Juan Carlos I ha reinado durante casi 40 años en los que ha habido luces y sombras. El rey emérito ha simbolizado durante décadas la transición y la democracia en España, con un papel cumbre en el fracaso del golpe de Estado del 23-F y la modernización del país. Una imagen sin tacha de hombre cercano, deportista e íntegro marcaron una etapa brillante en la que se convirtió en un modelo para los españoles y en el mejor embajador internacional.
Sin embargo, las informaciones de los presuntos fondos del rey en el extranjero han sido clave en su salida de España, aunque el desgaste de su figura comenzó hace casi una década. Escándalos económicos, familiares y una relación turbulenta con Corinna Larsen, han supuesto un antes y un después en su declive.