Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba
  • El asesinato de dos guardias civiles en Barbate ha puesto en jaque el principio de autoridad en la comarca del Campo de Gibraltar
  • En el norte de Marruecos continúan las enormes extensiones de hachís de las que viven cientos de familias

"Necesitamos más medios y daremos todos los que sean necesarios". Son declaraciones del ministro del Interior, Grande-Marlaska, en el reportaje 'El ancho Estrecho', después de su reprobación tras el asesinato de dos guardias civiles arrollados por una narcolancha en Barbate.

Su muerte no sólo ha cuestionado el Plan Especial de Seguridad vigente, sino que ha puesto en evidencia la decisión de desactivar OCON Sur, el grupo de élite policial que en cinco años se había incautado de 1.700 toneladas de droga y había detenido a 19.000 personas relacionadas con el narcotráfico. Además, se suma la realidad que vive la zona: "Una mayor violencia de las organizaciones que trafican en El Estrecho", como detalla la fiscal jefe antidroga Rosa Ana Morán.

Hoy en Por tres razones, hablamos de la situación que rodea al fallecimiento de dos agentes de la Guardia Civil en Barbate, Cádiz, después de que una 'narcolancha' les arrollara. Nos preguntamos cómo es el perfil de los traficantes de drogas en Algeciras. Nos atiende Javier Bello, jefe del Área Regional de Vigilancia Aduanera de Andalucía, Ceuta y Melilla. Además, nos acompaña Daniel Grande, psicólogo y educador del Ayuntamiento de la Línea de la Concepción. Lleva 22 años trabajando con niños con problemas de conducta, absentismo y fracaso escolar.

La imagen es de las ocho toneladas de cocaína incautadas en Algeciras, el tercer mayor alijo interceptado en la historia de España.

Desde la muerte de los dos guardias civiles que fueron embestidos por una narcolancha en Barbate, Fernando Grande-Marlaska ha sido fuertemente criticado por PP y Vox. Entre los argumentos de la oposición, se encuentra el desmantelamiento de OCON Sur, la unidad antidrogas de la Guardia Civil. En 24 horas de RNE, Andros Lozano, periodista experto en narcotráfico y autor del libro ‘Costo’, ha expresado que no hubo una causa oficial sobre la desarticulación de este organismo policial y que en teoría se debía a que "era un grupo antinarcos muy costoso con más de 150 personas en comisión de servicio".

Sin embargo, el periodista ha explicado que probablemente la razón de su desaparición fuera otra: "Se ha ido sabiendo con el paso del tiempo que entre los altos mandos de la Guardia Civil se sabía que se iba a imputar a la persona que estaba al frente de OCON Sur por relaciones con un clan de narcotráfico". También ha manifestado que aunque el número de incautaciones de drogas ha podido aumentar, ahora mismo el negocio del narcotráfico se ha desplazado desde el Campo de Gibraltar hasta la desembocadura del río Guadalquivir. Y que esto probablemente se deba al fin de OCON Sur.

Tener una narcolancha es un delito de contrabando, incluso si están en tierra y sin carga ilícita se pueden intervenir. Su tenencia se castiga con penas de entre tres y cinco años de prisión. Pero a los narcotraficantes estas prohibiciones parecen no importarles demasiado, denuncian la Fiscalía y varios sindicatos de guardias civiles. Las embestidas son su táctica favorita para dar esquinazo a los operativos de Servicio Marítimo. A bordo de potentes lanchas que trucan incorporando motores de gran potencia, que pueden llegar a los 60 nudos de velocidad. La que utilizaron en Barbate tenía cuatro motores, pero según fuentes policiales, las hay incluso de seis.

La juez que investiga el asesinato de dos guardias civiles en Barbate (Cádiz) el pasado viernes sostiene que las cámaras de vigilancia del puerto, así como testigos presenciales esa noche y la pintura roja hallada en la narcolancha incautada a los detenidos confirman que estos son los autores del ataque. Eneko Carazo, periodista especializado en investigación de RTVE con acceso al auto, ha explicado las claves de la investigación en el canal 24 horas. Según el documento, los detenidos reconocen el narcotráfico, así como la descripción que hace la Guardia Civil de su huida, pero niegan haberse resistido a la autoridad y que fueran ellos los autores del ataque. Al mismo tiempo, señalan a otra narcolancha como posible autora del hecho. La policía continúa tomando declaraciones e investigando los dispositivos móviles de los encarcelados con el objetivo de geolocalizarlos en el momento de la embestida, así como buscar comunicaciones relacionadas con el hecho.