Residencias de mayores demasiado grandes o sin posibilidad de atención personalizada. La pandemia sacó a la luz fallos en la atención a ancianos y otras personas dependientes en general. Este martes, el Gobierno ha aprobado una nueva estrategia para cambiar el modelo de cuidados. Parte de una premisa: atender todo lo que se pueda en el hogar.
El Ministerio de Derechos Sociales apuesta en su estrategia de cuidados por fragmentar grandes residencias en 'minipisos'. El plan, dotado inicialmente con 1300 millones de euros, aspira también a cambiar el modelo residencial de menores, migrantes o personas con discapacidad como Manuel y Josefa. Ahora viven en un piso compartido con asistencia diaria. Son pareja y en su antigua residencia no podían pasar demasiado tiempo juntos. 25 años dentro de una institución que dicen no echar de menos y que la nueva estrategia de cuidados quiere dejar atrás.
No obstante, en las asociaciones tienen dudas y ven difícil aplicarlo a corto plazo. "Estamos hablando de un sector en el que el 90% está en manos privadas. Por otro lado, el máximo de las horas mensuales de ayuda a domicilio está fijado en 94 horas y nos parece insuficiente", argumenta Miguel Vázquez, de la Plataforma por la Dignidad de las Personas Mayores en Residencias.