Hijo y sucesor del dictador norcoreano, un joven general de 29 años del que apenas se sabe nada, pero que hoy ha recibido el respaldo de China. En sus manos está el arsenal nuclear de Corea del Norte, y la estabilidad de una de las zonas más calientes del planeta.
FRANCISCO FORJAS (Corresponsal de RNE en Asia-Pacífico).- Continúa la preocupación por la situación en Corea del Norte tras la muerte de Kim Jong-il. Incluso China ha hecho llamamientos a la paz a su tradicional aliado. El corresponsal de RNE explica que el gobierno de Pyongyang ya ha advertido que no va a dar visados a periodistas occidentales.
La televisión pública norcoreana, KCTV, ha mostrado este martes fotografías del cadáver de Kim Jong-il, cuyo féretro reposa en el palacio de Kumsusan, a las afueras de la capital de Corea del Norte, Pyongyang.
En las imágenes se aprecia el cuerpo del dictador cubierto con una tela roja dentro de un sarcófago de cristal, que descansa a su vez sobre un lecho de flores rojas y blancas. Su hijo y sucesor, Kim Jong-un, ha rendido homenaje al féretro, en uno de sus primeros actos oficiales del que informan los medios estatales coreanos.
Compartirán información para garantizar una fuerte y rápida respuesta militar si fuera necesario
Lo que es casi seguro que el sucesor será su hijo, Kim Jong-un. La muerte del dictador norcoreano ha puesto en alerta a la comunidad internacional, recordemos que este país tiene capacidad nuclear, la y especialmente a Corea del Sur que ha declarado el estado de emergencia y ha aumentado la vigilancia en la frontera que comparten los dos países. La imprevisibilidad del régimen más opaco del mundo volvía a demostrarse con el lanzamiento de un nuevo misil en pruebas el mismo día del anuncio de la muerte de su líder.
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