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El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha insistido en que no enviará tropas a luchar contra el Estado Islámico (EI) y ha obtenido el respaldo de la Cámara de Representantes para armar a los rebeldes sirios.

Se espera que el Senado vote este jueves sobre la medida, que permitiría al Departamento de Defensa aumentar sus armas a la oposición al régimen de Bachar Al Assad y entrenarlos desde Arabia Saudí para que se conviertan en un aliado interno en la ofensiva contra EI que EE.UU. prevé extender próximamente a Siria.

A diferencia de Al Qaeda, el Estado Islámico ha logrado controlar gran parte de Siria e Irak. La caída de Mosul, con más de un millón de habitantes en junio ha sido un punto de inflexión. Tienen  armas y existe el temor de que las transfieran a otros grupos en Africa y Asia que han prometido obediencia al líder del Estado Islámico Al Bagdhadi.  

Carlos Franganillo (Corresponsal de TVE en Washington). La estrategia de Obama para acabar con el Estado Islámico prevé la mínima exposición para los soldados de EE.UU. Ataques aéreos en Irak y no se descartan en Siria, aunque Obama ha dejado claro que no cooperará con el presidente sirio, Bachar al Assad. Es más, Obama quiere que el Congreso le autorice para armar y reforzar a la oposición moderada siria para que combata al EI mientras se busca una solución a la crisis en ese país. EE.UU. enviará a 450 militares más a Irak para apoyar a las tropas sobre el terreno. 

Una brigada yihadista femenina actúa en la ciudad siria de Raqqa, donde algunas mujeres ya han sido castigadas con azotes o latigazos por llevar el velo muy fino o andar solas por la calle. En el Reino Unido se dice que unas 60 británicas de entre 18 y 24 años habn ido voluntarias, entre ellas la supuesta líder del grupo.

"Corre. No camines hacia la tierra del Estados Islámico". Es el vídeo difundido por Estados Unidos para disuadir a los occidentales que planteen unirse a las filas de los yihadistas. Está dentro de la campaña "piénsatelo y vuelve". Han utilizado las propias grabaciones de los radicales, ejecuciones y decapitaciones, para retratar las atrocidades de los extremistas en Irak y Siria. Por su violencia explícita ha provocado críticas.