Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

Esta noche la policía ha vuelto a cargar contra un grupo de personas que protestaban en la Puerta del Sol por el desalojo del día anterior. Ha habido, al menos, 4 heridos. Se ha producido ya de noche, después de que durante toda la tarde un amplio cordón de seguridad blindara el centro de Sol.

La marcha laica, que ha congregado a miles de personas en el centro de la capital de España, ha terminado con enfrentamientos en la zona de la Puerta del Sol entre manifestantes y agentes antidisturbios, que se han saldado con seis detenidos y once heridos leves, entre ellos dos policías nacionales. Uno de los agentes atendidos por sanitarios del Samur-Protección Civil ha tenido que ser trasladado con un corte en una mano a un hospital, además de una mujer con una contusión en una rodilla, según datos de las 23.30 horas facilitados a Efe por un portavoz de Emergencias Madrid.

La manifestación laica contra el uso de fondos públicos en la visita del papa ha arrancado alrededor de las 19.30 horas de este miércoles con ambiente festivo. Los manifestantes, convocados por Europa Laica y Redes Cristianas, y que ha contado con la participación de más 150 asociaciones, leyeron en Sol un manifiesta que reivindicaba la visita del papa, no como jefe de Estado, sino como autoridad moral, y de forma más austera.

Mañana, víspera de la llegada del Papa, asociaciones de ateos, laicos, cristianos de base y simpatizantes del 15M protestarán por el coste que va a tener la visita para las administraciones públicas y las empresas. Un gasto muy alto, dicen, para un país en crisis. A su juicio, se ha cruzado la línea que debe separar Iglesia y Estado.

Los participantes en los disturbios en el Reino Unido deberán limpiar las zonas que destrozaron, según ha anunciado este martes el viceprimer ministro británico, Nick Clegg. Se trata de una medida con la que el Gobierno de David Cameron quiere que los jóvenes procesados que no vayan a la cárcel afronten las consecuencias de sus actos, como medida disuasoria para que, quienes delinquen por primera vez, no vuelvan a hacerlo.