva de migrantes a Ceuta desde las costa marroquíes. Según la Delegación del Gobierno son más de dos mil personas las que han alcalzado las costas españolas, 300 de ellos menores , y siguen llegando a nado tanto por la Bahía Norte, como por el sur de la ciudad. Esta es la primera vez que se produce una situación así.
El gobierno de la ciudad autónoma estudia ahora donde alojar a estos migrantes. Esta llegada masiva coincide con un momento de tensión en las relaciones entre España y Marruecos.
Un centenar de migrantes han llegado la madrugada de este lunes a Ceuta a nado o con flotadores. Es la segunda llegada masiva desde que resurgieron tensiones diplomáticas entre España y Marruecos después de que el líder del Frente Polisario recibiera asistencia médica en nuestro país. Las llegadas se siguen produciendo, ante la inacción de los agentes marroquíes, según fuentes de la Guardia Civil. Entre los que han llegado hay menores y hasta familias completas.
Más de 80 inmigrantes marroquíes, entre ellos familias completas con menores, han entrado a nado esta madrugada en Ceuta, principalmente bordeando el espigón fronterizo.
Según los datos facilitados a Efe por fuentes policiales, las entradas se han ido produciendo a partir de las 02.00 horas de la madrugada 7 las últimas sobre las 08.00.
La mayor parte de las entradas se han llevado a cabo por la frontera norte de Benzú, por donde han conseguido entrar hasta familias enteras con varios menores de edad.
En este caso, las familias han entrado bordeando el espigón debido a la escasa distancia que separa Ceuta de Marruecos y sin que fueran detenidos por la Gendarmería marroquí.
Las últimas entradas se han registrado a primeras horas de la mañana por la frontera sur del Tarajal, lugar por donde han entrado a nado otro pequeño grupo de marroquíes.
La Guardia Civil envió numerosas unidades y la Cruz Roja Española ha desplegado un dispositivo especial en la zona para atender a estas personas, de las que una fue trasladada al hospital con síntomas de hipotermia y recibió el alta horas después.