Hace un año el Gobierno puso en marcha el Ingreso Mínimo Vital. Se calculó entonces que podrían acceder unos 850.000 hogares. Pero el atasco en una administración desbordada por la pandemia ha ralentizado su despliegue. Además, quieren reajustar el diseño de la ayuda para que llegue a los más vulnerables.
FOTO: Varias personas guardan el turno para recoger lotes de comida en la parroquia de San Agustín de Barcelona. QUIQUE GARCÍA / EFE.
700.000 personas se benefician en nuestro país del Impuesto Mínimo Vital cuando está a punto de cumplirse un año de su aprobación. ¿Cómo afecta cobrar o no cobrar el Ingreso Mínimo Vital entre los más vulnerables? Josefa Carrasco vive en la Región de Murcia tiene 62 años, vive sola y sobrevivía con los 40 euros que ganaba a la semana por limpiar una casa. Ahora cobrar 460 gracias a la prestación. “Voy comprando lo justito. Tengo que hacerlo así”, afirma. Caso distinto es el de Susana García, también de Murcia, de 30 años, desempleada y con un hijo de tres. No le han dado el Ingreso Mínimo Vital porque vive con su padre que cobra la pensión. “Estaba esperanzada [en conseguirla]. Mi padre me puede ayudar en lo que puede, pero yo tengo que seguir hacia delante” La previsión en la Región de Murcia era que el Ingreso Mínimo Vital alcanzara a 45.000 hogares pero solo han conseguido 8.600 familias
La pandemia ha provocado que el Banco de Alimentos de Las Palmas haya pasado de ayudar a 21.000 personas a dar comida a 35.000, un crecimiento del 80%. "El confinamiento fue como un tsunami que arrasó las empresas de hostelería y provocó el abandono total de los turistas. Muchísimas personas que eran donantes han pasado a ser beneficiarios. Es una situación muy dura", nos ha contado Llorca.
En un principio pueden parecer grandes oportunidades, pero algunos anuncios de alquiler y venta de viviendas ofrencen espacios mínimos a precios desorbitados. Detrás de anuncios aparentemente atractivos se encuentran infraviviendas, un ejemplo es una "buhardilla con encanto en pleno casco histórico" que en realidad esconde un trastero pendiente de reforma.
14 meses después del inicio de la pandemia se siguen viendo colas de gente pidiendo ayuda para comer. Según el último estudio de Intermón Oxfam la pobreza severa en nuestro país, los que viven con menos de 16 euros al día, podría aumentar en 800 mil personas a consecuencia del COVID. Superaría los 5 millones. Foto: Un grupo de personas hace cola para alimentos en una parroquia EFE / Quique García.
El primer estudio sobre salud y equidad menstrual realizado en España concluye que dos de cada 10 personas no puede pagar productos para la regla y que cuatro de cada 10 no puede escoger el que necesita por culpa del precio. Una de ellas es Sonia, que es desde hace cuatro años usuaria de una ONG del barrio de Sant Antoni, en Barcelona, donde le proporcionan comida y otros productos. Los artículos de higiene femenina tienen un coste mensual demasiado elevado para ella.
Las organizaciones sociales calculan que en España hay unas 30.000 personas sin hogar, lo que dificulta su localización para la citación de la vacuna contra la COVID-19. La mayoría de comunidades no tiene un protocolo claro. En Extremadura, por ejemplo, la Junta ha pedido a Cáritas un listado de las personas sin hogar con las que trabajan, mientras que en Madrid las asociaciones ya trabajan en un registro. Las ONG piden que se les considere grupos vulnerables debido a su situación y que se priorice la inmunización con Janssen para evitarles desplazamientos. Coronavirus: última hora. Foto:GETTYIMAGES.
Casi dos millones de españoles no tienen recursos para pagar sus medicamentos, ni siquiera los cofinanciados por la Seguridad Social. Es un dato de la ONG Banco Farmacéutico, que, con la pandemia, ha recibido un 30% más de peticiones de ayuda.
Se trata de un mapa sonoro del Polígono Sur que radiografía el barrio con participación vecinal
Se diseña para contribuir a la construcción de identidades colectivas de barrios y lugares diversos mediante la creación de imaginarios sonoros compartidos
En los últimos meses, y por distintas razones, la infancia está siendo golpeada, no voy a decir de nuevo -porque no ha dejado de estarlo con mayor o menor intensidad- sino como viene siendo ya una triste realidad. Por supuesto, hay un impacto concreto de la Covid-19 pero también otros muchos temas que han tomado actualidad, como los aniversarios de las guerras en Yemen y Siria o la situación en la Cañada Real. Hablamos de todo ello con David del Campo, director de Cooperación Internacional de Save the Children.