Llevamos meses acostumbrados a ver con preocupación la curva de contagios. La que nos presentan hoy en el hospital de Alcorcón, en Madrid, sin embargo, alivia: compara la evolución de la enfermedad desde enero entre la población de la localidad y la de los sanitarios del hospital que recibieron la vacuna de Pfizer. En concreto, las infecciones cayeron un 62% después de la primera dosis y desaparecen con la segunda.
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Foto: Un enfermero administra la vacuna de AstraZeneca en el Hospital de Emergencias Enfermera Isabel Zendal de Madrid. EFE/ Emilio Naranjo